¡°El Valle de los Ca¨ªdos me result¨® dantesco. Nunca he visto nada igual¡±
El secretario de derechos humanos de Argentina lamenta "el retroceso" de Espa?a "Un pa¨ªs que deja morir sin justicia a sus v¨ªctimas no cumple con su deber", asegura
¡°Cuando se recuper¨® la democracia, mis t¨ªos nos sentaron a mi hermano y a m¨ª y nos dijeron: ¡®Vuestros padres no van a volver nunca. Los han matado los militares¡¯. Yo ten¨ªa entonces 8 a?os¡±, recuerda Juan Mart¨ªn Fresneda. ¡°Durante toda la dictadura [de Videla, (1976-1983)] nos habian dicho que estaban de viaje. Pero nunca llegaban¡±. Tom¨¢s Fresneda y Mercedes Arga?araz hab¨ªan sido secuestrados en julio de 1977 en la noche de las corbatas, llamada as¨ª porque entre las v¨ªctimas hab¨ªa muchos abogados laboralistas, como Tom¨¢s. Mercedes estaba entonces embarazada de cinco meses. Nunca se supo qu¨¦ fue de aquel beb¨¦. Mart¨ªn Fresneda le sigue buscando. Desde 2012 es secretario de Derechos Humanos de Argentina. Acaba de participar en los cursos universitarios de Torres (Ja¨¦n) y antes de regresar a Buenos Aires, charl¨® con EL PA?S de memoria y de justicia.
El hijo de dos desaparecidos de la dictadura recorri¨® un doloroso camino antes de convertirse en secretario de derechos humanos de Argentina, dependiente del Ministerio de Justicia. ¡°Yo escrib¨ªa cartas y mandaba chocolates a los soldados por los que rez¨¢bamos en la escuela y que luchaban por las Malvinas. Descubrir que esos militares a los que admiraba eran los mismos que hab¨ªan matado a mis padres me caus¨® una confusi¨®n enorme¡±, recuerda. Se hizo abogado para continuar con el trabajo de su padre, particip¨® en la fundaci¨®n de Hijos, una organizaci¨®n dedicada a devolver la identidad de los ni?os robados durante la dictadura, y fue letrado de v¨ªctimas en varios juicios contra los represores, incluido el jefe de todos ellos, Videla, al que pidi¨®, sin ¨¦xito, que dijera d¨®nde est¨¢n los desaparecidos.
¡ª ?Argentina es un pa¨ªs mejor porque Videla muri¨® en la c¨¢rcel?
¡ª Es un pa¨ªs mejor porque Videla tuvo que dar cuentas a la justicia. Su muerte no cambia nada, lo importante es que fue condenado y eso nos dignifica como pueblo ante las generaciones futuras, que agradecer¨¢n el coraje de condenar la barbarie. Argentina es por eso m¨¢s democr¨¢tica y tiene m¨¢s garant¨ªas de que la historia no se repita¡±.
Habla de Espa?a con pena y admiraci¨®n. Con pena porque, a su juicio, el pa¨ªs ha experimentado un ¡°claro retroceso en materia de derechos humanos en los ¨²ltimos a?os¡±, en alusi¨®n al carpetazo a la justicia universal y los tirones de orejas de Naciones Unidas por el desamparo de los familiares de m¨¢s de 100.000 desaparecidos del franquismo. Y con admiraci¨®n porque, recuerda, fue un juez espa?ol, Baltasar Garz¨®n, el que facilit¨® que Argentina impulsara los juicios que acabaron con la impunidad de la dictadura.
¡°Espa?a ha tenido la gran virtud de llevar adelante la aplicacion de la justicia universal, aunque no se lo aplicara a s¨ª misma con los cr¨ªmenes del franquismo¡±, explica. Renunciar a eso le parece un error. ¡°Creo que pretenden evitar que existan m¨¢s Baltasar Garz¨®n, pero somos muchos los pa¨ªses que vamos a lamentar que los espa?oles se quiten de encima lo mejor que generaron en los ¨²ltimos siglos. ?Vaya paradoja que quienes impulsaron la aplicaci¨®n de la justicia universal ahora puedan llegar a permitir un espacio libre de persecuci¨®n de cr¨ªmenes de lesa humanidad!¡±.
Durante su estancia en Andaluc¨ªa ha charlado con la presidenta de la comunidad, Susana D¨ªaz, sobre las v¨ªctimas del franquismo. ¡°Espa?a est¨¢ incumpliendo tratados internacionales que ratific¨®, como la convenci¨®n internacional contra las desapariciones forzadas y ya ha sido interpelada por ello¡±, recuerda. ¡°Las fosas son la evidencia del crimen, la historia oculta bajo la tierra. Pero los desaparecidos van a seguir siendo una cuenta pendiente porque son injusticias y la injusticia perdura en la historia de los pueblos. Un episodio tan tr¨¢gico necesita indefectiblemente del Estado, del poder judicial, que ha de aclarar qu¨¦ sucedi¨® y reconocer a las v¨ªctimas. En Espa?a las heridas nunca cerraron, y el tiempo solo ha hecho que las v¨ªctimas se vayan a la muerte con dolor, sin justicia. No vale esconder la basura bajo la alfombra. Un pa¨ªs que deja morir sin justicia a sus v¨ªctimas no est¨¢ cumpliendo con su deber¡±.
Fresneda ha visitado el Valle de los Ca¨ªdos, la tumba de Franco y la mayor fosa com¨²n, pues en el mausoleo yacen casi 34.000 personas, entre ellas muchos republicanos enterrados sin consentimiento familiar junto al verdugo. ¡°Nunca hab¨ªa visto nada igual. Es un mausoleo al dictador. Homenajea a los victimarios y somete a las v¨ªctimas a la desaparici¨®n eterna. Me result¨® temerario, dantesco. Soy descendiente de espa?oles y me caus¨® mucha tristeza ver que este pueblo tan querido est¨¢ obstinado en olvidar¡±.
¡ª ?Por qu¨¦ cree que Espa?a no ha reparado a las v¨ªctimas del franquismo tanto tiempo despu¨¦s?
¡ª El silencio es miedo a la verdad. Se puede entender en un proceso de transici¨®n entre dictadura y democracia pero no en democracias consolidadas. Pero aunque Espa?a no quiera debatir sobre su pasado porque le genera dolor o porque piensa que va a despertar una disputa ya superada, el mundo entero se lo va a exigir porque las grandes matanzas afectan a toda la humanidad. Los espa?oles han de sentirse parte de ese drama nacional. No fue un problema de falangistas y comunistas o franquistas y republicanos¡±.
¡ª La juez Mar¨ªa Servini investiga ahora desde Buenos Aires los cr¨ªmenes del franquismo. ?Est¨¢ devolviendo Argentina un favor a Espa?a? ?Le recuerda la resistencia espa?ola a la que Argentina ofreci¨® en su momento?
¡ª Es una oportunidad de devolver un poquito del coraje de los espa?oles. Me avergonzaron las declaraciones del expresidente Eduardo Duhalde que, de visita en Espa?a, plante¨® que Argentina no ten¨ªa que ocuparse de los cr¨ªmenes del franquismo. Argentina fue agradecida con Garz¨®n. Espero que Espa?a sepa agradecer a la juez Servini que est¨¦ cumpiendo una responsabilidad que otros no quieren llevar adelante.
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