La Audiencia ordena la captura de dos imputados en el ¡®caso Emperador¡¯

El caso Emperador, la trama de blanqueo de capitales encabezada por el empresario chino Gao Ping, sufri¨® el pasado s¨¢bado un serio sobresalto. El matrimonio formado por Wang Feng, de 49 a?os, y Xu Kai, de 37 ¡ªuna de las patas fundamentales de la trama¡ª, ten¨ªa que acudir como cada d¨ªa a la sede de la Audiencia Nacional para demostrar que no se hab¨ªa fugado. Al caer la noche, los funcionarios del juzgado de guardia avisaron al instructor de la causa, Fernando Andreu, de que Wang y Xu, imputados por integraci¨®n en banda criminal, blanqueo de capitales y falsificaci¨®n de documentos, no hab¨ªan cumplido con la orden judicial de comparecer.

El domingo, por orden del juez, una patrulla del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa acudi¨® al domicilio del matrimonio, situado en la plaza de Jos¨¦ Villarreal, en el distrito madrile?o de Arganzuela. Como se tem¨ªan los agentes, nadie contest¨® a la llamada. Para entonces, la polic¨ªa ya hab¨ªa alertado a los puestos fronterizos para evitar que los dos ciudadanos chinos salgan de Espa?a. Este lunes por la ma?ana, el magistrado Andreu dict¨® la orden oficial de b¨²squeda y captura.

Wang y Xu est¨¢n situados en la c¨²pula de la organizaci¨®n delictiva liderada por Gao Ping. Seg¨²n fuentes judiciales, su papel consist¨ªa en enviar dinero a China mediante distintos procedimientos. Entre los m¨¦todos de evasi¨®n fiscal se encuentra el env¨ªo de transferencias bancarias con soporte en operaciones comerciales simuladas. Empresarios chinos y tambi¨¦n espa?oles entregaban en mano el dinero a Gao Ping, la pareja lo pon¨ªa a buen recaudo y despu¨¦s los fondos eran entregados a sus propietarios desde cuentas en para¨ªsos fiscales como Suiza, Panam¨¢ o Hong Kong.

Otro m¨¦todo consist¨ªa en el env¨ªo de giros postales con peque?as cantidades de divisas remitidas por ciudadanos chinos con residencia en Espa?a. Estas cantidades nunca superaban los 3.000 euros por trimestre, para no despertar las sospechas de las autoridades bancarias y contra el blanqueo de capitales.

El matrimonio fue detenido en la primera fase de la operaci¨®n Emperador en octubre de 2012. Un mes mas tarde, ambos fueron puestos en libertad por orden de la Secci¨®n Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, presidida por Alfonso Guevara, despu¨¦s de que prosperara un recurso de los abogados de algunos detenidos en el que se alegaba que las detenciones fueron ilegales al superarse las 72 horas de arresto en dependencias policiales. La fiscal¨ªa se hab¨ªa opuesto a la excarcelaci¨®n al entender que exist¨ªa un gran riesgo de fuga.

Por otro lado, la Sala de lo Penal de la Audiencia ha rechazado la puesta en libertad de Haibo Li, apodado como El Martillo y considerado el encargado del aparato de extorsi¨®n de la red de Gao Ping. Seg¨²n la Secci¨®n Tercera de lo Penal, recuerda que ¡°se han practicado nuevas pruebas¡± desde que se produjo la detenci¨®n de Li en octubre de 2012.

En concreto, se?ala el auto, ¡°se ha tomado declaraci¨®n a testigos que no solo atestiguan acerca de su pertenencia a la organizaci¨®n¡± sino que, adem¨¢s, ¡°le involucran directamente en las funciones de direcci¨®n de la facci¨®n de la banda dedicada al ejercicio violento¡± de coacciones y venganzas. Seg¨²n el tribunal, la permanencia de Haibo Li en prisi¨®n se justifica por la ¡°preservaci¨®n de los testigos¡±, para evitar el riesgo de obstrucci¨®n a la justicia y para la ¡°salvaguarda de las pruebas esenciales¡±.

Li Haibo fue excarcelado tambi¨¦n por la detenci¨®n policial excesiva. El pasado 16 de abril, el juez Andreu decret¨® de nuevo su ingreso en prisi¨®n al aparecer las nuevas pruebas, tanto testificales como documentales, contra ¨¦l. El Martillo est¨¢ imputado por pertenencia a organizaci¨®n criminal, blanqueo, falsificaci¨®n documental, delitos contra la Hacienda P¨²blica, amenazas, coacciones, extorsi¨®n, contrabando, cohecho, y delitos contra los derechos de los trabajadores y la propiedad intelectual.

Todas las actuaciones posteriores a las detenciones de octubre est¨¢n declaradas secretas por el juez Andreu. La causa avanza lentamente, entre otros motivos, por la necesidad de traducir del chino gran cantidad de documentos.