Cuatro detenidos en Huesca por abusar de extranjeras en situaci¨®n irregular

Cuatro personas han sido detenidas este martes en Huesca por abusar de mujeres extranjeras que estaban en situaci¨®n irregular y de especial vulnerabilidad. Las mujeres eran entregadas a un matrimonio de avanzada edad para, en teor¨ªa, cumplir labores relacionadas con el servicio dom¨¦stico, pero en seguida eran sometidas a unas condiciones laborales pr¨®ximas a la esclavitud. Las encerraban y las amenazaban con denunciarlas si no acced¨ªan a sus pretensiones. Hasta ahora, ocho mujeres han denunciado haber sufrido acoso, abusos y agresiones sexuales por este matrimonio.

La Guardia Civil, en el marco de la operaci¨®n LAGA, inici¨® una investigaci¨®n el pasado mes de octubre despu¨¦s de recibir una denuncia por agresi¨®n sexual de una de las mujeres que trabajaba como limpiadora en r¨¦gimen de interna para este matrimonio. La Guardia Civil ha constatado que, desde el a?o 2009, unas 30 mujeres podr¨ªan haber trabajado para este matrimonio, residente en una vivienda de la comarca del Somontano. Posteriormente, los agentes identificaron a dos vecinos de la localidad de Barbastro que, presuntamente, fueron los responsables de buscar y trasladar a la vivienda, en la que finalmente quedaban alojadas.

Los detenidos son el matrimonio formado por L.J.G., de 85 a?os y R.O.O., de 83, por autores de los delitos de trata de seres humanos, detenci¨®n ilegal, amenazas y contra el derecho de los trabajadores. Al var¨®n, adem¨¢s, se le acusa de acoso, abuso y agresi¨®n sexual. Los otros dos detenidos son J.A.C.G., de 70 a?os, detenido como supuesto autor de los delitos de trata de seres humanos y c¨®mplice de delito contra el derecho de los trabajadores, y V.A.L.M, de 58 a?os, detenido como supuesto autor de un delito de trata de seres humanos.

Las empleadas que se quedaban a vivir en el domicilio de los ancianos eran encerradas y no pod¨ªan mantener contacto con el exterior. El matrimonio lleg¨® a romper sus tel¨¦fonos m¨®viles, las dejaban sin comer como castigo, las imped¨ªan asearse y las amenazaban con denunciar su situaci¨®n irregular, llegando incluso a agredir sexualmente a una de ellas. Todas carec¨ªan de contrato laboral y no percib¨ªan ning¨²n salario.