El presidente f¨ªa todo al ¨¦xito de la reforma fiscal

El Gobierno no quiere a¨²n hacer balance del ecuador de la legislatura, porque entiende que la fecha clave es dentro de un mes, cuando se cumplen dos a?os desde que Mariano Rajoy entr¨® en La Moncloa y empez¨® a tomar decisiones: en la primera semana aprob¨® una de las mayores subidas de impuestos de la democracia. Ni siquiera ha preparado a¨²n un documento de balance. Sin embargo, el Ejecutivo trabaja ya, y as¨ª lo escenific¨® ayer el propio presidente en los pasillos del Congreso al detenerse con los periodistas, para dar un giro completo a la din¨¢mica pol¨ªtica.

El Gobierno ya no piensa solo en sobrevivir y evitar el rescate de Espa?a, como hasta ahora. Esa fase qued¨® atr¨¢s. Rajoy y su equipo han dejado de mirar obsesivamente a sus tel¨¦fonos y sus tabletas, donde estaban las aplicaciones que les indicaban la evoluci¨®n de la prima de riesgo. Y ahora empiezan a pensar en hacer pol¨ªtica, en buscar estrategias para recuperar la confianza perdida de buena parte de sus electores ¡ªaunque sigue estando por encima del PSOE seg¨²n el CIS, ha perdido 10 puntos desde las elecciones¡ª y en lograr que Rajoy, que quiere volver a presentarse, gane las elecciones de 2015.

El presidente agradeci¨® ayer a los espa?oles sus esfuerzos en estos ¡°dos a?os dif¨ªciles¡± y trat¨® de mostrar ese giro de la situaci¨®n: ¡°Ahora ya las cosas est¨¢n un poco mejor y pueden tener la total y absoluta certeza de que esta situaci¨®n la vamos a superar¡±.

Montoro plantea una reforma global pero sin reducir la recaudaci¨®n

Hay muchas leyes y planes en marcha, pero el coraz¨®n de la estrategia de futuro est¨¢ en los impuestos. El ministro al que se le ha encargado la tarea central de esa recuperaci¨®n pol¨ªtica es Crist¨®bal Montoro, responsable m¨¢ximo del proyecto estrella del Gobierno para la segunda y decisiva parte de la legislatura: la reforma fiscal. Formalmente, se ha dejado esa tarea en manos de un grupo de expertos presidido por el catedr¨¢tico Manuel Lagares, que deber¨ªa culminar su trabajo en enero o febrero de 2014. Pero tambi¨¦n se hizo con la reforma de pensiones, y sin embargo las decisiones clave sobre esta ¨²ltima, que se aprob¨® ayer en el Congreso, las tom¨® el Ejecutivo sin hacer demasiado caso a los expertos.

Mientras Rajoy y su ministro de Econom¨ªa, Luis de Guindos, han sido muy claros en la idea de que esta reforma fiscal marcar¨¢ una clara rebaja de impuestos ¡ª¡°el a?o que viene vendr¨¦ aqu¨ª a anunciar una bajada de impuestos¡±, lleg¨® a decir Rajoy en septiembre en Soutomaior¡ª, el propio Montoro, que es el que est¨¢ encima de la reforma, ha sido mucho m¨¢s cauteloso. De hecho, ¨¦l est¨¢ planteando que ser¨¢ una reforma global, completa, que subir¨¢ unos impuestos y bajar¨¢ otros, que cambiar¨¢ y actualizar¨¢ todos, pero no con la intenci¨®n de reducir la recaudaci¨®n.

De hecho, el discurso del Gobierno, en especial de Montoro, destaca que el sistema fiscal espa?ol est¨¢ obsoleto. En dos a?os de crisis, repite Rajoy con frecuencia, se perdieron 70.000 millones de ingresos p¨²blicos. Ah¨ª est¨¢ el gran agujero de las cuentas p¨²blicas. Montoro, por tanto, con el apoyo de Rajoy de momento, seg¨²n fuentes del Gobierno, quiere jugar en varios campos con el objetivo de no perder recaudaci¨®n, pero tambi¨¦n de preparar una reforma que le sirva para ganar las elecciones, ya que se aprobar¨¢ en 2014 pero se aplicar¨¢ en 2015, el a?o electoral.

Para buscar ese espacio pol¨ªtico, el ministro jugar¨¢ a varias bandas, y mientras da satisfacci¨®n a una parte del electorado tradicional del PP rebajando la imposici¨®n del ahorro con los planes de pensiones, por ejemplo ¡ªalgo que ¨¦l ha dado por hecho¡ª, debe a la vez lanzar mensajes en la l¨ªnea del ¡°reparto equitativo de los esfuerzos¡± que Rajoy repite siempre. Esto es, rebajar impuestos a los ingresos m¨¢s bajos ¡ªalgo que el PP ya llevaba en su programa de 2011¡ª y a la vez buscar alguna f¨®rmula para que las grandes fortunas paguen algo m¨¢s. Montoro es un especialista en jugar a muchas bandas, aunque esta reforma no ser¨¢ solo suya porque el Gobierno, el PP y el propio Rajoy se juegan demasiado en ella.

Rajoy repite que en dos a?os de crisis se perdieron 70.000 millones en ingresos

De hecho, fuentes del Ejecutivo se?alan que hay cierta preocupaci¨®n por el margen que puedan tener Montoro y su equipo para hacer la reforma que desear¨ªan. No solo porque no est¨¢ nada claro qu¨¦ fuerza tendr¨¢ la esperada recuperaci¨®n de la econom¨ªa ¡ªsi fuera importante tendr¨ªa mucho m¨¢s margen, pero ning¨²n organismo fiable la augura para 2014¡ª, sino sobre todo porque Espa?a sigue teniendo encima la mirada de Bruselas.

Miembros del Gobierno se?alan en privado el mensaje que dio el comisario Olli Rehn el pasado viernes, y que ha sido interpretado como una presi¨®n para que Espa?a siga haciendo recortes hasta rebajar otros 35.000 millones de aqu¨ª a 2016. En realidad, explican estas fuentes, Bruselas est¨¢ lanzando tambi¨¦n un mensaje a Montoro y a todo el Gobierno sobre la reforma fiscal, para que el Ejecutivo espa?ol no caiga en la tentaci¨®n de hacer una gran bajada de impuestos con la que sin duda podr¨ªa enfrentarse mucho mejor a las elecciones, pero que la Comisi¨®n Europea no aceptar¨ªa. De hecho, Rajoy ha recibido presiones de Bruselas para subir impuestos, en especial el IVA, casi desde que lleg¨® a La Moncloa. Despu¨¦s de algunas resistencias casi siempre ha cedido, aunque ahora el presidente se siente m¨¢s fuerte ahora para aguantar.

En cualquier caso, el campo de juego para la batalla interna del Ejecutivo est¨¢ servido. Los impuestos ya han marcado las grandes divisiones internas del Gobierno en estos dos a?os, protagonizadas por Guindos y Montoro. El primero siempre apost¨® por subir el IVA y no el IRPF. En principio gan¨® Montoro, y el IVA no se toc¨®. Pero despu¨¦s, en julio de 2012, se subi¨® tambi¨¦n el IVA, con lo que la posici¨®n del ministro de Hacienda qued¨® muy debilitada. En este a?o, en abril, se produjo de nuevo una batalla. Bruselas presionaba para subir de nuevo el IVA, sacando del tipo reducido productos que afectan sobre todo a hosteler¨ªa y turismo, algo que Montoro rechaza de plano. Guindos, siempre opuesto a la subida del IRPF, quer¨ªa adelantar la bajada de este impuesto a 2014. Al final Montoro gan¨® y se dej¨® todo para 2015. Aun as¨ª, el ministro ha apuntado que si se ve margen, algunas reformas podr¨ªan adelantar su aplicaci¨®n a 2014.

Esa disputa continuar¨¢ ahora de aqu¨ª a marzo, cuando deber¨ªa presentarse el plan estrella de la reforma fiscal. Casi todos los miembros del Gobierno y dirigentes clave del PP tratar¨¢n de influir sobre este asunto. De hecho, algunos barones auton¨®micos ya est¨¢n presionando a su manera, adelantando ellos rebajas fiscales, lo que deja m¨¢s en evidencia al Ejecutivo central.

Montoro es el eje pol¨ªtico sobre el que va a girar esta segunda parte de la legislatura no solo por la reforma fiscal. Despu¨¦s de presentarla vendr¨¢ la otra gran batalla interna del PP: la reforma de la financiaci¨®n auton¨®mica. Todos los barones est¨¢n ya pensando en sus elecciones de 2015 y presionan al ministro para que les mejore su financiaci¨®n. Montoro y Rajoy han ganado tiempo hasta la segunda mitad de 2014 con el argumento de que antes hay que aprobar la reforma fiscal que marcar¨¢ los ingresos del futuro, de los que depender¨¢ el reparto de financiaci¨®n. Pero muchos barones est¨¢n inquietos, sobre todo por las posibles contrapartidas a Catalu?a. El propio Alberto N¨²?ez Feij¨®o ha pedido una Conferencia de Presidentes para evitar que la financiaci¨®n se discuta ¡°en reservados¡±, en claro aviso a posibles acuerdos secretos con Catalu?a.