¡°El PP envi¨® dos facturas para su abono por la Caja. Las tengo bien guardadas¡±
El secretario de la entidad alert¨® a Blesa del pago de gastos para elecciones
Enrique de la Torre, secretario del consejo de Caja Madrid, envi¨® el 28 de septiembre de 2009 a Miguel Blesa, presidente de la entidad, una alarma por correo electr¨®nico: ¡°Tienes que estar avizor. De las dos facturas que enviaron del PP de Madrid para su abono por la Caja, v¨ªa Engracia, en las anteriores elecciones de 2006, una es de una sociedad que aparece en la prensa estos d¨ªas. Yo tengo los papeles bien guardados, pero no respondo ya del entorno¡±. Ese d¨ªa la prensa recog¨ªa un informe policial que citaba a las empresas de G¨¹rtel.
El e-mail, uno de miles que obran en la causa que abri¨® el juez Elpidio Silva contra Miguel Blesa, sugiere que Caja Madrid pag¨® a dos empresas gastos que no le correspond¨ªan sino que eran servicios prestados al PP para unas ¡°elecciones de 2006¡±.
Exconsejeros de la entidad financiera consultados por EL PA?S no ven ninguna explicaci¨®n legal a ese aviso ¡ª¡°Caja Madrid no pagaba facturas a los partidos pol¨ªticos¡±¡ª y se?alan que las elecciones que se celebraron en 2006 fueron internas para elegir impositores. Ese a?o solo hubo elecciones pol¨ªticas en Catalu?a, en cuya campa?a intervino Esperanza Aguirre.
La candidatura del PP en Caja Madrid gan¨® esas elecciones internas celebradas en junio de aquel a?o. Eran importantes para consolidar la mayor¨ªa que atesoraba en la entidad y que permit¨ªa a Miguel Blesa mantener el cargo de presidente. En aquel a?o hab¨ªa que renovar a 112 consejeros generales y el PP obtuvo 31. La segunda fuerza, CC OO, se hizo con 23. Esta victoria del PP arrebat¨® un sill¨®n al PSOE en el consejo de administraci¨®n de Caja Madrid. ¡°V¨ªa Engracia¡±, se?ala otro exconsejero en referencia al correo electr¨®nico que env¨ªa De la Torre a Blesa, ¡°querr¨¢ decir que las facturas fueron remitidas por Engracia Hidalgo, entonces consejera de Hacienda de la Comunidad de Madrid¡±. Hidalgo era una persona de m¨¢xima confianza de Aguirre, que ya la fich¨® diez a?os antes, en 1996, como directora general de programaci¨®n econ¨®mica y control presupuestario, cuando Aznar la eligi¨® ministra de Cultura.
Ninguno de los implicados explica el abono de gastos del PP de Madrid
El secretario del consejo de Caja Madrid avisaba a Blesa de otro hecho supuestamente preocupante: que una de las empresas que hizo la campa?a del PP y de la que ten¨ªan una de las dos facturas pagadas por la entidad financiera estaba saliendo esos d¨ªas en prensa, en septiembre de 2009. Por aquellas fechas se difund¨ªan las actuaciones irregulares de las sociedades de la trama G¨¹rtel, alimentada, entre otras administraciones del PP, por la Comunidad de Madrid, y que sol¨ªa organizar los actos electorales del partido en la regi¨®n. El e-mail aflora una conexi¨®n nueva de G¨¹rtel con el Gobierno de Aguirre, distinta de la del imputado exconsejero Alberto L¨®pez Viejo. De la Torre mostraba su temor a Blesa de que esas facturas saliesen a la luz: ¡°Yo tengo los documentos bien guardados, pero no respondo ya del entorno¡±. EL PA?S ha solicitado, sin ¨¦xito, la versi¨®n de Blesa y De la Torre sobre ese correo electr¨®nico. Hidalgo lo refuta: ¡°Si eran facturas del PP, imposible¡±.
El victimismo del juez y del banquero
El juez Elpidio Silva se presenta hoy como v¨ªctima de una conjura para defenestrarlo del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 9 de Madrid por haber encarcelado a Miguel Blesa, expresidente de Caja Madrid, cuando lo investigaba por un supuesto cr¨¦dito irregular al expresidente de la CEOE y la compra de un banco norteamericano a un precio supuestamente excesivo. El ingreso en prisi¨®n de Blesa no solo fue considerado injustificado por el afectado sino por la Fiscal¨ªa de Madrid, cuyo m¨¢ximo responsable, Manuel Moix, tutel¨® la querella interpuesta contra el juez por prevaricaci¨®n. Silva no fue apartado del juzgado durante cuatro meses por esa querella, sino por dos hechos menores vinculados a su supuesta mala gesti¨®n y una entrevista que concedi¨® sobre el caso Blesa, lo que provoc¨® la sanci¨®n, hoy ya cumplida, del Consejo General del Poder Judicial. Por tanto, puede darse la situaci¨®n de que juez e imputado vuelvan a reencontrarse. Blesa tambi¨¦n se siente v¨ªctima, pero del juez. Defiende la legalidad del cr¨¦dito a D¨ªaz Ferr¨¢n y la compra del banco en EE UU, y ve arbitrario su ingreso en prisi¨®n. El juez requis¨® casi 9.000 correos del expresidente de Caja Madrid. Blesa invoca su privacidad, pero Silva alega que apuntan nuevos delitos. "Si la ciudadan¨ªa tuviera un relato completo de c¨®mo en los ¨²ltimos 15 a?os determinadas cajas de ahorro se han gestionado, si supiera qui¨¦nes han intervenido, cu¨¢les han sido los protocolos de actuaci¨®n, el sistema institucional no lo soportar¨ªa", ha avisado el juez.
El documento forma parte de un voluminoso paquete de casi 9.000 correos electr¨®nicos, de los que Infolibre y eldiario.es han publicado una parte en los ¨²ltimos d¨ªas. Infolibre detall¨® que la firma Einsa envi¨® en 2008 a Blesa el siguiente mensaje: ¡°Aznar ya est¨¢ en marcha en Argelia y lo que acordemos con Agag es como si lo acord¨¢semos con ¨¦l¡±. Aznar ha precisado que no concluy¨® ning¨²n contrato con Einsa ni cobr¨® comisi¨®n alguna ni particip¨® en ning¨²n tr¨¢fico de armamento.
eldiario.es hizo p¨²blico un correo electr¨®nico en el que Blesa celebra la exitosa salida en 2009 de las preferentes, hoy causa de ruina de miles de depositarios y objeto de m¨²ltiples querellas. ¡°Lo que he aprendido es que si a los sindicatos no les gusta probablemente es un buen producto¡±, explica. ¡°Qu¨¦ b¨¢rbaro. Y eso que hab¨ªamos enga?ado a los clientes¡±, se?ala para festejar el dinero captado en la venta de ese producto financiero.
Mientras que las presiones de amigos de Blesa para recibir tratos de favor de Caja Madrid queda reflejada en los correos, una figura emerge en sentido contrario: el entonces director de la Fundaci¨®n Caja Madrid y hoy jefe de la Casa Real, Rafael Spottorno, quien utiliza un tono descarnado para oponerse a la rapi?a ajena con cargo a Caja Madrid. Consta en correos en poder de este diario y en los publicados por eldiario.es. Spottorno reprueba las subvenciones a la Fundaci¨®n Dos de Mayo: ¡°La desverg¨¹enza y el despilfarro est¨¢n llegando a unos l¨ªmites que no resultan aceptables aun con anchas tragaderas¡±. Y llega a enfrentarse y frustrar un costoso plan pict¨®rico apadrinado nada menos que por Aznar.
Los correos electr¨®nicos que enviaba y recib¨ªa el expresidente de Caja Madrid arrojan as¨ª una cara de su mandato que evidencia una notable dosis de discrecionalidad en su gesti¨®n vinculada al trato de favor que le reclamaban sus amigos pol¨ªticos, ajena a los controles oficiales.
¡°Una de las facturas es de una de las sociedades que sale en prensa¡±
El material documental de los correos de Blesa se halla bajo disputa judicial. El juez Jos¨¦ Elpidio Silva, que abri¨® la causa contra Blesa y encarcel¨® al expresidente de Caja Madrid, ha pedido usar esas pruebas para justificar el calado de su instrucci¨®n. El juez orden¨® encarcelar a Blesa por presuntas irregularidades en su gesti¨®n relacionadas con un pr¨¦stamo al empresario Gerardo D¨ªaz Ferr¨¢n y por la compra de un banco en Estados Unidos a un precio supuestamente superior al real.
Su actuaci¨®n en la causa contra Blesa le vali¨® una querella por presunta prevaricaci¨®n de la fiscal¨ªa y, adem¨¢s, fue apartado del juzgado por un expediente disciplinario. El Tribunal Superior de Justicia le ha impedido acceder al material incautado para defenderse, y el magistrado ha recurrido esa decisi¨®n.
La documentaci¨®n requisada tiene un valor notable para poder probar las gestiones y presiones secretas en el mandato de Blesa al frente de Caja Madrid. En unas ocasiones, las recomendaciones de financiar negocios vienen de la mano de su amigo el expresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. Las operaciones, cuajaran o no, muestran c¨®mo el aparato de Caja Madrid se mov¨ªa para intentar satisfacer las peticiones de favor o recomendaciones. En ning¨²n caso prueban que Aznar tuviera inter¨¦s econ¨®mico en esos negocios, pero s¨ª que sus movimientos fueron constantes para que salieran adelante. En sentido contrario, algunos de tales e-mails revelan el hartazgo de Blesa ante las presiones y quejas sufridas desde la familia Aznar.
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