La polic¨ªa califica de delito la grabaci¨®n en v¨ªdeo de la declaraci¨®n de la Infanta
El juez decano indaga qui¨¦n filtr¨® parte del interrogatorio, despu¨¦s de que Castro lo prohibiese
Al caso Urdangarin le ha surgido una hijuela imprevista que no afecta a la instrucci¨®n de la causa judicial: existe un v¨ªdeo pirata, una grabaci¨®n de la declaraci¨®n de la Infanta ante el juez. El director general de la Polic¨ªa Nacional, Ignacio Cosid¨®, ha calificado de delito el testimonio audiovisual furtivo, porque el instructor, Jos¨¦ Castro, prohibi¨® expresamente la toma de im¨¢genes o de testimonios sonoros y solo grab¨® para el acta la voz de la imputada, a petici¨®n de esta.
El enorme dispositivo de seguridad desplegado por el Ministerio del Interior (m¨¢s de 200 agentes) fall¨®. En la entrada hab¨ªa arcos detectores de metales y un t¨²nel de rayos X y se realizaron registros e inspecciones personales. La polic¨ªa emit¨ªa frecuencias para interferir comunicaciones e hizo barridos tecnol¨®gicos y rastreo con perros en el edificio judicial. Los vigilantes de seguridad y los polic¨ªas nacionales registraron bolsos y hasta llegaron a desmontar el bol¨ªgrafo del fiscal, Pedro Horrach, en b¨²squeda de micros y c¨¢maras. A las funcionarias del juez les examinaron los llaveros del juzgado, sopesaron carpetas y fundas de gafas.
Se ignora la identidad del autor de la grabaci¨®n ni el sistema que us¨®. Una o varias personas a las que la polic¨ªa investiga por orden del juez decano pueden ser responsabilizadas de delitos de desobediencia y revelaci¨®n de secretos. Por la l¨ªnea de c¨¢mara se supone que el dispositivo esp¨ªa actu¨® desde la segunda fila de la bancada de la sala de juicios. En esa zona hab¨ªa una quincena de letrados personados, diez funcionarios y una procuradora. En el estrado y en los laterales, 12 personas m¨¢s.
Los dos escoltas de la hija del Rey, que no perd¨ªan detalle, velaron por su seguridad durante siete horas, le suministraron cinco botellines de agua, cuidaron de que nadie usara su servicio exclusivo y le procuraron un tentempi¨¦ a la hora de la comida.
La pieza de c¨¢mara oculta contiene im¨¢genes muy deficientes, con figuras borrosas y con las contestaciones de la hija del Rey tan poco audibles que requieren una subtitulaci¨®n. En ellas, la Infanta responde ¡°No lo recuerdo¡±, ¡°Desconozco la mec¨¢nica¡±, ¡°No me acuerdo¡± o ¡°Yo no recuerdo nada¡± a las preguntas del juez. El diario El Mundo public¨® el domingo una imagen congelada del v¨ªdeo, subido en la plataforma Wouzee; la web del diario posteriormente enlaz¨® la se?al y fij¨® las palabras del juez y la Infanta.
El juez Castro, para que no fuera vulnerada su orden de protecci¨®n, hab¨ªa ordenado que nadie entrara en el edificio de los juzgados con terminales telef¨®nicos, tabletas, ordenadores port¨¢tiles ¡°o cualquier otro dispositivo apto para la captaci¨®n de im¨¢genes o sonidos¡±.
Esto es lo que se escucha en el v¨ªdeo:
Juez: ?Antes de llegar al matrimonio, me podr¨ªa decir a cu¨¢ntas fundaciones o asociaciones sin ¨¢nimo de lucro ha pertenecido usted?
Infanta: No lo recuerdo
J. ?...vocal en la Junta Directiva de presidenta?
I. He sido presidenta de honor
J. ?Y de cu¨¢ntas acciones ha sido usted participe antes de su matrimonio?
I. De ninguna
J. De ninguna. Usted, si no me equivoco, contrae matrimonio con el se?or Urdangarin el de octubre de 1997. Usted debe saber que al constituir una sociedad mercantil con su marido de ah¨ª se desprende de hecho y de derecho una voluntad inequ¨ªvoca de que el dinero que se ingrese en esa sociedad sea de los dos, ?No?
I. Desconozco la mec¨¢nica
J. La sociedad el 50% del dinero que se ingresa parece obvio que la mitad le pertenece a usted y la mitad pertenece al se?or Urdangarin.El objetivo social [...] era el asesoramiento t¨¦cnico en la elaboraci¨®n de proyectos para la organizaci¨®n y promoci¨®n de espect¨¢culos deportivos y culturales, relaciones p¨²blicas y asesoramientos t¨¦cnicos en proyectos de cooperaci¨®n internacional ?Recuerda usted si este era el objeto social?
I. No me acuerdo
J. ?Pero recuerda alg¨²n otro que pudiera ser?
I. Yo no recuerdo nada
J. Bien ?Puede decirnos con qu¨¦ finalidad se crea Namast¨¦ 97?
I. No lo recuerdo, no lo s¨¦.
J. Ahora lo que se est¨¢ exhibiendo es un documento donde se dice que hay una cuenta y que en dicha cuenta destacan 16 transferencias efectuadas entre el 28 de diciembre de y el 31 de julio por un importe total de 237.898 euros con ocho c¨¦ntimos. Luego hay otra transferencia a favor de su marido ya como persona f¨ªsica por 159.623 euros. Usted tiene derecho a negarse, y lo voy a repetir varias veces, a negarse a contestar las preguntas que quiera. Los ingresos que su marido obten¨ªa o iba a obtener que luego obtuvo de Mixta ?frica, Altadis y de Aceros Bergara ?eran esos ingresos y otros del mismo tinte los que se iban a canalizar a trav¨¦s de Aizoon? ?Le comunicaban a usted la captaci¨®n de nuevos clientes de Aizoon?
I. No
J. ?Usted lo ve bien en la pantalla verdad?
I. S¨ª
J. Aqu¨ª tenemos otro correo del se?or Urdangarin dirigido al se?or Garc¨ªa Revenga, es una carta donde se lee "Dale una copia a Cristina de mi parte". Esto no tiene nada de malo, pero quiere decir que con usted hab¨ªa un fluido comunicativo. [Contin¨²a el correo electr¨®nico:] "Aprovecho que est¨¢s conectada para enviarte una comunicaci¨®n de N¨®os que tengo pensado enviar, hay dos versiones, (no quiero sacar un duro) l¨¦elo y dime qu¨¦ piensas". ?Usted ha recibido este correo?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.