Marruecos manifiesta la buena relaci¨®n con Espa?a mejorando las fronteras
Rabat ofrece abrir un nuevo paso en Melilla y mejora los accesos a Ceuta
Los jefes de la polic¨ªa y de la aduana marroqu¨ª en la frontera del Tarajal (Ceuta) pidieron, a principios de marzo, pasar al lado espa?ol y saludar a la ministra de Fomento, Ana Pastor, que visitaba el lugar. Le dieron la mano y le mandaron ¡°recuerdos¡± para Mariano Rajoy. Los acompa?antes de la ministra se sorprendieron del gesto inusual.
La cordial iniciativa de ambos funcionarios pone de relieve el nuevo clima que se est¨¢ instaurado en las fronteras que separan a Marruecos de dos ciudades, Ceuta y Melilla, que reivindica. Con m¨¢s de 20.000 peatones que las atraviesan los d¨ªas laborables y unos 2.500 veh¨ªculos son las fronteras m¨¢s transitadas de ?frica y, probablemente, tambi¨¦n las m¨¢s ca¨®ticas.
Cruzarlas como porteadora, que introduce mercanc¨ªas de contrabando en Marruecos, conlleva el riesgo de ser herida en una avalancha humana e incluso de fallecer aplastada. Las ¨²ltimas dos muertes se remontan a hace cuatro a?os en Ceuta. Cruzarlas como viajero supone con frecuencia largas horas de espera a causa de los atascos que surgen sobre todo al concluir los fines de semana.
Para tratar de que el tr¨¢fico sea m¨¢s fluido Rabat ha tomado dos iniciativas. Ha comunicado al Ministro de Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, su disposici¨®n a abrir un nuevo paso fronterizo con Melilla, seg¨²n anunci¨® la semana pasada el presidente de la ciudad, Juan Jos¨¦ Imbroda, al t¨¦rmino de una visita a Madrid.
Marruecos ¡°ha incluso efectuado ya los estudios t¨¦cnicos¡±, se?al¨® Imbroda a este peri¨®dico, aunque no hay fecha para empezar la obra. El presidente se alegra as¨ª de que ¡°disminuya la presi¨®n sobre los [tres] otros pasos fronterizos que est¨¢n muy recargados¡±. Paralelamente Fomento sacar¨¢ en julio la licitaci¨®n para las obras de mejora de Beni Enzar, la principal frontera de Melilla y la m¨¢s desordenada de cuantas posee Espa?a.
El Ministerio de Obras P¨²blicas marroqu¨ª est¨¢, por su parte, a punto de concluir en el Tarajal los trabajos de ampliaci¨®n del n¨²mero de carriles ¨Cque se elevar¨¢ a ocho- de acceso a Ceuta. Cada uno con su correspondiente cabina que evitar¨¢ a los conductores tener que bajarse del veh¨ªculo para hacer tr¨¢mites policiales y aduaneros. Francisco Antonio Gonz¨¢lez, el delegado del Gobierno en Ceuta, afirm¨® que Interior buscaba tambi¨¦n fondos para hacer otro tanto del lado espa?ol de la frontera.
¡°Es la primera vez que los trabajos en Bab Sebta [nombre que dan los marroqu¨ªes al Tarajal] van m¨¢s all¨¢ de lo meramente cosm¨¦tico¡±, constata el diario L¡¯Economiste de Casablanca. Hasta ahora ¡°la pol¨ªtica hab¨ªa siempre trabado el desarrollo de uno de los puestos fronterizos del pa¨ªs¡±, a?ade. Es decir, que Rabat rechazaba agilizar los accesos a las ciudades que quiere colocar bajo su soberan¨ªa.
Por mucho que se abran nuevos cruces y que se mejore los existentes, las fronteras de Ceuta y Melilla nunca se atravesar¨¢n con la misma fluidez con la que se pasa a Francia o a Portugal desde la Pen¨ªnsula. Para entrar en esas ciudades aut¨®nomas los marroqu¨ªes que no residan en las provincias lim¨ªtrofes de Tetu¨¢n y Nador necesitan un visado y comprobar que lo tienen requiere mayores controles.
Adem¨¢s los subsaharianos ejercen su presi¨®n migratoria no solo intentando saltar la valla, sobre todo la de Melilla, sino escondi¨¦ndose en los dobles fondos de veh¨ªculos que tratan de cruzar la frontera. De nuevo los registros minuciosos para impedirlo alargan las colas.
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