¡°?Tengo el indulto de un rey! ?Por qu¨¦ sigo en la c¨¢rcel?¡±
Presos espa?oles indultados por Mohamed VI en julio siguen en la c¨¢rcel un mes despu¨¦s Marruecos les exige multas cuantiosas para salir, y algunos est¨¢n enfermos
¡°?Tengo el indulto de un rey! ?Por qu¨¦ sigo aqu¨ª?¡±, clama desesperada, al tel¨¦fono desde el pabell¨®n de mujeres de la c¨¢rcel de Tetu¨¢n Consuelo Valle And¨²jar, una de los 48 presos espa?oles que Mohamed VI indult¨® el pasado 30 de julio ¡ªentre ellos, por error, el pederasta Daniel Galv¨¢n¡ª para festejar el d¨ªa del trono y como gesto hacia don Juan Carlos tras su viaje de cuatro d¨ªas a Rabat. El indulto, como a otros presos espa?oles, no ha servido de nada a Valle, porque es incapaz de pagar la multa que las autoridades marroqu¨ªes le exigen para dejarla libre. ¡°Empezaron pidiendo 165.000 euros y ahora el abogado marroqu¨ª dice que son 13.000. Pero no los tengo, y mi familia tampoco. Por eso sigo aqu¨ª, por dinero¡±.
De hecho, cuando le notificaron el indulto, Valle And¨²jar, de 40 a?os, ya hab¨ªa cumplido su pena de 15 meses de c¨¢rcel por un delito de tr¨¢fico de drogas. ¡°Mi condena hab¨ªa terminado el 25 de mayo pero yo segu¨ªa aqu¨ª por no pagar la multa. En Marruecos, si no pagas, te dejan un a?o m¨¢s en prisi¨®n. El 30 de julio vino una funcionaria de la c¨¢rcel y me dijo: ¡®Consuelo, ma?ana te vas. El Rey te ha concedido el indulto por la fiesta del d¨ªa del trono y ahora est¨¢n preparando tu dossier abajo¡¯. Pero pasaban los d¨ªas y yo no sal¨ªa. Llam¨¦ al consulado espa?ol y me dijeron que efectivamente estaba en la lista de indultados, pero que ten¨ªa que pagar de todos modos la multa de aduana¡±, relata Valle desde prisi¨®n.
Como ella hay otros presos espa?oles en la misma situaci¨®n. "Para abandonar la c¨¢rcel, la legislaci¨®n marroqu¨ª", explican fuentes de la Oficina de Informaci¨®n Diplom¨¢tica, ¡°exige que los presos est¨¦n al corriente del pago de multas. Por eso no todos los indultados han podido salir. Algunos salieron el mismo d¨ªa del indulto y otros siguen all¨ª. No podemos decir cu¨¢ntos¡±, a?aden. La red de oficinas consulares de Espa?a presta asistencia a 2.184 espa?oles presos en el extranjero. M¨¢s del 80% cumple condena por delitos de drogas.Y la mayor¨ªa (el 55%) se encuentra en c¨¢rceles de Iberoam¨¦rica.
Manuel Valle, hermano de Consuelo, se ha puesto en contacto con la asociaci¨®n C¨¢rceles Marruecos, que preside Miguel, y que ayuda a los presos espa?oles en el pa¨ªs vecino. Manuel est¨¢ muy preocupado por la salud de su hermana. ¡°Tiene una infecci¨®n de est¨®mago y se ha abandonado mucho, sobre todo despu¨¦s de lo del indulto. Apenas come¡±, comenta. ¡°Cuando entr¨¦ aqu¨ª pesaba 90 kilos y ahora 59¡±, asegura ella desde prisi¨®n.
Valle fue detenida en febrero de 2012 cuando se dispon¨ªa a regresar a Espa?a tras pasar una semana en T¨¢nger con una amiga espa?ola y el marroqu¨ª con el que esta iba a casarse. ¡°A ella la conoc¨ª en un bar que frecuent¨¢bamos las dos. Un d¨ªa me dijo que se iba a ir a Marruecos a conocer a la familia del chico con el que se iba a casar y me propuso ir con ella. Yo entonces estaba muy deprimida porque mi madre acababa de morir y decid¨ª acompa?arles, pero fui en mi coche para poder volverme cuando quisiera si no me gustaba el ambiente¡±, explica. ¡°En el camino de vuelta a Espa?a, ellos iban delante, en su coche, y yo detr¨¢s, en el m¨ªo. Al llegar a la aduana, el polic¨ªa dijo que me apartara y registraron el coche. Cuando baj¨¦ vi que el de mi amiga estaba rodeado de polic¨ªa. Le hab¨ªan encontrado 21 kilos de hach¨ªs¡±. Valle asegura que en su veh¨ªculo no encontraron nada, pero la acusaron de c¨®mplice.
En el primer juicio, un mes despu¨¦s de la detenci¨®n, Consuelo fue condenada a 18 meses de c¨¢rcel. ¡°Mi amiga dijo que yo no ten¨ªa nada que ver, pero no sirvi¨® de nada¡±, relata. En el segundo, le rebajaron la pena a 15 meses. ¡°Al cumplir la condena, mi amiga sali¨® de la c¨¢rcel, el pasado 25 de mayo, porque el consulado le consigui¨® el certificado de pobreza que requieren las autoridades para demostrar que no puedes pagar la multa. Y yo, pese a que la droga estaba en su coche, y no en el m¨ªo, sigo aqu¨ª. Y estoy muy enferma. ?No quiero morirme en una c¨¢rcel de Marruecos!¡±.
Valle no consigue ese certificado de insolvencia porque en el registro de la propiedad hay dos casas a su nombre. ¡°Pero las dos est¨¢n embargadas. Una la hered¨¦ de mi abuela, pero la hipotequ¨¦ y la perd¨ª. La otra era mi residencia habitual, pero dej¨¦ de pagar y la orden de embargo lleg¨® mientras yo estaba presa. ?El d¨ªa que salga no tengo d¨®nde vivir!¡±.
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