La piscina de Pedro J. Ram¨ªrez en Mallorca es de uso p¨²blico
El Tribunal Supremo determina que la pileta est¨¢ en "zona de dominio p¨²blico mar¨ªtimo terrestre"
La piscina al borde del mar y ante al chal¨¦ que poseen en Mallorca el director de El Mundo, Pedro J. Ram¨ªrez y su mujer, la modista Agatha Ruiz de la Prada, est¨¢ en zona p¨²blica y es de uso p¨²blico, seg¨²n dos sentencias del Tribunal Supremo conocidas este jueves. La terraza, escaleras y piscina y muros de mamposter¨ªa impiden el paso y acceso por el litoral que est¨¢ privatizado en la pr¨¢ctica. Estas resoluciones del Supremo cierran en la v¨ªa contenciosa del largo pleito, paralelo al enfrentamiento p¨²blico, que contra el editor promovieron los dirigentes de Lobby per la Independencia.
Desde 2003 late la pol¨¦mica, con manifestaciones, denuncias cruzadas y los pleitos que a¨²n no se han cerrado en el plano penal. Manifestantes del lobby entraron en la piscina en las terrazas del chal¨¦, con incidentes y lesiones leves que llegaron a juicio.
El Supremo rechaz¨®, a la vez, los recursos de casaci¨®n del activista Jaume Sastre, del editor Ram¨ªrez y de la representaci¨®n de la Administraci¨®n del Estado sobre una anterior decisi¨®n de la Audiencia Nacional: el uso p¨²blico sigue vivo, las decisiones contrarias de Medio Ambiente se anulan. La concesi¨®n no se altera. El lobby celebr¨® como un ¨¦xito el pronunciamiento judicial mientras que el propietario de la piscina dijo en su Twitter: ¡°Preferir¨ªa que el TS nos diera la raz¨®n en todo pero lo esencial es que avala la concesi¨®n y se?ala el camino para adaptarla a la nueva Ley [de Costas ] y en diferentes medios se dijo "razonablemente satisfecho".
La llamada piscina de Pedro J. est¨¢ ubicada terrenos de la ¡°zona de dominio p¨²blico mar¨ªtimo terrestre¡±, reiteran los magistrados, y se sit¨²a claramente dentro del dominio p¨²blico, ratifican. La pileta y las terrazas invaden 350 metros cuadrados de la zona litoral, en la urbanizaci¨®n de lujo de la Costa de los Pinos, en Son Servera, Mallorca. La casa original (la actual es nueva) y la piscina fueron alzadas por su primera propietaria, Giuliana Arioli, que fue esposa del escritor Joaqu¨ªn Calvo Sotelo.
La Audiencia Nacional determin¨® en su d¨ªa que el periodista y su esposa compraron la concesi¨®n de la piscina a Arioli, operaci¨®n que disfrazaron mediante un contrato de gesti¨®n. La venta de las concesiones est¨¢ prohibida. El contrato afectaba a un elemento del dominio p¨²blico mar¨ªtimo-terrestre, la concesi¨®n la otorg¨® el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar en 2001, siendo ministro de Medio Ambiente Jaume Matas. La autorizaci¨®n reconoci¨® el ¡°uso general, p¨²blico y gratuito¡± de la piscina.
La propiedad, para garantizar el uso y disfrute veraniego de su solarium y piscina exclusivos, propuso a la Administraci¨®n que el resto de meses del a?o estuviera a disposici¨®n de los escolares del municipio de Son Servera. Nunca se ejecut¨® este proyecto de apertura y uso sociales.
Otras piscinas y terrazas de la misma urbanizaci¨®n fueron derribadas por ilegales.
Diferentes miembros de los Gobiernos de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar del PP y Jos¨¦ Lu¨ªs Rodr¨ªguez Zapatero, del PSOE, han intervenido directamente en esta cuesti¨®n en ayuda del editor, seg¨²n miembros de los diferentes Ejecutivos. El periodista reclam¨® protecci¨®n y seguridad en Mallorca ante las protestas cr¨ªticas y por las amenazas terroristas a las que aludi¨®.
En 2007, la direcci¨®n general de Costas proyect¨® un camino litoral en la zona para retomar el uso p¨²blico en la Costa de los pinos que nunca cuaj¨®. Otras piscinas y terrazas de la misma urbanizaci¨®n fueron derribadas por ilegales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.