Del GAL a la ruina

Primer SMS, fechado el 22 de abril a las 13.36: ¡°Os tendr¨ªa que dar verg¨¹enza que Michel haya arruinado su vida por la inmoral cobard¨ªa de sus superiores y el indecente abandono de unos canallas sin honor¡±. Segundo SMS, el 23 de abril a las 13.27: ¡°?Os dais cuenta de lo canallas e inmorales que hab¨¦is sido con vuestro subordinado, no? C¨®mo hab¨¦is arruinado la vida de Michel. ?Cobardes! Primero fue [Juli¨¢n] San Crist¨®bal, despu¨¦s t¨²¡±.

?Jos¨¦ Amedo, de 67 a?os, el subinspector de polic¨ªa condenado a 108 a?os de c¨¢rcel por seis asesinatos frustrados de los Grupos Antiterroristas de Liberaci¨®n (GAL), la guerra sucia que en los a?os ochenta acab¨® con la vida de 23 miembros de ETA, ense?a al periodista estos dos mensajes en su tel¨¦fono m¨®vil Nokia durante un encuentro en la terraza de un restaurante en Madrid. El primer mensaje iba dirigido a Miguel Planchuelo, exjefe de la Brigada de Informaci¨®n de Bilbao. El segundo era para Rafael Vera, exsecretario de Estado para la Seguridad durante los Gobiernos de Felipe Gonz¨¢lez. Los dos fueron condenados por el secuestro de Segundo Marey, ciudadano franc¨¦s al que sus captores confundieron con un terrorista.

¡°?Os hac¨ªa falta el dinero de Michel para tener m¨¢s del que hab¨¦is robado, no? Vosotros hab¨¦is arruinado la vida de Michel. Esto no ha finalizado¡±. El expolic¨ªa, vestido con una Teba azul marino, camisa clara, pantal¨®n gris y cl¨¢sicos mocasines de borlas burdeos, se quita las gafas de sol, teclea su m¨®vil y muestra este otro SMS. Lo envi¨® minutos despu¨¦s del anterior al tel¨¦fono de Juan de Justo, exsecretario de Rafael Vera en el Ministerio del Interior.

"?Os da¨ªs cuenta lo canallas e inmorales que hab¨¦is sido con vuestro subordinario?", les dice Amedo a sus ex jefes en un SMS

¡°Ellos son los culpables de lo que le ha pasado a Michel Dom¨ªnguez¡±, apostilla el exmiembro de los GAL mientras apura un cigarrillo y bebe un refresco. Amedo y Dom¨ªnguez, este ¨²ltimo condenado a la misma pena que su jefe por contratar a los mercenarios que ejecutaron diversos atentados contra etarras en Francia, lograron la libertad condicional en 2000 tras cumplir las tres cuartas partes de su condena y pasar 12 a?os entre rejas.

Los SMS de Amedo a sus antiguos superiores tienen una explicaci¨®n. Michel Dom¨ªnguez, de 55 a?os, se encuentra hoy preso en una celda del m¨®dulo de funcionarios de la prisi¨®n de Quatre Camins, en Barcelona. El pasado d¨ªa 21 fue detenido en la estaci¨®n de tren de Sants por su presunta relaci¨®n con una banda dedicada al narcotr¨¢fico. Supuestamente, el expolic¨ªa y escudero de Amedo en los GAL serv¨ªa coca¨ªna a domicilio en una motocicleta. El auto de la juez Mar¨ªa Pilar Rovira se?ala que su implicaci¨®n en el caso se desprende ¡°de la investigaci¨®n, seguimiento y vigilancias a las que ha sido sometido¡±, as¨ª como de intervenciones telef¨®nicas y registros. Jorge Manrique, su abogado, le visit¨® el pasado viernes en prisi¨®n y asegura que le encontr¨® desconcertado. ¡°No sabe de qu¨¦ le acusan, solo que conoce a un colombiano detenido que trabajaba en la misma empresa de reformas que ¨¦l¡±, dice el letrado.

Los amigos de Dom¨ªnguez aseguran que desde hace a?os atraviesa dificultades econ¨®micas. Durante los ¨²ltimos 10 a?os, el expolic¨ªa ha trabajado de pe¨®n, colocando v¨ªas del AVE y ¨²ltimamente de operario en una empresa de reformas.

Michel perdi¨® su trabajo de operario y pidi¨® la ayuda de 400 euros, seg¨²n afirman sus amigos.

¡°?Qui¨¦n te coge cuando acabas de salir de la c¨¢rcel y durante a?os has estado en la portada de todos los medios?¡±, se pregunta Amedo. ¡°La ¨²ltima vez que le vi conduc¨ªa la camioneta de la empresa y estaba muy preocupado por el futuro de sus dos hijos, ya que la compa?¨ªa iba a cerrar. Solo ten¨ªa trabajos espor¨¢dicos, lo estaba pasando mal¡±. Otros amigos de Dom¨ªnguez aseguran que viv¨ªa ocasionalmente con su novia, se separ¨® de su mujer hace a?os, y en casa de un amigo. ¡°Entre el poco dinero que ganaba, algo m¨¢s de 1.000 euros, la pensi¨®n que ten¨ªa que pagar a su exesposa y atender a los hijos, no le quedaba nada. Hab¨ªa pedido la ayuda de los 400 euros¡±, describe uno de ellos.

La ¨²ltima vez que Michel vio a sus antiguos superiores fue hace dos a?os en la Audiencia Nacional en Madrid. Un tribunal juzgaba a Miguel Planchuelo, su exjefe en Bilbao, por los atentados contra etarras en los bares Batxoki y Consolation, en San Juan de Luz (Francia). Planchuelo es uno de los tres receptores de los incendiarios SMS de Amedo. En la antesala de la vista, Dom¨ªnguez se encontr¨® con Juli¨¢n San Crist¨®bal, exsecretario de Estado de Seguridad, y con Francisco ?lvarez, exjefe de la lucha antiterrorista en aquellos a?os, que declararon como testigos, y les pidi¨® ayuda. ¡°Les rog¨® que le consiguieran un trabajo porque estaba muy mal. Le dieron buenas palabras. ?lvarez le llam¨® ofreci¨¦ndole trabajar de taxista de noche, San Crist¨®bal ni respondi¨®¡±, relata Amedo.

?Y los 206 millones de pesetas (1,2 millones de euros) que el Gobierno del PSOE coloc¨® en cuentas suizas a nombre de las mujeres de los dos expolic¨ªas entre 1988 y 1994 para compensar su ingreso en prisi¨®n? ¡°Al final, no cobramos un duro¡±, asegura el expolic¨ªa. Baltasar Garz¨®n logr¨® que la justicia suiza embargara el dinero. Los jueces reconocieron que Dom¨ªnguez y su mujer hab¨ªan ingresado en la misma cuenta 30 millones de pesetas (180.000 euros) de la venta de su casa, pero esa cantidad qued¨® reducida a 98.000 al descontar los intereses del dinero evadido. Cuando el expolic¨ªa se dispon¨ªa a cobrarlo, Juan de Justo, el exsecretario de Vera, juzgado tambi¨¦n en la misma causa, otro destinatario de los SMS de Amedo, pidi¨® que se empleara en abonar su responsabilidad solidaria. Dom¨ªnguez perdi¨® as¨ª el ¨²ltimo pellizco que hab¨ªa logrado salvar del caso de los maletines.

La Justicia embarg¨® a los dos expolic¨ªas el mill¨®n de euros que el Gobierno les coloc¨® en cuentas suizas

Mientras formaron parte de los GAL y durante su estancia en prisi¨®n ¡ªhasta que Antonio Asunci¨®n lleg¨®, en 1994, al Ministerio del Interior y lo cort¨®¡ª, los dos expolic¨ªas cobraron importantes cantidades cuya cuant¨ªa no se ha podido acreditar, seg¨²n aseguran exfuncionarios de Interior consultados. ¡°Se lo gastaban todo. Eran unos descerebrados. Antes de ser detenidos viv¨ªan a todo tren¡±, afirma un exministro del Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez.