La oposici¨®n reclama autonom¨ªa total del supervisor de la Ley de Transparencia

El buen clima que ha presidido la primera reuni¨®n formal entre el Gobierno y los grupos de oposici¨®n sobre la Ley de Transparencia no ha ocultado las discrepancias, algunas profundas, entre el Ejecutivo y el resto de partidos. Despu¨¦s de siete meses de proleg¨®menos, con comparecencias de expertos y contactos oficiosos, se ha fijado el pr¨®ximo 30 de mayo como fecha para el primer debate parlamentario. En ¨¦l se discutir¨¢n las enmiendas a la totalidad por las que se pide la devoluci¨®n de la norma al Gobierno.

Izquierda Plural, UPyD y el Grupo Mixto han confirmado la presentaci¨®n de la enmienda a la totalidad, en tanto que PNV y CiU amagan, pero a¨²n no lo han decidido. El PSOE, primer partido de la oposici¨®n, ha optado por las enmiendas parciales, al ver en el Gobierno ¡°intenci¨®n de pactar¡±. Uno de los problemas que vislumbran los socialistas se centra en las caracter¨ªsticas de la persona que vigilar¨¢ el cumplimiento de la ley, al frente de la llamada Agencia Estatal de Transparencia, Evaluaci¨®n de Pol¨ªticas y Calidad de los Servicios, adscrita al Ministerio de Hacienda y Administraciones P¨²blicas. ¡°No queremos que al controlador lo controle el Ministro de Hacienda¡±, ha advertido la diputada socialista Meritxell Batet. Este resquemor lo comparten CiU, PNV, Izquierda Plural, BNG y otros partidos del Grupo Mixto. Les preocupa qui¨¦n controla al controlador.

Tal como est¨¢ ahora el anteproyecto sobre la figura del director de esta Agencia Estatal, queda claro que lo nombra el Gobierno, a trav¨¦s del ministro de Hacienda, que es de quien depende. El Ejecutivo ha recalcado, a trav¨¦s del secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Jos¨¦ Luis Ayll¨®n ¡ªconvocante de la reuni¨®n de hoy, en nombre y representaci¨®n de la vicepresidenta, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa¡ª, que esta figura ¡°ser¨¢ independiente¡±. Este deber¨¢ someterse al refrendo de las Cortes y su mandato ser¨¢ por cinco a?os para que exceda la duraci¨®n de una legislatura. Estos requisitos son a¨²n insuficientes para la oposici¨®n que, a trav¨¦s de sus enmiendas, establecer¨¢ m¨¢s garant¨ªas de independencia. ¡°No vemos que la autoridad que tendr¨¢ que vigilar el cumplimiento de la ley sea aut¨®nomo al 100%; queremos garant¨ªa de que solo pueda ser sustituido por motivos muy restrictivos y que no dependa del ministro de Hacienda¡±, ha explicado la socialista Meritxell Batet.

Detr¨¢s de esta exigencia de independencia para el supervisor de la ley, los argumentos que han desgranado los portavoces de la oposici¨®n ponen de manifiesto temores profundos. As¨ª, barruntan que desde el Ministerio de Hacienda, es decir, desde el Gobierno, se ejerza el control sobre otras Administraciones. Hay que dirigirse a la parte de ¡°Buen Gobierno¡± de la ley para explicar el resquemor de la oposici¨®n, al establecer que Hacienda tendr¨¢ capacidad sancionadora sobre los Ayuntamientos y potestad para destituir a alcaldes por incumplimiento en sus funciones. A ojos de la oposici¨®n, esta capacidad sancionadora es inconstitucional, al invadir competencias de las corporaciones locales y de las comunidades aut¨®nomas. ¡°Si quien est¨¢ al frente de la Agencia de Transparencia depende del Gobierno, no es independiente¡±, remacha Josep Nuet, de Izquierda Plural.

Este asunto ha saltado hoy a la palestra, despu¨¦s de que el pre¨¢mbulo de esta reuni¨®n y de los meses anteriores haya estado copado por la exigencia de incluir en la Ley de Transparencia a los partidos, los sindicatos, las organizaciones empresariales y, sobre todo, por el ¨¦nfasis puesto en la Casa del Rey. El propio Ayll¨®n y uno de los ponentes de la ley por el Grupo Popular, Esteban Gonz¨¢lez Pons, han asegurado que la Corona figurar¨¢ en el texto legal, ya que, seg¨²n el art¨ªculo dos, se incluir¨¢ tambi¨¦n el Consejo General del Poder Judicial, las Cortes Generales y el Defensor del Pueblo. Pero no todo est¨¢ resuelto ni cerrado sobre las cuentas que la Jefatura del Estado tendr¨¢ que rendir. ¡°No debe haber dudas de que la Casa del Rey tiene que dar cuenta de lo que tiene, lo que gana y lo que declara¡±, ha aclarado Batet para que nadie se llame a enga?o. La Casa del Rey se asimila a otros ¨®rganos del Estado pero ¡°no se especifica qu¨¦ tipo de cuentas va a rendir¡±, se ha quejado Josep Nuet, de Izquierda Plural.

Decepci¨®n en este y en otros grupos porque, adem¨¢s de buen tono y buenas palabras, el Gobierno no ha ense?ado sus cartas. Las fuentes gubernamentales consultadas precisan que se trataba de escuchar a la oposici¨®n. Ense?ar¨¢ sus cartas cuando crea que es el momento oportuno. De entrada, el pr¨®ximo d¨ªa 30, cuando previsiblemente la vicepresidenta del Gobierno, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, se suba a la tribuna de oradores para argumentar por qu¨¦ rechaza las enmiendas a la totalidad de la oposici¨®n.