Rajoy arropa a Alberto Fabra para bajar la tensi¨®n por la corrupci¨®n en Valencia
El bar¨®n, con ocho diputados imputados, promete ¡°tolerancia cero¡± con la corrupci¨®n
Alberto Fabra atraviesa el momento m¨¢s dif¨ªcil desde que en julio de 2011 Mariano Rajoy le eligi¨® como sucesor de Francisco Camps, que dimiti¨® por el esc¨¢ndalo del caso G¨¹rtel. La imagen de la Comunidad Valenciana est¨¢ por los suelos como referente de los esc¨¢ndalos de la corrupci¨®n y el despilfarro. Acaba de ser condenado a cuatro a?os Carlos Fabra, el hombre que domin¨® durante 20 a?os el PP de Castell¨®n, el partido de Fabra, que, como record¨® ayer Rajoy, entr¨® con 18 a?os en Nuevas Generaciones y se labr¨® una carrera como concejal hasta llegar a alcalde de Castell¨®n. Durante todos esos a?os, nada se mov¨ªa en Castell¨®n sin que Carlos Fabra lo autorizara. Ayer el presidente auton¨®mico dio esta p¨¢gina por cerrada y record¨® que ese Fabra ya no tiene cargos en el PP.
Por si fuera poco, su grupo parlamentario tiene hasta ocho imputados. Las encuestas internas dan por perdida la mayor¨ªa absoluta. 45 diputados pidieron el indulto para un alcalde prevaricador. Y el presidente acaba de anunciar el cierre de Canal 9. Por todos estos motivos, pero sobre todo por su choque con personajes clave en la comunidad como Rita Barber¨¢ y tambi¨¦n con esos imputados, a los que ha apartado del Gobierno y de la c¨²pula del grupo parlamentario, Fabra sufre una importante tensi¨®n interna, que hace que se especule con la opci¨®n de que no sea el candidato en 2015.
En este contexto, Rajoy, el ¨²nico que realmente decidir¨¢ si Fabra sigue o no, aprovech¨® ayer un acto en Madrid, organizado por Europa Press, para presentar al valenciano con grandes elogios y lanzar un mensaje clar¨ªsimo: que nadie se mueva. Le arrop¨® con su presencia y la de cuatro ministros (Guindos, Gallard¨®n, Margallo y Pastor) y dej¨® que el valenciano convirtiera r¨¢pidamente el encuentro, en un hotel abarrotado, en una especie de proclamaci¨®n de candidatura no oficial. ¡°Yo me siento muy arropado por el Gobierno y por mi partido. Est¨¢ aqu¨ª el presidente y otros compa?eros del Gobierno¡±, explic¨® Fabra. ¡°Eso te da fuerzas para seguir. Me siento muy respaldado. Y por supuesto querr¨¦ ser candidato en 2015, pero eso depender¨¢ de mi partido¡±, asegur¨®.
Esta frase dej¨® a¨²n m¨¢s en evidencia el objetivo del acto: reforzar a Fabra en un momento de debilidad y lanzar un mensaje a sus cr¨ªticos para que abandonen la batalla interna.
Fabra no se anima a¨²n a echar a todos los imputados como ha hecho con Rafael Blasco, que ha sido expulsado del grupo popular. Son ocho diputados, y Fabra perder¨ªa la mayor¨ªa. Pero s¨ª les ha dejado claro que no les llevar¨¢ en las listas en 2015. M¨¢s problem¨¢tico es el asunto de Sonia Castedo, la alcaldesa de Alicante, tambi¨¦n diputada. Fabra no la llevar¨¢ con seguridad en las listas auton¨®micas, pero ni ¨¦l ni Rajoy o Mar¨ªa Dolores de Cospedal se animan a echarla de la alcald¨ªa. Ella ya ha amenazado con montar un partido propio. La decisi¨®n la tomar¨¢ la direcci¨®n nacional en 2015, pero nadie se atreve con ella porque controla el partido. Es lo que pas¨® con Carlos Fabra mientras Rajoy le llamaba ¡°pol¨ªtico ejemplar¡±.
En el acto, Alberto Fabra, que se ha hecho cargo de la dif¨ªcil herencia de Camps, se present¨® como un pol¨ªtico que est¨¢ luchando para hacer desaparecer la corrupci¨®n de su comunidad. ¡°Debemos establecer medidas suficientes para que la situaci¨®n de abusos no se vuelva a producir, por eso vamos a aprobar un portal de la transparencia. Tolerancia cero hacia cualquier comportamiento inadecuado. Nos corresponde admitir que hay cosas que pudimos hacer mal¡±, asegur¨®. Fabra defendi¨® que ¨¦l ha sido ¡°inflexible para que cualquier persona imputada no est¨¦ en primera l¨ªnea ni del partido ni del Gobierno ni del grupo parlamentario¡±.
Fabra tambi¨¦n defendi¨® el cierre de Canal 9 como inevitable e incluso admiti¨® impl¨ªcitamente que se hab¨ªa convertido en un medio al servicio del PP: ¡°No necesitamos que todos los d¨ªas haya un medio al servicio del Gobierno de turno¡±, remat¨® el presidente.
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