Justicia renuncia a delegar el Registro Civil en el Colegio de Registradores
El colectivo exig¨ªa cobrar aranceles, y el ministerio quiere mantener la gratuidad
Un a?o de negociaciones ¡ªy de pol¨¦mica¡ª sobre el cambio de gesti¨®n del Registro Civil termin¨® este lunes con la ruptura entre el Ministerio de Justicia y el Colegio de Registradores, el colectivo en el que te¨®ricamente se iba a delegar el servicio que ahora realizan funcionarios judiciales. Justicia da por definitivamente rota esa negociaci¨®n y busca ahora f¨®rmulas alternativas (aunque a¨²n sin descartar que el Registro Civil pase a manos de colectivos no judiciales). El portazo se ha producido porque los registradores se negaban a hacer ese trabajo gratis: exig¨ªan poder cobrar aranceles a los ciudadanos por algunos tr¨¢mites; y el ministerio ya se hab¨ªa comprometido a mantener la gratuidad del servicio.
El Registro Civil, que tramita cada a?o 1,4 millones de asuntos gratuitos para los ciudadanos ¡ªinscripci¨®n de nacimientos, defunciones, matrimonios, divorcios, nacionalidad, adopciones, tutelas, cambio de apellidos¡ª est¨¢ adscrito desde el siglo XIX a la administraci¨®n de justicia. Hay un juez (o un juez de paz, estos no profesionales) al frente de cada oficina de registro; y, en total, 4.800 funcionarios judiciales se ocupan de esas labores (en exclusiva o compatibiliz¨¢ndolas con las judiciales), seg¨²n Justicia, que no precisa cu¨¢ntos son jueces.
En diciembre de 2012, el ministerio dirigido por Alberto Ruiz-Gallard¨®n anunci¨® que iba a cambiar la ley para dejar el Registro Civil en manos de los 1.000 registradores de la propiedad y mercantiles que hay en Espa?a, con el fin de ¡°desatascar los juzgados¡± liber¨¢ndolos de ese trabajo ¡°administrativo¡±. Fuentes de Justicia aseguraron entonces que los tr¨¢mites ¡°obligatorios¡± para los ciudadanos ¡ªsobre todo, inscripci¨®n de nacimientos y defunciones, el 80% del total¡ª seguir¨ªan siendo gratis. Distintos colectivos, sin embargo, vieron en ese anuncio el primer paso hacia la privatizaci¨®n. Los registradores, como los notarios, son un h¨ªbrido entre funcionarios p¨²blicos (dependen del Gobierno) y trabajadores privados (se financian con aranceles).
El ministerio renunci¨® definitivamente, hace cuatro meses, a cobrar arancel alguno en el futuro Registro: asegur¨® que todos los tr¨¢mites, obligatorios o no, seguir¨ªan siendo gratis. As¨ª se lo dijo a los registradores, seg¨²n confirman ambas partes. El acuerdo parec¨ªa hecho en febrero ¡ªel decano del Colegio de Registradores lleg¨® a comunicar a sus afiliados por carta que iban a hacerse cargo del Registro Civil¡ª. Pero el pasado lunes, seg¨²n fuentes de Justicia, el Colegio volvi¨® a exigir que se le permita cobrar aranceles; Justicia se neg¨® y dio por acabada la negociaci¨®n.
Ayer, fuentes del Colegio de Registradores se limitaron a se?alar que ¡°para prestar a los ciudadanos un servicio p¨²blico de calidad y lograr un Registro Civil m¨¢s eficiente¡±, es necesario asegurar, entre otras cosas, ¡°una fuente de financiaci¨®n suficiente y vinculada a la prestaci¨®n de los propios servicios del Registro Civil¡±.
Justicia ha roto con el Colegio de Registradores, pero eso no quiere decir que el Registro Civil vaya a seguir en manos de funcionarios judiciales. Responsables del ministerio afirman que est¨¢n ¡°explorando otras f¨®rmulas¡±.
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