Cazadores de voces

En el a?o 1992 un equipo de hombres, formado por altos mandos de la Guardia Civil, profesores universitarios y becarios, comenz¨® a desarrollar una herramienta que revolucionaria el universo de las escuchas telef¨®nicas y terminar¨ªa utiliz¨¢ndose en departamentos de seguridad y defensa de Gobiernos de todo el mundo. Se trataba de un sistema biom¨¦trico de software equivalente a un fino o¨ªdo tecnol¨®gico, comparable al biosonar de un murci¨¦lago, capaz de identificar a un sospechoso por su voz con la misma fiabilidad que con una huella dactilar. Lo bautizaron como Batvox. Sus creadores podr¨ªan pasar a la historia como los batmen. Y su ¨²ltima v¨ªctima es el exministro de Hacienda franc¨¦s, J¨¦r?me Cahuzac.

La misi¨®n que les encomendaron al coronel Molero y al teniente coronel Lucena fue organizar el Departamento de Ac¨²stica e Imagen del Instituto Armado. Las voces de presuntos terroristas, narcotraficantes y corruptos resonaban en aquellas dependencias de la comandancia, donde ling¨¹istas especializados trataban de emparejarlas ¡°a o¨ªdo¡± con ¡°malos¡± ya fichados o detenidos.

¡°Ten¨ªamos que conseguir identificar a un sospechoso por su voz independientemente del mensaje (del texto) y de la lengua que hablase y, por otra parte, deb¨ªamos conseguir reducir al m¨ªnimo la tasa de error para que pudiera ser una prueba usada por el fiscal¡±, recuerda Lucena.

En la b¨²squeda de los t¨¦cnicos capaces de desarrollar la herramienta anhelada dieron, a mediados de los noventa, con Javier Ortega y Joaqu¨ªn Gonz¨¢lez-Rodr¨ªguez, dos j¨®venes profesores del ?rea de Tratamiento de Voz y Se?ales (ATVS) de la Universidad Polit¨¦cnica, que comenzaron a desarrollar la que hoy ¡ª1,2 millones de euros despu¨¦s¡ª es una tecnolog¨ªa l¨ªder en la autentificaci¨®n de voces. ¡°Ya no se trataba tanto de averiguar qu¨¦ se dec¨ªa sino qui¨¦n lo dec¨ªa, y poder demostrarlo de manera irrefutable¡±, recuerda el profesor Gonz¨¢lez-Rodr¨ªguez, que ahora trabaja en la Universidad Aut¨®noma de Madrid.

En Espa?a hay 5.000 voces fichadas. La de un traficante com¨²n llev¨® a descubrir a un miembro de una c¨¦lula salafista

El exministro socialista franc¨¦s Cahuzac no cont¨® con esa tecnolog¨ªa cuando el 19 de marzo, al evidenciarse que evad¨ªa impuestos al estilo del extesorero B¨¢rcenas, lo neg¨®: ¡°Ninguno de los elementos materiales que se aportan son convincentes¡±, dijo. Uno s¨ª lo era: su voz, la que dej¨® en un contestador hablando de su cuenta no declarada en Suiza.

¡°Hemos creado un software capaz de cotejar dos voces y manifestar el grado de probabilidad de que sean la misma¡±. Lo explica Javier Casta?o, alumno aventajado, amigo y exsocio de aquellos profesores de la Polit¨¦cnica, y director de la empresa Agnitio ¡ª¡°reconocimiento¡± en lat¨ªn¡ª, que ha patentado, comercializado e internacionalizado el sistema por todo el mundo.

¡°Escuche atentamente, por favor: le llamo en nombre de ETA para advertir de la colocaci¨®n de una potente furgoneta bomba en el parking de la Terminal 4 del aeropuerto de Barajas de Madrid, que va a explotar a las nueve, dentro de una hora¡±. Era el mensaje de voz con el que la banda terrorista pon¨ªa fin al ¡°alto el fuego permanente¡± de nueve meses, un d¨ªa antes de la Nochevieja de 2006, cuando media Espa?a viajaba para reunirse con familias o amigos y celebrar la llegada del A?o Nuevo. Dos j¨®venes ecuatorianos, Carlos Alonso Palate y Diego Armando Estacio, fueron las v¨ªctimas mortales del atentado. Aquella voz, que suena nerviosa en la grabaci¨®n de la Guardia Civil, pero que pone los pelos de punta igualmente, identific¨® a uno de los verdugos, el etarra Igor Portu, ahora en prisi¨®n. ¡°Bast¨® con grabarle despu¨¦s de ser detenido como sospechoso y contrastar ambas voces, la voz ¡°dubitada¡± ¡ªo dudosa, la que grabaron los bomberos¡ª y la ¡°indubitada¡± ¡ªla que posteriormente le grabamos detenido en la comandancia¡±, explica el teniente Ricardo Nieto, director t¨¦cnico del departamento de ac¨²stica de la Guardia Civil, que realiza entre 60 y 70 informes anuales. ¡°El caso de Portu daba un LR positivo¡±, concluye.

El LR es el cociente que mide la verosimilitud: hasta qu¨¦ punto esa voz identifica inequ¨ªvocamente al sospechoso. ¡°En un rango de cientos, la probabilidad es muy alta; y de miles, es alt¨ªsima¡±, explica Antonio Moreno, el t¨¦cnico de Agnitio que trabaja con ¡°los clientes¡±, la mayor¨ªa agentes policiales de laboratorios forenses de todo el mundo.

En Sud¨¢frica la Seguridad Social tambi¨¦n utiliza el autentificador como prueba de vida, para evitar el cobro fraudulento de pensiones

El resultado del cotejo es una gr¨¢fica con dos curvas horizontales. La roja equivale a lo que ser¨ªa una rueda de reconocimiento: ¡°Se toman otras voces de malos archivadas y parecidas a la que quiere ser contrastada (g¨¦nero, edad, acento...), es como si nuestro sospechoso fuese rubio y lo pondr¨ªamos con m¨¢s rubios¡±, explica Moreno. Eso permite valorar cu¨¢nto se distingue la voz sospechosa de otras probables y evitar falsos positivos. La curva azul es la que dibuja la voz del sospechoso grabada en el interrogatorio y archivada por la polic¨ªa. Por ¨²ltimo, la l¨ªnea verde es la que, al lanzar la voz dudosa, marca la ¡°verosimilitud¡±. Cuanto m¨¢s dentro est¨¦ de la curva azul ¡ªla del criminal verificado¡ª y m¨¢s lejos de la roja ¡ªlas de otros posibles¡ª m¨¢s positivo ser¨¢.

Las voces del delito hablan tambi¨¦n de modas criminales. ¡°Hasta hace cuatro o cinco a?os, hablaban sobre todo de terrorismo y, despu¨¦s, de corrupci¨®n urban¨ªstica, de narcotr¨¢fico, violencia de g¨¦nero, amenazas o extorsiones¡±, comenta el teniente Nieto.

Casta?o, junto a su actual socio, Emilio Mart¨ªnez, y a un equipo de 30 personas repartido entre Espa?a, Estados Unidos y Sud¨¢frica, son los batmen de Agnitio. La empresa se cre¨® en 2004 en un vivero de Vallecas y ahora, cien clientes despu¨¦s, cuando crece un 75% anual en ventas y est¨¢ participada por el fondo franc¨¦s Elaia y por el catal¨¢n Nauta, tiene su sede principal en plena Gran V¨ªa madrile?a. ¡°Trabajamos, en un 90% de los casos, con departamentos de seguridad de Gobiernos de todo el mundo y el 10% restante son bancos, aseguradoras y compa?¨ªas telef¨®nicas¡±. El Batvox se utiliza ya en 35 pa¨ªses de Europa, Am¨¦rica, ?frica y Asia y tiene un coste de unos 50.000 euros.

Y la demanda sigue. Lo ¨²ltimo son los archivos de voces ¡ªcomo los de huellas dactilares¡ª y las aplicaciones para iPhones o tel¨¦fonos de pantalla t¨¢ctil.

La polic¨ªa mexicana ¡ªque seg¨²n cuenta Moreno empieza por archivar las voces de sus propios agentes¡ª ya ha solicitado una ampliaci¨®n: ¡°Tienen capacidad para 25.000, pero quieren 100.000¡±. En Espa?a, el archivo de voces fichadas es de unas 5.000 ¡°y subiendo¡±. Esos dep¨®sitos han permitido localizar a delincuentes insospechados como ¡°un traficante com¨²n que fue grabado en Algeciras y, tiempo despu¨¦s, result¨® ser la voz que serv¨ªa de contacto en Argelia con una c¨¦lula de terroristas de un grupo salafista afincado en Espa?a¡±, cuenta el teniente coronel Lucena.

En el cap¨ªtulo de aplicaciones para m¨®viles acaba de surgir Kivox, que permitir¨¢ realizar operaciones con seguridad por tel¨¦fono, como transferencias bancarias. Entretanto, en Stellenboch (Ciudad del Cabo, Sud¨¢frica), un hombre blanco llamado Niko Brummer, con aires de cient¨ªfico y pinta de pescador, ¡°un gur¨² de la biometr¨ªa¡± unido a los batmen por Agnitio, ha encontrado un nuevo uso para el Batbox: ¡°Lo utiliza la Seguridad Social sudafricana como prueba de vida. Las familias no informan de las muertes de sus parientes para seguir cobrando sus pensiones. Ahora se graban las voces de los ancianos, se llama a sus casas y se comprueba si siguen vivos¡±.

Despu¨¦s de Batvox, eso de ¡°por razones de seguridad esta conversaci¨®n podr¨¢ ser grabada¡± suena distinto.