El restaurante del espionaje recibi¨® 100 euros de un ¡°asistente¡± de la l¨ªder popular

Los responsables del Partido Popular (PP) en Catalu?a eran clientes habituales del restaurante La Camarga, en Barcelona. Tanto, que hasta ten¨ªan abierta una cuenta propia. El almuerzo entre Alicia S¨¢nchez-Camacho y Victoria ?lvarez, sin embargo, fue una excepci¨®n y no se pag¨® con cargo a esa cuenta. El 6 de julio de 2010, un d¨ªa antes de que se celebrara la comida, un hombre que se present¨® en el local como ¡°asistente¡± de la dirigente popular abon¨® 100 euros en efectivo para pagar la comida, confirman los responsables del local.

La tesis del restaurante coincide en esencia con la expuesta por el exdetective de M¨¦todo 3 Alejandro Borreguero, uno de los presuntos autores materiales de la grabaci¨®n, con micr¨®fono oculto, del encuentro. Borreguero asegura que es el hombre que se present¨® como asistente y que pag¨® la comida por anticipado. El responsable del local que le tom¨® nota y recibi¨® el dinero, sin embargo, no puede afirmar con rotundidad que hablara con ¨¦l: han pasado casi tres a?os desde entonces y no es capaz de recordar ni la identidad ni el aspecto de quien hizo la reserva. Lo que est¨¢ claro es que S¨¢nchez-Camacho acudi¨® al d¨ªa siguiente al restaurante para comer con la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola, por lo que sab¨ªa que exist¨ªa una reserva a su nombre.

Esa circunstancia queda confirmada por la grabaci¨®n del almuerzo en La Camarga que estos d¨ªas circula por las redes sociales. En un momento de la comida, la dirigente admite que la mesa estaba a su nombre, aunque bromea con el hecho de que no est¨¢ segura de si su ¡°asistente¡± hab¨ªa reservado a nombre de ¡°S¨¢nchez¡±, de ¡°Camacho¡± o de ¡°S¨¢nchez-Camacho¡±.

Un juzgado de Barcelona investiga un presunto delito de revelaci¨®n de secretos por la presunta grabaci¨®n ilegal. Hace unas semanas, la l¨ªder del PP catal¨¢n pidi¨® que se archivara la causa tras llegar a un acuerdo con M¨¦todo 3. Pero la fiscal¨ªa ha pedido a la juez que la investigaci¨®n siga adelante para averiguar qui¨¦n encarg¨® la grabaci¨®n. Entre otras diligencias, la juez pidi¨® al restaurante la factura del almuerzo. Su abogado, Jorge Navarro, remiti¨® al juzgado el ticket, en el que consta la fecha, pero no el nombre de la persona que abon¨® la comida. Navarro considera que el caso ha da?ado la imagen del restaurante, que ha perdido desde entonces hasta un 30% de su clientela.