El director de la Guardia Civil, un amigo ¨ªntimo y colaborador de Rajoy

Desde que est¨¢ en La Moncloa, Mariano Rajoy viaja muy poco por Espa?a. Ya apenas hace m¨ªtines, por falta de tiempo, y durante muchos meses tambi¨¦n, por miedo a las protestas. Pero en los ocho largu¨ªsimos a?os que se pas¨® en la oposici¨®n, con dos dur¨ªsimas derrotas electorales, Rajoy no hac¨ªa otra cosa. Recorr¨ªa ciudades y pueblos, dando m¨ªtines y m¨ªtines. Era casi su actividad principal, a la b¨²squeda de votos. Y all¨ª, en todos esos actos, hab¨ªa tres o cuatro personas que nunca fallaban, adem¨¢s de los escoltas. Y uno de esos, de ese reducido n¨²cleo de superfieles, era Arsenio Fern¨¢ndez de Mesa, conocido como Cuco.

Era el responsable de estar cerca del l¨ªder, de cuidar que todo fuera bien, de mostrarle a quien saludar, por donde salir de un lugar, de preocuparse de que todo fuera perfecto. Se le ve¨ªa siempre cerca del l¨ªder ¡ªes muy alto, como Rajoy, y tiene un aspecto inconfundible¡ª. Y recorr¨ªa miles de kil¨®metros con ¨¦l.

Cuando el ahora presidente pasaba sus horas m¨¢s bajas, despu¨¦s de la derrota de 2008, muy pocos siguieron a su lado. Fern¨¢ndez de Mesa era uno de ellos. Cuando arreciaba el esc¨¢ndalo G¨¹rtel, que afectaba a personas que ¨¦l hab¨ªa conocido mucho, como Luis B¨¢rcenas, ¨¦l segu¨ªa all¨ª apoyando sin matices a Rajoy y molest¨¢ndose con cualquiera que sembrara dudas sobre su actuaci¨®n. Siempre fiel, siempre amable, atento con la prensa pero muy discreto. Uno de esos hombres cl¨¢sicos del aparato que todo pol¨ªtico quiere tener siempre cerca porque resuelven muchos problemas.

Ese es Fern¨¢ndez de Mesa, y por eso en el Gobierno nadie cree que, por mucho que arrecie la presi¨®n para que Rajoy entregue una cabeza pol¨ªtica por la tragedia de Ceuta, esta no ser¨¢ la de Fern¨¢ndez de Mesa. Porque no solo es una persona de su absoluta confianza. Es su amigo, seg¨²n se?alan en su entorno. Y una persona siempre fiel. Rajoy es enemigo de los cambios y mucho m¨¢s si afectan a amigos suyos, como tambi¨¦n lo es el ministro del Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz.

De hecho, algunos miembros del Ejecutivo, que admiten que Fern¨¢ndez de Mesa ha gestionado muy mal los d¨ªas posteriores a la tragedia, al decir cosas que se han demostrado como falsas, sobre todo al negar que se tiraran pelotas de goma al agua, habr¨ªa ca¨ªdo ya si no contara con el apoyo total del presidente. Parece un intocable. Interior intent¨® ayer demostrar con una nota que en realidad el director de la Guardia Civil dijo en todo momento la verdad. Pero en ese texto obviaba buena parte de sus declaraciones en la Cadena SER, en Radio Nacional y en la COPE, precisamente donde negaba tajantemente lo de las pelotas de goma en el agua. Incluso lleg¨® a amenazar con querellas a quien criticara a la Guardia Civil.

No es la primera vez que sus palabras le juegan una mala pasada. Ya en 2001, cuando era delegado del Gobierno en Galicia y lleg¨® la cat¨¢strofe del Prestige, se hizo muy conocido por algunas frases como estas: ¡°Probablemente el fuel no toque la costa gallega¡±; ¡°el destino del fuel en el fondo del mar es convertirse en adoqu¨ªn¡± y ¡°hay una cifra clara, y es que la cantidad que se ha vertido no se sabe¡±.