El Gamonal se prepara para seguir defendiendo su calle

La batalla campal en el barrio Gamonal de Burgos contin¨²a. La ira de los vecinos aumenta. No piensan descansar ni quieren parar. Hoy se cumple el tercer d¨ªa de intensas manifestaciones y de disturbios violentos en contra de la conversi¨®n de la calle Vitoria en un bulevar. El ambiente est¨¢ caliente. J¨®venes, ni?os, adultos y ancianos seguir¨¢n protestando. No todos est¨¢n de acuerdo con los enfrentamientos agresivos, sin embargo, los defienden. Se justifican en que, a veces, la c¨®lera, despu¨¦s de dos meses de protestas pac¨ªficas, no se puede frenar.

Este domingo han vuelto a reunirse desde las siete de la tarde en su punto habitual de encuentro: la zona cero. As¨ª han nombrado al cruce de la v¨ªa en cuesti¨®n con la calle San Bruno. Primero ser¨¢ una cacerolada, luego caminar¨¢n hacia la Comisar¨ªa de la Polic¨ªa Nacional donde permanecen detenidas 40 personas desde los disturbios del viernes pasado. M¨¢s tarde acudir¨¢n a la sede de un diario local: "Est¨¢n vendidos y no cuentan lo que realmente est¨¢ pasando aqu¨ª", protestan los m¨¢s de 100 burgaleses que han discutido en la asamblea de esta ma?ana. Despu¨¦s, de regreso al punto de partida y a casa.

Ese es el plan, pero solo hace falta que uno se aventure a lanzar la primera piedra para que se repitan los disturbios de los ¨²ltimos dos d¨ªas: sucursales de banco destrozadas, contenedores de basura quemados, las vallas que cubren la zona de obra tiradas, y las marquesinas de autobuses y cabinas de tel¨¦fonos despojadas de sus cristales.

"Se escandalizan con una lona rota, pero no cuando destrozan a una familia con las subidas de impuestos y las inexistentes reformas sociales", denuncia Enrique Alonso Velasca, del ¨¢rea de juventudes de Izquierda Unida. ¡°La violencia no es lo id¨®neo, ni lo que busc¨¢bamos, pero a ver si as¨ª nos escucha el se?or alcalde¡±, afirma con seriedad mientras recibe el apoyo de qui¨¦nes lo escuchan.

Cuando las farolas alumbran las calles y la niebla cubre la ciudad, Gamonal, uno de los barrios m¨¢s grandes de Burgos con 70.000 habitantes, se transforma. El distrito obrero que por las ma?anas se muestra alegre y acogedor, por las noches se convierte en un ambiente hostil, es f¨¢cil respirar el desencanto y odio que existe en contra de las autoridades. Las ventanas de los aglomerados edificios se encienden, los vecinos asoman sus cacerolas y apoyan desde su casa las protestas. Otros bajan a la carretera y animan a que todos se unan. Y empiezan las protestas: ¡°Gamonal no quiere bulevar¡±, ¡°Libertad a los detenidos¡±, o ¡°El pueblo unido jam¨¢s ser¨¢ vencido¡±.

La reforma de la calle de Vitoria prev¨¦ la construcci¨®n de un bulevar de un carril por sentido, que sustituir¨¢ los cuatro existentes ahora. Se dejar¨¢ una pista reservada a las bicicletas, se eliminar¨¢n las plazas de aparcamiento y la v¨ªa tendr¨¢ acceso. As¨ª mismo se construir¨¢ un aparcamiento subterr¨¢neo con 246 plazas. Cada una costar¨¢ 19.800 euros por una concesi¨®n por 40 a?os. Todo esto costara 13 millones de euros. En la ciudad burgalesa hay 18.000 parados. Es la raz¨®n principal por lo cual la mayor¨ªa cree que ¡°ahora¡± no conviene un bulevar. ¡°Hay que pagar las deudas, y crear un sinf¨ªn de servicios sociales antes de esta reforma que solo embellecer¨¢ la ciudad¡±, afirma E.P.R. una chica de 35 a?os que est¨¢ en paro. Prefiere no dar su nombre por miedo a las represalias polic¨ªacas.

Casi nadie quiere identificarse, los enfrentamientos con los antidisturbios de los ¨²ltimos dos d¨ªas los han dejado atemorizados. Este domingo, dos chicas han salido a la calle con l¨¢grimas en los ojos. Llevaban pancartas donde se lee: "Justicia para los detenidos. Libertad sin cargos YA!!". En la noche del s¨¢bado, cuando, junto a sus parejas, regresaban de cenar y caminaban rumbo a su coche aparcado en una de las calles donde la batalla campal continuaba, los antidisturbios alcanzaron a los chicos, de 27 y 35 a?os, con sus porras. Ahora est¨¢n detenidos y no saben nada de ellos. ¡°Hay que defender a los chavales detenidos porque han actuado por una causa justa y al alcalde hay que echarlo de Burgos¡±, protesta un hombre octogenario. La siguiente estrategia est¨¢ decidida, todos los d¨ªas, a partir de este lunes, se reunir¨¢n en la calle Vitoria para no permitir que las m¨¢quinas entren a la zona de obras. "Vecina y vecino a pelear por lo nuestro y porque este alcalde no se salga con la suya¡±, todos los presentes aplauden.