El Gobierno pide a Filipinas el indulto del preso espa?ol Francisco Larra?aga
El reo fue condenado a pena de muerte en el pa¨ªs asi¨¢tico Tras abolirse las ejecuciones en esta naci¨®n, fue trasladado a Espa?a para finalizar su condena


El indulto es la ¨²nica esperanza para Francisco Larra?aga, preso en Martutene (Gipuzkoa) y excondenado a muerte en Filipinas en un proceso plagado de irregularidades. Despu¨¦s de que se conmutara su pena de muerte por la cadena perpetua, el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero logr¨® traerlo a Espa?a en 2009. A cambio, cumplir¨ªa la pena m¨¢xima prevista en nuestra legislaci¨®n: 40 a?os de prisi¨®n. El Ejecutivo espa?ol no puede indultarlo directamente, ya que fue juzgado en Filipinas, y por eso ahora, despu¨¦s de que los ministerios de Justicia y Exteriores hayan estudiado su expediente, ha optado por solicitar la medida de gracia al Gobierno del pa¨ªs que lo conden¨®. El Consejo de Ministros aprob¨® ayer la tramitaci¨®n del indulto.
Larra?aga, de padre vasco y madre filipina, fue penado en 1997 por la desaparici¨®n de las hermanas Maryjoy y Jacqueline Chiong en Ceb¨², una isla situada a unos 500 kil¨®metros de Manila. Los cuerpos de las j¨®venes nunca fueron hallados. Apareci¨® un cad¨¢ver que se atribuy¨® a Maryjoy, pero no se practicaron pruebas de ADN y los reconocimientos fueron confusos. Larra?aga fue condenado en 1999 por detenci¨®n ilegal y secuestro sin poder declarar en el juicio, sin poder presentar apenas testigos ni pruebas de descargo de todo tipo que acreditaban que el d¨ªa del crimen ¨¦l estaba en Manila y no en Ceb¨².
La sentencia se bas¨® solo en el testimonio de un delincuente que no conoc¨ªa a los acusados, que asegur¨® haber participado en el crimen y que sorprendentemente no fue condenado. El Supremo elev¨® m¨¢s tarde la condena a pena de muerte, que fue finalmente conmutada por la entonces presidenta Gloria Macapagal en 2006.
Para traerlo a Espa?a, el Ejecutivo se comprometi¨® a hacer cumplir su pena. Larra?aga est¨¢ en la prisi¨®n de Martutene en r¨¦gimen de segundo grado, aunque con las ventajas que permite la aplicaci¨®n del art¨ªculo 100.2 del reglamento penitenciario ¡ªpor el cual se pueden aplicar medidas que van m¨¢s all¨¢ de las que corresponder¨ªan seg¨²n la clasificaci¨®n penitenciaria¡ª. Larra?aga sale cada d¨ªa de prisi¨®n para estudiar en la escuela de cocina de Argui?ano y ya tiene permisos. Ha cumplido casi 16 a?os en prisi¨®n entre el tiempo pasado en c¨¢rceles filipinas y espa?olas.
El siguiente paso, una vez aprobada la tramitaci¨®n del indulto, le corresponde al Ministerio de Asuntos Exteriores: trasladar formalmente la petici¨®n de indulto al Gobierno de Filipinas, lo que se podr¨ªa hacer a trav¨¦s del embajador filipino en Espa?a o a trav¨¦s del embajador espa?ol en el pa¨ªs asi¨¢tico.
Larra?aga viaj¨® recientemente a Madrid con un permiso para asistir a unas jornadas contra la pena de muerte organizadas por el Consejo General de la Abogac¨ªa Espa?ola. Ese d¨ªa habl¨® del posible indulto con EL PA?S, y de sus esperanzas en que finalmente salga todo bien. ¡°Pero solo hago planes a corto plazo, de seis meses en seis meses¡±, se?al¨®. El documental Give up tomorrow (R¨ªndete ma?ana) desmenuz¨® en 2011 el caso de Larra?aga, sus juicios y las m¨²ltiples irregularidades del proceso.
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