El Gobierno duplica las multas por alcohol y veta los detectores de radares

La multa por conducir despu¨¦s de haber tomado una cantidad de alcohol superior a la permitida, o bien alg¨²n tipo de drogas, pasar¨¢ de 500 a 1.000 euros. Con la filosof¨ªa de la ¡°tolerancia cero¡± para la conducci¨®n bajo los efectos de los estupefacientes, el Gobierno present¨® ayer tras el Consejo de Ministros un borrador del anteproyecto de la reforma de Ley de Tr¨¢fico y Seguridad Vial cuyo primer bloque entrar¨¢ en vigor a principios del a?o pr¨®ximo.

En esta primera tanda de medidas de seguridad vial aparece tambi¨¦n la prohibici¨®n expl¨ªcita de que los conductores usen detectores de radares, que est¨¢n sancionados con multas de hasta 6.000 euros desde 2010, y la obligaci¨®n para los ciclistas menores de edad de llevar casco en cualquier tipo de v¨ªa ¡ªhasta ahora solo es obligatorio en las interurbanas¡ª, independientemente de la edad.

El ministro de Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, aleg¨® que la influencia del alcohol y las drogas en las carreteras es uno de los principales problemas para la seguridad vial. Se trata de la tercera causa de accidentes mortales en Espa?a, por detr¨¢s de las distracciones y el exceso de velocidad. Casi uno de cada dos conductores muertos en las carreteras en 2011 ¡ªlos ¨²ltimos datos de los que dispone la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico¡ª hab¨ªan consumido alguna sustancia psicoactiva antes de ponerse al volante, y uno de cada cinco automovilistas afirman que se ponen al volante despu¨¦s de ingerir este tipo de productos.

Los controles de alcoholemia se har¨¢n, a partir de la entrada en vigor de la ley, que est¨¢ a¨²n pendiente de tr¨¢mite parlamentario, con una muestra de saliva, en lugar del aire espirado, como ocurre hasta ahora. La prueba de contraste seguir¨¢ siendo la sangu¨ªnea. El borrador no indica, sin embargo, si se modificar¨¢n los m¨¢ximos permitidos (0,25 miligramos por litro en aire espirado y 0,5 gramos por litro de sangre).

La multa de 1.000 euros se aplicar¨¢ tambi¨¦n a los conductores y otros usuarios que est¨¦n implicados en alg¨²n accidente o hayan cometido una infracci¨®n y que se nieguen a someterse a la prueba de alcoholemia.

Despu¨¦s del intenso debate sobre la necesidad de obligar a los ciclistas a llevar casco en v¨ªas urbanas, la nueva normativa se limitar¨¢ a imponerlo a los menores de edad ¡°en cualquier tipo de v¨ªa urbana, interurbana o traves¨ªa¡±. El Gobierno aplaza su decisi¨®n sobre los adultos hasta la reforma del Reglamento General de Circulaci¨®n, que empezar¨¢ durante la primavera del a?o que viene y que no est¨¢ sujeta a votaciones en el Congreso. El titular de Interior ha apuntado que, consciente de la controversia que genera esta medida, el Ejecutivo buscar¨¢ acuerdos en esta materia en una subcomisi¨®n de Tr¨¢fico y Seguridad Vial del Congreso, a trav¨¦s de la que los grupos podr¨¢n introducir enmiendas (siempre que haya un acuerdo ¡°con suficiente consenso¡±) hasta la culminaci¨®n parlamentaria.

El Gobierno mantiene tambi¨¦n su determinaci¨®n por aumentar el l¨ªmite de velocidad hasta los 130 kil¨®metros por hora en la mayor¨ªa de autopistas y autov¨ªas, como anunci¨® D¨ªaz en junio. La intenci¨®n del Ejecutivo es dejar tambi¨¦n este aspecto fuera de la ley y desarrollarlo en el reglamento posterior. Los casos ¡°excepcionales¡± en los que est¨¦ permitido circular a esa velocidad ser¨¢n se?alizados en las pantallas electr¨®nicas de las carreteras porque depender¨¢ de las condiciones de la v¨ªa y la situaci¨®n clim¨¢tica. En la pr¨¢ctica, el nuevo l¨ªmite ser¨¢ efectivo en el 80% de autopistas y autov¨ªas y en la mayor parte del a?o (salvo situaciones de nevadas, heladas o lluvias intensas, seg¨²n Interior).

Esta modificaci¨®n no estar¨¢ contemplada en la ley, sino que se incluir¨¢ en un reglamento posterior que incluir¨¢ tambi¨¦n la reducci¨®n de la velocidad m¨ªnima en otros tipos de v¨ªas y que est¨¢ previsto que entre en vigor a principios del pr¨®ximo verano. El Gobierno deja la puerta abierta, sin embargo, a introducir en la ley nuevas sanciones por infringir los l¨ªmites de velocidad.

¡°Es un contrasentido permitir el uso de mecanismos que tienen como principal finalidad eludir los controles de velocidad¡±, critica el Gobierno para argumentar la prohibici¨®n de los detectores de radares. Hay aparatos inhibidores, adem¨¢s, que hacen que los radares ni siquiera detecten a los coches que los llevan instalados.