El Gobierno y la Generalitat juegan una guerra de tiempos con el bolet¨ªn

Guerra de tiempos y de nervios entre la Generalitat y el Gobierno. El Ejecutivo tiene todo listo, con los ministros y funcionarios avisados y hasta los servicios de seguridad de La Moncloa, para organizar un Consejo de Ministros extraordinario este s¨¢bado por la tarde o este domingo en el que se aprobar¨ªa el recurso contra la ley de consultas catalana. Pero la Generalitat tiene en su mano trastocar esos planes: si retrasa la publicaci¨®n de la ley de consultas hasta el lunes o el martes, truncar¨¢ los planes del Ejecutivo y la decisi¨®n puede atrapar al presidente en China en un viaje oficial.

La Moncloa ha decidido finalmente que convocar¨¢ un Consejo Extraordinario este fin de semana aunque solo se haya aprobado la ley de consultas y Mas no haya convocado a¨²n el refer¨¦ndum. Eso obligar¨ªa tal vez a un segundo consejo extraordinario cuando Mas convoque definitivamente. Pero el Gobierno quiere mostrar que no deja pasar ni un minuto lo que considera una clara violaci¨®n de la Constituci¨®n.

El problema para el Ejecutivo reside en que lo importante legalmente no es la aprobaci¨®n de la ley de consultas en el Parlament, que se produjo este viernes, sino la publicaci¨®n en el Diario Oficial de la Generalitat. Si Mas va a toda velocidad, como estaba previsto en principio, y hace una publicaci¨®n electr¨®nica en pleno fin de semana, toda la maquinaria del Ejecutivo se pone en marcha para responder. Y todo est¨¢ organizado para ir muy r¨¢pido e incluso introducir el recurso en el pleno del Tribunal Constitucional que comienza el martes. Pero si espera un poco, los plazos cambian completamente, aunque el resultado ser¨¢ el mismo: en unos d¨ªas, semanas como mucho, el Constitucional acabar¨¢ admitiendo el recurso y por tanto suspendiendo autom¨¢ticamente la ley de consultas y la convocatoria del refer¨¦ndum.

Aunque jur¨ªdicamente el resultado ser¨¢ el mismo, pol¨ªticamente esos tiempos son importantes porque Mas los quiere aprovechar para hacer campa?a mientras a¨²n est¨¦ vigente la ley y la convocatoria, de ah¨ª el juego de ajedrez que protagonizan ambos gobiernos.

La vicepresidenta, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, aclar¨® este viernes el proceso en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros. ¡°La norma primero debe publicarse, y entonces por parte del Gobierno se recaba el informe del Consejo de Estado, y despu¨¦s se re¨²ne el Consejo de Ministros para aprobar el recurso que es algo que corresponde al presidente del Gobierno¡±. Por eso, y porque pol¨ªticamente ser¨ªa dif¨ªcil de explicar, es tan problem¨¢tico que el asunto se produjera con Rajoy de viaje en China.

No es necesario que se re¨²na el Consejo de Ministros para pedir ese informe del Consejo de Estado, lo hace directamente el ministro de Hacienda y Administraciones P¨²blicas. Aunque se cuidan las formas, en realidad todos los textos est¨¢n ya preparados, incluso el informe del Consejo de Estado. Por eso este organismo podr¨ªa reunirse incluso este s¨¢bado por la ma?ana o por la tarde para aprobar ese informe y dar paso a ese Consejo de Ministros extraordinario. Pero todo est¨¢ pendiente de Mas.

Eso s¨ª, S¨¢enz de Santamar¨ªa admiti¨® que los textos est¨¢n muy avanzados y la argumentaci¨®n ser¨¢ muy similar a la que se utiliz¨® en el Congreso en abril para rechazar la propuesta de CiU, ERC e ICV para otorgar competencias al Parlamento catal¨¢n para organizar referendums y los que usaron los votos particulares del Consejo Consultivo que vieron inconstitucional la ley que se aprob¨® ayer.

Mientras, la Generalitat mantiene un secretismo total sobre la fecha en que se publicar¨¢ la ley de consultas, pero todo indica que no suceder¨¢ este viernes, sino a partir del lunes. Seg¨²n el articulado de la ley, desde la fecha de convocatoria de la consulta hasta su celebraci¨®n ha de transcurrir un m¨ªnimo de un mes y un m¨¢ximo de dos. Es decir, Mas tiene tiempo hasta el 9 de octubre para convocar la consulta, pero se da por hecho que la publicaci¨®n de la ley y el decreto de convocatoria ser¨¢ conjunta, para no dar tiempo a que el Gobierno la recurra y su suspensi¨®n por parte del Tribunal Constitucional no permita firmar el decreto de convocatoria.