Naruhito de Jap¨®n se hace coriano

Coria del R¨ªo es ese lugar del mundo en el que Mar¨ªa Josefa le pide a voces a su menudo marido que se quite las gafas. Su esposo le hace caso y la familia estalla en carcajadas. "?Lo ves, lo ves!", corean todos. Y tienen raz¨®n: el esposo sin las gafas parece un perfecto japon¨¦s, aunque con la cara tostada por el sol. Manuel es de Coria y se apellida Jap¨®n. Su familia est¨¢ convencida, como tantos otros japones de este municipio sevillano, que es descendiente de la embajada Keich?.

Este a?o se cumple el cuarto centenario de aquella aventura encabezada por el samur¨¢i Hasekura Tsunenaga, que parti¨® de la ciudad japonesa de Sendai en 1613 y recal¨® en Coria del R¨ªo un a?o despu¨¦s. Aquel fue el primer contacto diplom¨¢tico de la historia entre Jap¨®n y Espa?a. Los expedicionarios ten¨ªan la misi¨®n de conseguir el permiso del rey Felipe III para comerciar con las colonias espa?olas.

Pero Hasekura y los suyos, despu¨¦s de recorrer Espa?a, Francia e Italia, se marcharon sin conseguir su objetivo. Sin embargo, varios historiadores apuntan a que los viajeros orientales dejaron una huella en la localidad sevillana. Se supone que los que hoy llevan Jap¨®n en el DNI son los descendientes de aquellos viajeros orientales. "Debieron de dejar a un mont¨®n de corianas embarazadas", calcula Juan, un anciano vecino de Coria, mientras repasa mentalmente la cantidad de gente que conoce que se apellida as¨ª. Hoy hay m¨¢s de 600 japones en Coria.

El pr¨ªncipe heredero de Jap¨®n, Naruhito, se ha encontrado este viernes con un grupo de ellos, entre los que estaban el ex¨¢rbitro de f¨²tbol Jos¨¦ Jap¨®n Sevilla y el rector de la Universidad Internacional de Andaluc¨ªa, Juan Manuel Su¨¢rez Jap¨®n.

El heredero tambi¨¦n ha recorrido las calles de este municipio sevillano, donde viven unas 30.000 personas. La visita ha sido una de las paradas del viaje oficial que est¨¢ realizando por Espa?a con motivo de los 400 a?os de la embajada Keich?. El pr¨ªncipe finaliza este s¨¢bado el viaje en Santiago de Compostela.

Naruhito ha hecho este viernes el tour completo por Coria: paseo junto al Guadalquivir, visita al Ayuntamiento, recorrido por las calles y parada en un colegio. Tambi¨¦n ha plantado un cerezo ¡ªun simb¨®lico ¨¢rbol para los nipones¡ª junto a la estatua dedicada a Hasekura que hay en el parque Carlos de Mesa de esta ciudad.

Juan Francisco Jap¨®n Carvajal, presidente de la Asociaci¨®n Hispano Japonesa Hasekura Tsunenaga, le ha acompa?ado durante todo el recorrido. Junto a la estatua del samur¨¢i le ha contado a Naruhito que fue un regalo que la ciudad de Sendai le hizo a este municipio andaluz a principios de los noventa.

Coria del R¨ªo tambi¨¦n es ese lugar en el mundo en el que Naruhito se ha olvidado del r¨ªgido protocolo. Los d¨ªas previos a la visita del heredero varios miembros de la Embajada de Jap¨®n en Espa?a estuvieron aleccionando a las personas que iban a tener contacto con el pr¨ªncipe sobre la parafernalia que le rodea. "El protocolo japon¨¦s es especialmente estricto", detalla Jap¨®n Carvajal. El heredero nip¨®n no puede recibir regalos, no puede descorrer las cortinillas de las dos placas conmemorativas que se han inaugurado, solo se le saluda con una inclinaci¨®n de la cabeza...

"El pr¨ªncipe se ha saltado el protocolo", ha relatado Jap¨®n Carvajal tras la visita oficial. "Le ha dado la mano, uno a uno, a los japones que hab¨ªa en el parque". El presidente de la Asociaci¨®n Hispano Japonesa Hasekura Tsunenaga ha contado tambi¨¦n c¨®mo Naruhito, en su arranque de imperial campechan¨ªa, tambi¨¦n ha saludado a cientos de adultos y ni?os que esperaban el paso de la comitiva tras unas vallas rojas.

"Naruhito estaba sorprendido por la acogida", ha detallado Jap¨®n Carvajal. Y es cierto que las aceras de Coria del R¨ªo ¡ªprincipalmente en las que daba la sombra¡ª estaban llenas de gente. "Tambi¨¦n le sorprendi¨® que fueran tantos japoneses a verlo", ha a?adido.

Junko, paraguas contra el sol en mano, ha sido una de esas japonesas que se han acercado a Coria para ver pasar al pr¨ªncipe. "Quer¨ªa verlo un vez en la vida", ha dicho esta tokiota que reside en Sevilla desde hace 12 a?os. En cierto modo, Junko, que se ha casado con un espa?ol, ha seguido los pasos del samur¨¢i Hasekura cuatro siglos despu¨¦s. Pero ella no acudi¨® a Espa?a en misi¨®n diplom¨¢tica: ¡°Vine para aprender flamenco y me acab¨¦ casando con un espa?ol¡±.