¡°En Canad¨¢ no cabr¨ªa la doble pregunta¡±

Dos refer¨¦ndums de independencia de Quebec celebrados en un lapso de tiempo de 15 a?os han forzado a Canad¨¢ a plantearse seriamente la posibilidad de una secesi¨®n. Tanto en la votaci¨®n de 1980 como en la de 1995 el no acab¨® por imponerse, pero ambos refer¨¦ndums fueron muy criticados por la confusi¨®n de sus preguntas. En 2000, el Parlamento canadiense aprob¨® la llamada Ley de Claridad, que tuvo la indisimulada voluntad de evitar consultas de secesi¨®n que pudieran llevar al equ¨ªvoco.

St¨¦phane Dion, diputado del Partido Liberal canadiense y entonces ministro de Asuntos Intergubernamentales, tuvo una participaci¨®n fundamental en la elaboraci¨®n de esta ley. Considera que una pregunta como la catalana, con dos partes ¡ª?Quiere que Catalu?a sea un Estado? y, si es as¨ª, ?Quiere que Catalu?a sea un Estado independiente?¡ª, ser¨ªa rechazada por los quebequeses, que la ver¨ªan como ¡°un intento de manipulaci¨®n¡±.

Pregunta. Los dos referendos de Quebec fueron criticados por la escasa claridad de sus preguntas. ?Se aceptar¨ªa ahora una doble pregunta como la catalana?

Respuesta. En Canad¨¢ es muy probable que esta pregunta fuese considerada un intento de manipular a los electores, porque no ser¨ªa considerada clara. Exigir¨ªamos que el Gobierno del partido quebequ¨¦s propusiera la segunda parte de la pregunta, o sea: ¡°?Quiere la independencia de Quebec?¡± Nadie entender¨ªa la primera parte de la cuesti¨®n. ?Qu¨¦ quiere decir que un Estado no sea independiente? ?Es el caso de Estados Unidos? Habr¨ªa la sospecha de que se quiere inflar una parte de la pregunta.

P. ?En Espa?a har¨ªa falta una ley de Claridad como la de Canad¨¢?

R. Yo soy diputado canadiense y no entrar¨¦ en cuestiones internas de Espa?a. Esto deben hacerlo los espa?oles. Sin embargo, en Canad¨¢ la importancia de la ley de Claridad es muy importante, pues significa que si alguna vez hubiera un nuevo refer¨¦ndum, el tercero, la cuesti¨®n a plantear deber¨ªa ser muy clara, no como las veces anteriores. O sea, que la pregunta ser¨ªa como la segunda parte de la cuesti¨®n catalana: ¡°?Quiere usted un Estado independiente para Quebec?¡±.

P. En Catalu?a los partidos favorables a la consulta han planteado una pregunta de forma unilateral. ?Ser¨ªa factible en Quebec?

R. En Canad¨¢ se puede preguntar sobre lo que sea. Se podr¨ªa hacer un refer¨¦ndum preguntando por si tiene que dejar de nevar en enero, pero es necesario que el Parlamento y la poblaci¨®n consideren que la pregunta es clara. Debemos tener garant¨ªas de que la gente sabe que est¨¢ votando y sobre sus consecuencias. No cabe una doble pregunta.

P. Los partidos que han acordado la pregunta sobre la consulta no han aclarado c¨®mo se van a contabilizar los votos ni qu¨¦ mayor¨ªa ser¨¢ necesaria.

R. La corte suprema nos dice que para negociar la secesi¨®n ser¨¢ necesaria una mayor¨ªa clara sobre una pregunta clara. No basta un voto de diferencia. El Gobierno que quiera hacer la independencia tendr¨¢ que ganar claramente. Es demasiado grave e irreversible para que no sea as¨ª.

P. Usted ha dicho que un refer¨¦ndum independentista es un trauma para la sociedad. En Canad¨¢ ha habido dos. ?Se ha recuperado de este trauma el pa¨ªs?

R. De hecho, el partido quebequ¨¦s sigue gobernando. El riesgo de ruptura de Canad¨¢ existe a¨²n.Pero tengo confianza en que los quebequeses preferiremos quedarnos en un Canad¨¢ unido.

P. ?Cu¨¢l fue el secreto para seducir a los quebequeses y lograr que votaran contra la secesi¨®n?? R. Lo primordial es mostrar al mundo como una riqueza nuestras diferentes identidades. No contraponer el nacionalismo canadiense al quebequ¨¦s. Hay que aceptar la ayuda que Canad¨¢ nos aporta y estar orgullosos de la ayuda que aportamos a Canad¨¢. Hay que estar orgulloso de ser quebequ¨¦s y estar orgulloso tambi¨¦n de pertenecer a una cosa m¨¢s fuerte que es Canad¨¢.