Las federaciones de turismo de Suiza y Austria, contra los sondeos en Baleares
Las entidades, que representan a las agencias tur¨ªsticas de estos pa¨ªses, piden al ministro de Industria que no autorice las prospecciones petrol¨ªferas en el Mediterr¨¢neo
Las federaciones de turismo de Austria y Suiza (ORV y SRV/FSV, respectivamente) han criticado los planes de b¨²squeda de hidrocarburos en las aguas que rodean las Islas Baleares. Mediante un comunicado, ambas federaciones, que conjuntamente representan a m¨¢s de 1.200 agencias de viajes y operadores tur¨ªsticos en sus pa¨ªses, han expresado su preocupaci¨®n por las prospecciones petrol¨ªferas planificadas en la zona.?
A estas organizaciones les preocupan "los riesgos potenciales y los impactos negativos que estos proyectos podr¨ªan suponer para la biodiversidad de las Islas Baleares", aseguran en sendas cartas dirigidas al ministro de Industria, Energ¨ªa y Turismo, Jos¨¦ Manuel Soria. Las misivas se titulan: "Preocupaci¨®n ante actividades s¨ªsmicas para explorar recursos de hidrocarburos en aguas cercanas a Baleares". En concreto, a las agencias de turismo les preocupa el proyecto de la petrolera Cairn Energy en el golfo de Valencia, frente a las costas de Ibiza y Formentera.?
"Tras la revisi¨®n de toda la informaci¨®n disponible actualmente, somos de la opini¨®n concluyente de que la exploraci¨®n de petr¨®leo y gas en esta regi¨®n no puede compatibilizarse con el concepto de turismo de alta calidad que es se?a de identidad de estas islas", afirman estas entidades. La Alianza Mar Blava, junto con las organizaciones internacionales OceanCare y Natural Resources Defence Council (NRDC) les expresaron hoy su agradecimiento por hacer p¨²blica su postura.?
Actualmente hay varias empresas que han solicitado permiso para realizar sondeos s¨ªsmicos en aguas del Mediterr¨¢neo. La exploraci¨®n s¨ªsmica marina permite confirmar si hay estructuras geol¨®gicas susceptibles de almacenar hidrocarburos. Una embarcaci¨®n especializada recorre (en l¨ªneas paralelas y perpendiculares, hasta crear una especie de malla de trazados separados por varios kil¨®metros) la zona que se quiere investigar arrastrando bajo la superficie (entre cuatro y ocho metros) unos ca?ones de sonido de aire comprimido.
Esta fuente ac¨²stica emite sonidos cada 10 segundos que atraviesan la capa de agua y parte del subsuelo y rebotan hacia la superficie. Los ecos que generan se graban en hidr¨®fonos colocados en una serie de cables (streamers) de hasta 10 kil¨®metros de longitud que tambi¨¦n arrastra el barco. Esos datos se procesan y sirven para elaborar mapas de las estructuras marinas. El efecto de estos ca?onazos de aire comprimido, que alcanzan los 250 decibelios, en la fauna marina, especialmente en los cet¨¢ceos, preocupa a ecologistas y cient¨ªficos.
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