El ¡°milagro¡± extreme?o

Durante el a?o 2012 las comunidades aut¨®nomas realizaron un esfuerzo de consolidaci¨®n fiscal. Entre las m¨¢s destacadas se encuentra Extremadura, que logr¨® reducir su d¨¦ficit del 4,6% al 0,7% de su PIB en un solo a?o. Ha pasado de ser una de las comunidades con peores n¨²meros a presentar las cuentas m¨¢s saneadas. Un resultado asombroso y digno de admiraci¨®n.

El presidente de Extremadura, Jos¨¦ Antonio Monago, ha escrito en estas p¨¢ginas diversas l¨ªneas ensalzando su pol¨ªtica de consolidaci¨®n fiscal. Pero no se ha detenido ah¨ª, sino que ha puesto a Extremadura como ejemplo a seguir.

En este art¨ªculo, sin desmerecer el esfuerzo realizado por los extreme?os, queremos destacar varias cosas. Primero, que Extremadura ha conseguido reducir el d¨¦ficit gracias a dos factores que no podr¨¢n sostenerse en el tiempo; circunstancias extraordinarias que han afectado a los ingresos y un recorte sin precedentes de las inversiones p¨²blicas. Segundo, que algunas de las afirmaciones que el se?or Monago hace en sus art¨ªculos son err¨®neas. Y tercero, que el a?o 2013 va a ser igual de dif¨ªcil para Extremadura como para el resto de comunidades.

Empecemos por el principio. En 2012, Extremadura ingres¨® 152 millones de euros como resultado de la sentencia favorable del Tribunal Constitucional al impuesto sobre dep¨®sitos. Este impuesto fue aprobado en 2001 por la Junta de Extremadura pero se encontr¨® con un recurso en el Constitucional. El recurso ha hecho que este impuesto no haya sido abonado por casi 10 a?os. Los 152 millones son parte de las cantidades adeudas por las entidades financieras. Es verdad que quedan algunas cantidades por abonar y que a partir del 2013 el impuesto ser¨¢ compensado por el Estado, pero ambos conceptos supondr¨¢n ingresos mucho menores. Adem¨¢s, durante 2012 Extremadura recibi¨® un ingreso extraordinario de 31 millones por la liquidaci¨®n de gastos de farmacia del 2002. Sin estos at¨ªpicos ingresos, el d¨¦ficit extreme?o hubiese sido cercano al 2,0% del PIB (parecido al resto de las comunidades).

Sin ingresos extraordinarios, el d¨¦ficit habr¨ªa sido similar al de otras comunidades

Sumando que Extremadura ha reducido sus inversiones p¨²blicas en casi un 50% durante 2012, la rebaja del d¨¦ficit es menos asombrosa. Hacer pol¨ªticas de consolidaci¨®n v¨ªa reducci¨®n de inversi¨®n es f¨¢cil, pero comprometen el crecimiento futuro y no se pueden sostener en el tiempo.

Pasemos ahora al segundo punto. En sus art¨ªculos, el se?or Monago afirma que Extremadura es la comunidad menos endeudada del pa¨ªs. El Banco de Espa?a coloca a Madrid en esa posici¨®n. Extremadura se encontraba en octavo lugar con el mismo nivel de deuda sobre PIB que Galicia o Andaluc¨ªa.

El presidente extreme?o dice no entender c¨®mo es posible que Andaluc¨ªa haya sido incapaz de reducir su d¨¦ficit aun habiendo mermado su Estado de bienestar. Andaluc¨ªa no ha cumplido con sus compromisos y ha mermado su Estado de bienestar, pero es bueno recordar dos cosas. Primero, que de no ser por los ingresos extraordinarios, Extremadura habr¨ªa presentado un d¨¦ficit como el andaluz y, segundo, que Extremadura est¨¢ rebajando el Estado de bienestar. Para 2013, Extremadura ha presentado la reducci¨®n del gasto sanitario m¨¢s importante de todas las comunidades. No pretendemos criticar esta medida de ahorro, pero s¨ª recordar que los recortes en sanidad y educaci¨®n son una receta insalvable para las comunidades que quieran sanear sus cuentas.

El presidente tambi¨¦n presume de su dec¨¢logo de austeridad. Planes semejantes han sido puestos en marcha en otras comunidades y solo ha supuesto un ahorro de 100 millones para Extremadura. Muy poco para explicar una reducci¨®n del d¨¦ficit de casi 700 millones.

Finalmente, todo parece indicar que 2013 va a ser semejante a 2012 con respecto a los ingresos auton¨®micos. Esto puede ser sorprendente porque, dado que el IVA aument¨® en el 2012, se podr¨ªa esperar que los ingresos auton¨®micos aumentasen. El modelo de financiaci¨®n auton¨®mico indica que en caso de cambio impositivo el aumento de ingresos por este concepto debe compensarse con una reducci¨®n equivalente del fondo de suficiencia. Como los ingresos extraordinarios no van a ser tan importantes este a?o y la inversi¨®n no puede reducirse mucho m¨¢s, Extremadura deber¨¢ ajustar usando otras v¨ªas. De todas formas, es verdad que Extremadura debe a¨²n ingresar parte de los atrasos del impuesto sobre los dep¨®sitos. Estos ingresos extraordinarios le dar¨¢n una peque?a ventaja.

Resumiendo, el d¨¦ficit de Extremadura fue del 0,7% en 2012. El Gobierno del se?or Monago debe estar orgulloso, pero no debe dar lecciones de urbanidad. Por el contrario, deber¨ªa reconocer que la suerte se aline¨® con sus esfuerzos. Las apariencias pueden beneficiarnos en un momento dado, pero la sutileza es mejor aliado que el alarde.

Jos¨¦ Ignacio Conde-Ruiz es profesor de Econom¨ªa en la Universidad Complutense y Juan Rubio-Ram¨ªrez, en la Universidad de Duke (EE UU).