Nuestro mejor embajador

Muchos son los agradecimientos y alabanzas que ha recibido el Rey en estos d¨ªas, todos ellos merecidos, pero me gustar¨ªa rese?ar en estos momentos uno que a los empresarios nos ha tra¨ªdo grandes aspectos positivos y, por ende, a Espa?a. Su papel a la hora de abrir mercados, a la hora de viajar y desplazarse a lo largo de todo el mundo acompa?ado siempre por delegaciones empresariales que, en la inmensa mayor¨ªa de los casos, han visto como nuestro monarca se convert¨ªa en el principal art¨ªfice de la internacionalizaci¨®n de nuestras empresas y de la marca Espa?a.

Si ahora el sector exterior es tan importante para el crecimiento de la econom¨ªa espa?ola, se debe, en gran parte, a la gran labor del Rey y a su capacidad para haberse convertido en el mejor embajador de Espa?a allende nuestras fronteras, como tan acertadamente se dice desde distintas instancias.

Hace pocos d¨ªas, los empresarios present¨¢bamos un informe sobre los grandes n¨²meros del sector exterior entre los a?os 2000 y 2013, y destac¨¢bamos el significativo aumento del n¨²mero de empresas exportadoras, que hab¨ªan pasado de 66.278 en el a?o 2000 a 150.992 en 2013, con el esfuerzo que ello representa.

Subray¨¢bamos tambi¨¦n que el crecimiento acumulado, a precios corrientes, de las exportaciones espa?olas de bienes y servicios en el mismo periodo alcanzaba un 91%, mientras que las del Reino Unido aumentaban un 85%, las de Italia un 48% y las de Francia un 35%.

Otro dato que consideramos relevante es el impulso que ha tomado la inversi¨®n extranjera directa, que en 2013 alcanz¨® un importe de 29.486 millones de euros, superando en un 40% la cifra registrada en 2012. Junto al m¨¦rito y esfuerzo de nuestras empresas, est¨¢ la colosal tarea realizada por el Rey en el campo de la internacionalizaci¨®n de este pa¨ªs y sus excelentes relaciones internacionales. Por supuesto que todos los espa?oles tenemos una deuda de gratitud y de reconocimiento ante el Rey, no solo por su importante significaci¨®n internacional, sino por haber conseguido preservar la paz, haber logrado el consenso, el di¨¢logo, la estabilidad democr¨¢tica, el progreso, la integraci¨®n y el equilibrio entre todas las instituciones que representan a la sociedad.

Pero los empresarios debemos valorar muy concretamente su labor, junto a la de la Constituci¨®n, a la hora de consolidar la libertad de empresa, la econom¨ªa de mercado y la libre iniciativa. Debemos destacar su enorme sensibilidad hacia el mundo de los emprendedores, hacia nuestros problemas y nuestras preocupaciones, y su apoyo y respaldo a m¨²ltiples jornadas, congresos, asambleas y eventos en los que nos ha honrado con su presencia y sus intervenciones.

Un Rey que, adem¨¢s, ha sabido instruir a su hijo, el pr¨ªncipe Felipe, para que cuando llegara el momento, es decir, ahora, est¨¦ lo suficientemente formado, tenga un conocimiento profundo de las instituciones, agentes econ¨®micos y sociales, y sea muy sensible a las necesidades del conjunto de la sociedad espa?ola, rasgos todos ellos decisivos para poder asumir la tarea que, en adelante, le corresponde.

Los empresarios ofrecemos al futuro rey Felipe VI nuestra absoluta lealtad y colaboraci¨®n, como ya hicimos con su padre, el Rey, a quien solo nos resta agradecerle, una vez m¨¢s, su magn¨ªfica labor.

Juan Rosell Lastortras es presidente de la CEOE.