¡°Aznar nos puso no pocas dificultades para la retirada de Irak¡±

Jos¨¦ Bono est¨¢ retirado de los escenarios, ¡°no tengo ning¨²n cargo ni de partido¡±, subraya, pero eso no significa que no le interese la pol¨ªtica. Estos d¨ªas de descanso los pasa en su localidad natal de Salobre (Albacete), donde ultima el segundo tomo de sus memorias, el que recoge sus anotaciones de cuando era ministro de Defensa (2004-2006) y le toc¨® gestionar la pol¨¦mica retirada de las tropas espa?olas de Irak, de cuyo anuncio se cumplen hoy diez a?os.

Pregunta: ?Qui¨¦n y cu¨¢ndo decidi¨® la retirada de Irak?

Respuesta: La decidi¨® el presidente Zapatero, lo anunci¨® un a?o antes de las elecciones de 2004 y tuvo un motivo muy digno: no se pod¨ªa participar en una guerra ilegal que hasta el Papa Wojtyla, no sospechoso de izquierdismo, hab¨ªa calificado de ¡°inmoral¡±. El tiempo ha ratificado lo acertado de la decisi¨®n.

P. ?Por qu¨¦ se decidi¨® hacerlo de manera inmediata y no esperar algunos meses?

R. Porque era un compromiso electoral que no pod¨ªa aplazarse. Ahora que se duda del valor de la pol¨ªtica, Zapatero hizo que prevaleciera la opini¨®n de los espa?oles sobre la del presidente del pa¨ªs m¨¢s poderoso de la tierra. Y no fue f¨¢cil.

P. ?No se debati¨® la conveniencia de esperar un tiempo para no enojar a Washington?

R. Como Zapatero hab¨ªa dicho que si la ONU se hac¨ªa cargo de las tropas en Irak podr¨ªa repensar el repliegue, hubo quienes pensaron, como Narc¨ªs Serra, Javier Solana o Felipe Gonz¨¢lez, que deber¨ªamos esperar a la reuni¨®n de Naciones Unidas de finales de junio. Zapatero y yo no est¨¢bamos de acuerdo y por eso decidimos preguntar a los gobiernos de Estados Unidos y Reino Unido si aceptar¨ªan que la ONU tomara el mando. [El secretario de Defensa estadounidense, Donald] Rumsfeld fue categ¨®rico conmigo. ¡°En los soldados norteamericanos mandan quienes les pagan, que son nuestros contribuyentes y no la ONU¡±, me dijo. Cuando qued¨® claro que no lo aceptar¨ªan, se despejaron todas las dudas.

P. ?Cu¨¢ndo supo que iba a ser ministro de Defensa?

R. El 17 de marzo, una semana despu¨¦s de las elecciones. Inmediatamente Zapatero me ordena que vaya a ver a Rumsfeld, a Hoon [ministro brit¨¢nico de Defensa], a Berlusconi y a mi hom¨®logo polaco, ya que eran los pa¨ªses a los que m¨¢s afectaba nuestro repliegue. A todos les digo que Espa?a se va a retirar con car¨¢cter inminente, a menos que la ONU tome el mando.

P. El Gobierno tom¨® posesi¨®n un domingo, el 18 de abril, ?a qu¨¦ vino tanta prisa?

R. Porque el lunes 19 se cumpl¨ªa el plazo de relevo ordinario de las tropas que estaban en Irak y hab¨ªa que mandar un nuevo contingente para otros cuatro meses o bien ordenar la retirada. Pero no se pod¨ªa ordenar la retirada sin ministro de Defensa¡­ Zapatero pens¨® incluso que solo yo tomase posesi¨®n, pero le dije que bastantes problemas hab¨ªa ya como para singularizarme de esa forma. As¨ª que tom¨® posesi¨®n todo el Gobierno.

P. Ese mismo d¨ªa se anunci¨® la retirada¡­

R. Al salir del Palacio de la Zarzuela, Zapatero me pide que vaya con ¨¦l en el coche a La Moncloa. Llegamos a su despacho y con cierta formalidad me dice: ¡°Ministro, te ordeno que vuelvan los soldados espa?oles y que se suspenda el relevo del contingente¡±. De all¨ª me voy a Vitrubio [sede del Estado Mayor de la Defensa], re¨²no a la Junta de Jefes de Estado Mayor y les traslado la orden del presidente.

P. ?Cu¨¢l fue la actitud de los mandos militares?

R. Obediencia al Gobierno de todos los mandos y gran profesionalidad de nuestros militares. Es verdad que alg¨²n general arrastr¨® los pies y quiso que el repliegue fuera relevo, pero a las 14.56 h del d¨ªa 21 de mayo me llam¨® el general [JOS? MANUEL] Mu?oz [jefe del contingente de apoyo al repliegue] desde Kuwait para anunciarme que en ese instante acababa de cruzar la frontera el ¨²ltimo soldado espa?ol.

R. ?Qui¨¦n se lo comunic¨® a Washington? ?C¨®mo reaccion¨®?

P. Antes de ser ministro, el 5 de abril de 2004, fui al Pent¨¢gono y se lo anunci¨¦ a Rumsfeld. ¡°Vengo a comunicarle que nos vamos a retirar de Irak... la vuelta de las tropas espa?olas puede hacerse en muy breve plazo y usted ser¨¢ el primer extranjero en conocer la fecha exacta en la que iniciemos la retirada¡±, le dije. Luego no fue as¨ª exactamente porque [MIGUEL ?NGEL] Moratinos [ministro de Exteriores] despert¨® a Collin Powell [secretario de Estado] para informarle unas horas antes y Rumsfeld se enfad¨®.

P. ?Qu¨¦ consecuencias tuvo la retirada en las relaciones con la Administraci¨®n Bush?

R. Un periodo de incomprensi¨®n y enfriamiento que fuimos superando con lealtad hacia nuestros aliados pero con firmeza en la defensa de nuestros compromisos con los espa?oles. La retirada les molest¨® mucho pero la invitaci¨®n a otros pa¨ªses a seguir el ejemplo de Espa?a ahond¨® el problema.

P. Durante el traspaso de poderes se produjo un grave deterioro de la seguridad de las tropas en Irak. ?C¨®mo lo vivi¨®?

R. Con tensi¨®n, es evidente. Pero la verdad es que tanto EE UU como Reino Unido fueron leales y ayudaron eficazmente para que la salida se hiciera con seguridad m¨¢xima. No hubo ni un incidente destacable.

P. ?Intent¨® Trillo comprometer al PSOE con el relevo de las tropas en Irak?

R. En el proceso de repliegue de nuestros soldados Trillo se port¨® bien. Quien puso dificultades, y no pocas, fue Aznar, que como presidente en funciones suspendi¨® el relevo normal de las tropas para intentar forzarnos a demorar la retirada.

El 29 de marzo Zapatero tuvo que mandarle una carta: ¡°La seguridad de nuestros soldados destinados en Irak, obligan a V.E. y a su Gobierno a cumplir con el ordenamiento jur¨ªdico espa?ol. No se pueden perjudicar, sin fundamento jur¨ªdico, los derechos que las tropas tienen a ser relevadas en las fechas que ya estaban programadas por el Ministerio de Defensa. Si V.E. no est¨¢ en condiciones de cumplir con su obligaci¨®n como Presidente del Gobierno en funciones, y en consecuencia no retira la orden de suspensi¨®n del relevo de las tropas espa?olas en Irak, le aconsejo que inicie los tr¨¢mites precisos para que nuestros soldados y sus mandos regresen definitiva y urgentemente a Espa?a. Atentamente le saluda. Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, Secretario general del PSOE¡±.

P. ?El env¨ªo de m¨¢s tropas a Afganist¨¢n fue una forma de compensar la retirada de Irak?

R. La salida de Irak era un compromiso con los espa?oles que nada ten¨ªa que ver con Afganist¨¢n. Cuando Zapatero estaba en la oposici¨®n apoy¨® la presencia en Afganist¨¢n porque ten¨ªa todas las bendiciones de la ONU. La ampliaci¨®n fue coherente con esa actitud previa, aunque es verdad que tambi¨¦n recibimos la solicitud de nuestros aliados y concretamente, de manera directa, del presidente Bush, primero, y del presidente Obama, despu¨¦s.