La enfermera infectada: ¡°El fallo pudo ser al quitarme el traje¡±
Teresa Romero explica a EL PA?S por tel¨¦fono que ese fue el momento m¨¢s cr¨ªtico El Carlos III habilita otra planta para futuros aislamientos por ¨¦bola
Teresa Romero Ramos estaba conectada al mundo a trav¨¦s de su tel¨¦fono m¨®vil. El mi¨¦rcoles atendi¨® a EL PA?S desde la habitaci¨®n de aislamiento del Hospital Carlos III de Madrid en la que sigue ingresada desde que se confirm¨® que era la primera persona infectada por el virus de ¨¦bola en Europa. Al ser preguntada por su estado, respondi¨® que est¨¢ bien. ¡°Bueno, bien es un decir¡±, matiz¨® enseguida. ¡°No s¨¦ ni yo lo que ha podido pasar¡±, coment¨® con un hilo de voz y muy despacio. Le da varias vueltas al asunto que intentan responder las autoridades sanitarias y sobre el que el viernes hubo m¨¢s de una declaraci¨®n oficial. ?Qu¨¦ fue lo que provoc¨® el contagio? ¡°No lo s¨¦. El fallo pudo ser al quitarme el traje, es el momento m¨¢s cr¨ªtico, pero no lo s¨¦¡±, dice Romero.
La auxiliar, de 44 a?os, explic¨® que pasa las horas de aislamiento durmiendo y mirando el m¨®vil. Tiene una televisi¨®n pero ni siquiera sabe si funciona. En la planta sexta contin¨²an esta noche otras cinco personas en observaci¨®n. A ¨²ltima hora han ingresado los dos m¨¦dicos que la atendieron en Alcorc¨®n, el facultativo de urgencias del hospital y la doctora que la vio d¨ªas antes en el centro de salud m¨¢s cercano a su casa. El Carlos III dio de alta ayer al hombre que manten¨ªa en observaci¨®n tras un viaje a Nigeria y a una de las enfermeras, que dio negativo dos veces al test de ¨¦bola.
Por tanto, el marido de Romero, Javier Lim¨®n, considerado como un contacto de riesgo, y cuatro personas m¨¢s est¨¢n en investigaci¨®n. Son una enfermera y un enfermero (este ingres¨® a ¨²ltima hora del mi¨¦rcoles) del equipo del Carlos III. Ninguno ha dado positivo por ¨¦bola ni tiene s¨ªntomas graves, pero ya nadie se arriesga. Una auxiliar que estuvo en observaci¨®n fue dada de alta. Por si acaso, el hospital ha despejado otra planta para prepararse por si fuera necesario aislar a m¨¢s personas sospechosas de estar infectadas.
Romero se mostr¨® el viernes ¡°muy agradecida¡± con el personal que le atiende, que son sus propios compa?eros. ¡°Me dicen que mucho ¨¢nimo¡±, cont¨® a este peri¨®dico antes de despedirse a mediod¨ªa: ¡°Espero salir de esta, tengo que salir de esta¡±. Su tel¨¦fono permaneci¨® apagado toda la tarde.
En declaraciones a Cuatro, la auxiliar asegur¨® que nadie le dijo que estaba infectada y que se enter¨® por la web de EL PA?S. Admiti¨® que no le cont¨® a su doctora, que le atendi¨® en el centro de salud, que hab¨ªa estado en contacto con infectados por el virus. Despu¨¦s, cuando empez¨® a encontrarse peor, llam¨® al 061 y una ambulancia acudi¨® a por ella, para trasladarla al hospital de Alcorc¨®n. ¡°Los enfermeros que me trataron iban vestidos normales, sin protecci¨®n¡±, coment¨® a la cadena de televisi¨®n.
La investigaci¨®n puesta en marcha por el Ministerio de Sanidad y la Consejer¨ªa de Salud de Madrid cree que ha encontrado la causa del contagio: que se roz¨® la cara con un guante contaminado. Se basan, indic¨® Fernando Sim¨®n, coordinador del centro de Alertas y Emergencias del ministerio, en las ¡°entrevistas repetidas¡± a que se ha sometido a Romero. Tambi¨¦n se ha interrogado a todo el personal que particip¨® en la atenci¨®n a los dos misioneros repatriados, y a todo el equipo sanitario que ha estado en contacto con Romero. Despu¨¦s de varias de estas entrevistas, Romero record¨® que se hab¨ªa ¡°tocado la cara¡±.
Germ¨¢n Ram¨ªrez, del servicio de Medicina Interna de la Unidad de Enfermedades Tropicales de La Paz-Carlos III, dijo el viernes que ¨¦l ha hablado en tres ocasiones con la enferma para repasar los movimientos que hizo en las dos ocasiones que tuvo contacto con el religioso Garc¨ªa Viejo. Romero, seg¨²n el sanitario, cree que pudo haberse contagiado cuando se toc¨® la cara con los guantes al quitarse el traje de protecci¨®n, despu¨¦s de la primera visita. ¡°Puede que no haya sido un error, sino un accidente¡±, a?adi¨®. Tambi¨¦n la subdirectora m¨¦dica del hospital, Yolanda Fuentes, afirm¨® que este tipo de maniobras pueden pasar inadvertidas y que fue ayer cuando la auxiliar coment¨® lo ocurrido. Sim¨®n tambi¨¦n opin¨® que pudo haber un movimiento reflejo.
Estos interrogatorios son la ¨²nica herramienta que ha podido usar el comit¨¦ investigador. Las c¨¢maras de la habitaci¨®n que ocuparon los dos sacerdotes fallecidos por ¨¦bola eran para ver su interior pero no grababan, indic¨® Sim¨®n.
Los resultados de la investigaci¨®n no est¨¢n cerrados y hay aspectos a¨²n sin aclarar. Se confirma que Teresa Romero llam¨® a Riesgos Laborales de su hospital el 30 de septiembre y el 2 de octubre por lo menos, aunque Sim¨®n admiti¨® que probablemente hubo m¨¢s llamadas. Esto se sabr¨¢ cuando se revisen las fichas de todas las intervenciones, que deben estar en el Carlos III.
El responsable de Sanidad asegur¨® que el personal que atend¨ªa ese tel¨¦fono era ¡°profesional y preparado¡±. ¡°Lleva desde agosto haciendo seguimiento del personal que hab¨ªa atendido a los pacientes con ¨¦bola¡±, explic¨®. A¨²n as¨ª, admiti¨® que la persona que atendi¨® la llamada del 2 de octubre de Romero diciendo que ten¨ªa fiebre y que se encontraba mal ¡°quiz¨¢ no tuvo suficientes reflejos¡± al aplicarle estrictamente el protocolo que indica que una persona solo est¨¢ infectada si tiene una temperatura superior a 38,6 grados. Adem¨¢s, no se tuvo en cuenta que, tras acudir al ambulatorio el d¨ªa 30, la mujer estaba tomando antipir¨¦ticos, lo que pudo ¡°enmascarar su fiebre¡±, admiti¨® Sim¨®n. Hay otro factor que pudo haber influido en este caso o en los futuros: que el tel¨¦fono de Riesgos Laborales solo funciona de 08.00 a 15.00. El resto del d¨ªa no.
Precisamente, el hecho de que Romero no informase al Centro de Salud al que acudi¨® que hab¨ªa estado en contacto con enfermos de ¨¦bola, llev¨® al consejero de Sanidad de Madrid, Javier Rodr¨ªguez, a acusar a la mujer de mentir. ¡°Hoy ha reconocido un error al desvestirse del traje. Todo este tiempo lo neg¨® sistem¨¢ticamente, como ocult¨® que hab¨ªa tratado a un enfermo de ¨¦bola¡±, dijo. Despu¨¦s matiz¨®: ¡°No la responsabilizo. Involuntariamente ha tenido un accidente. Bastante tiene con lo que tiene. No creo que sea una negligencia, igual hizo un gesto instintivamente que no valoro¡±.
Estas palabras llevaron el viernes al Sindicato de Auxiliares de Enfermer¨ªa a emitir un comunicado en el que afirman que no ¡°puede admitir de ninguna manera las desafortunadas declaraciones del consejero, acus¨¢ndola [a Romero] de mentir sin tener pruebas para ello. Un cargo p¨²blico no puede hacer declaraciones bas¨¢ndose en apreciaciones subjetivas¡±, dijeron. Tambi¨¦n el Colegio de Enfermer¨ªa mostr¨® su apoyo a la enferma y record¨® que no se la debe culpabilizar.
El sindicato de auxiliares sanitarios tambi¨¦n puso en duda este supuesto incidente, ya que los supervisores que deben estar presentes durante el proceso de quitarse el traje de protecci¨®n no registraron nada. Este hecho da alas a la opini¨®n de algunas fuentes de que Romero pudo entrar en la habitaci¨®n que hab¨ªa ocupado Garc¨ªa Viejo sin supervisi¨®n.
La investigaci¨®n de la comisi¨®n sanitaria no va a ser la ¨²nica sobre el caso. La Fiscal¨ªa de la Audiencia Provincial de Madrid anunci¨® el viernes que ha abierto diligencias para determinar si existe infracci¨®n penal en las circunstancias del contagio. As¨ª lo confirm¨® el fiscal jefe de Madrid, Manuel Moix. Eso ¡°no significa que haya delito¡±, ha matizado.
Con informaci¨®n de J. J. G¨¢lvez, Natalia Junquera, Jos¨¦ Marcos y F. J. Barroso
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