El azote del corrupto valenciano
Una asociaci¨®n que denuncia los excesos del poder se ceba con Alberto Fabra Impulsa una querella contra la mano derecha del presidente de la Generalitat
Solo tres minutos tard¨® Enrique Soriano Tapia en rechazar la oferta. Una voz an¨®nima le extend¨ªa un cheque en blanco. Dinero por cerrar la Asociaci¨®n contra la Corrupci¨®n de la Comunidad Valenciana que preside. El protagonista de esta historia desconoce qui¨¦n marc¨® su m¨®vil en septiembre. Pero cree que, de aplicarse un principio b¨¢sico de la investigaci¨®n criminal ¡ªa qui¨¦n beneficia la desaparici¨®n¡ª, surgir¨ªan varios nombres. La min¨²scula organizaci¨®n que cre¨® hace diez meses para apartar las manzanas podridas del poder se ha convertido en el martillo del presidente valenciano Alberto Fabra. Un d¨ªa airean que su consejero de Gobernaci¨®n, Seraf¨ªn Castellano, enchuf¨® supuestamente a una treintena de familiares y militantes del PP. Otro, que la abogada de la Generalitat gast¨® 7.000 euros en m¨®vil. Y un tercero impulsan una querella por malversaci¨®n para condenar que el dinero p¨²blico coste¨® hoteles de la asesora m¨¢s pr¨®xima al bar¨®n popular, Esther Pastor. ¡°En Valencia estamos desbordados¡±, proclama Soriano, que dice tener intervenido uno de sus dos m¨®viles.
Fue el hast¨ªo lo que empuj¨® a este sexagenario a montar su cruzada contra el pol¨ªtico deshonesto. Se le ocurri¨® durante un almuerzo con una veintena de amigos. EL PA?S hab¨ªa publicado la contabilidad secreta del extesorero del PP Luis B¨¢rcenas. Y los tribunales auton¨®micos concentraban las investigaciones del caso G¨¹rtel, del saqueo millonario de la principal depuradora de Valencia o del presunto pelotazo urban¨ªstico que hostiga desde hace tres a?os a la alcaldesa popular de Alicante, Sonia Castedo.
Soriano cree que para ver la paja en el ojo ajeno hay que tener la vida solucionada. Se dedica a comprar maquinaria de constructores espa?oles atenazados por las deudas y venderla en Brasil. Factura un mill¨®n al a?o. Y solo le desvela que uno de sus dos hijos, veterinario de formaci¨®n, hiciera las maletas rumbo a Inglaterra. ?l recorri¨® Polonia, Rumania y Ucrania en 2007 cuando olfate¨® el desplome del tit¨¢n inmobiliario.
Enrique Soriano fund¨® la organizaci¨®n tras la publicaci¨®n de los papeles de B¨¢rcenas
Para levantar las alfombras, llam¨® al gestor Antonio Hinojo un amigo que le asesor¨® hace dos d¨¦cadas en su antigua empresa de mantenimiento de barcos. Alquilaron por 400 euros un despacho de 25 metros a las afueras de Valencia. Y colgaron un cartel con unas siglas, AC. Hoy, la asociaci¨®n dice tener un presupuesto de 7.000 euros y 40 socios. Ocultan su identidad para ¡°evitar represalias¡±.
Su jornada laboral dura tres horas diarias. Arranca con la lectura de la prensa. Despu¨¦s, llegan las reuniones con los cuatro abogados que esta semana ultimaban cinco nuevas querellas contra el entorno de Fabra. Una vez por semana viajan a Madrid para despachar con los letrados del pseudosindicato Manos Limpias, sus aliados. Han aprendido derecho por obligaci¨®n. ¡°Yo antes no sab¨ªa qu¨¦ era un imputado. ?Por qu¨¦ un diputado es aforado?¡±, se pregunta Soriano, que no milita en ning¨²n partido.
A la puerta del n¨²mero 26 del acristalado edifico G¨¦minis tocan cada semana sus clientes. La ingeniera agr¨®noma Paloma Coiduras acudi¨® en julio para advertir de un presunto fraude en la concesi¨®n de ayudas comunitarias. La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n pidi¨® informaci¨®n a la UE. Y ahora Coiduras, funcionaria de carrera, se siente aislada en la Consejer¨ªa de Agricultura de la Generalitat. ¡°Me han apartado¡±, se queja. Una sensaci¨®n de rara avis que tambi¨¦n comparte la concejal del municipio valenciano de Carcaixent Ana Calatayud. Ella visit¨® la asociaci¨®n hace tres semanas para denunciar ¡°una rebaja de 80.000 euros¡± a una empresa en una licencia de obras municipal.
El peso de estos clientes resulta insignificante con la munici¨®n que aporta un confidente an¨®nimo. Un topo con acceso a los departamentos de Presidencia y Hacienda de la Generalitat filtra a trav¨¦s de sobres sin membrete facturas de chocolatinas o la n¨®mina de Fabra. No se f¨ªa de las nuevas tecnolog¨ªas y siempre airea sus soplos por correo postal. La asociaci¨®n, que se desmarca del esp¨ªa, guarda copias de seguridad en lugares impensables de sus documentos m¨¢s delicados. El protagonismo de la liga anticorrupci¨®n nutre toda suerte de especulaciones. ¡°No estamos con Rafael Blasco¡±, zanja Soriano en referencia al exconsejero de Fabra que se sienta estos d¨ªas en el banquillo por pilotar el saqueo de fondos de la Generalitat destinados a Latinoam¨¦rica. La diputada auton¨®mica de Comprom¨ªs Mireia Moll¨¤ a?ade una clave. ¡°Blasco no morir¨¢ sin matar. Maneja mucha informaci¨®n¡±. Y el socialista Josep Soriano defiende la labor de los topos. A ¨¦l uno le envi¨® a su despacho del Parlamento auton¨®mico el contrato que firm¨® la desaparecida Canal 9 para emitir los grandes premios de F¨®rmula 1.
En este escenario de esp¨ªas y secretos se mueve Soriano, un hombre que iba para futbolista profesional hasta que una lesi¨®n le sac¨® de la cantera del Valencia CF. Hoy, coge aire para denunciar alg¨²n d¨ªa los chanchullos nacionales. Y tiene un lema. ¡°Si no quieres que se sepa algo, no lo hagas¡±.?
Las magnitudes del expolio
"Aqu¨ª tenemos mucho trabajo. Nos gustar¨ªa salir pero no podemos". El presidente de la Asociaci¨®n contra la Corrupci¨®n de la Comunidad Valenciana, Enrique Soriano, concibe su autonom¨ªa como la "capital del chanchullo". Una tesis que refleja con n¨²meros Sergi Castillo, autor de Tierra de Saqueo (Cuadril¨¢tero, 2013). ?l estima la factura del expolio en 12.500 millones. Un montante que suena colosal si se compara con los Presupuestos de la Generalitat de 2013, 13.940.
¡°Todo esto empez¨® por la relaci¨®n entre pol¨ªticos y empresarios durante la presidencia del PP de Eduardo Zaplana¡±, resume Castillo, que incluye entre los platos rotos del desfalco los 5.225 millones que costaron los grandes eventos, seg¨²n el Instituto Valenciano de Investigaciones Econ¨®micas (IVIE). La partida abarca el Gran Premio de F¨®rmula 1, la Copa del Am¨¦rica, el aeropuerto sin aviones de Castell¨®n o el parque tem¨¢tico de Benidorm Terra M¨ªtica, entre otros.
El despilfarro ha alentado combativas actividades ciudadanas como la denominada Ruta de la corrupci¨®n. Un recorrido en autob¨²s por los agujeros negros de la pol¨ªtica valenciana. Se han subido 600 ciudadanos en dos a?os. El itinerario planea desde la Ciudad de las Artes y las Ciencias, donde se denuncian ¡°sobrecostes¡±, a la depuradora Emarsa de Pinedo, donde una trama de militantes del PP es investigada desde hace tres a?os por extraer 25 millones de euros entre 2004 y 2010.
Quiz¨¢ por esta raz¨®n, los asistentes a este viaje del desprop¨®sito se ponen mascarillas y degustan chorizos al infierno. ¡°Hemos conseguido que se enteren del expolio m¨¢s de 200 millones de ciudadanos¡±, indica su promotor, el periodista del colectivo Xarxa Urbana Miguel ?ngel Ferris. Se refiere as¨ª a la repercusi¨®n del programa en 60 medios internacionales como Al Jazeera o la BBC.
Varias ONG, adem¨¢s, planean exportar la idea a Madrid, M¨¢laga y Sevilla. El itinerario de Valencia comienza en las Cortes, donde tienen su esca?o ocho imputados del PP, el 15% del grupo parlamentario del presidente Alberto Fabra.
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