Sanidad desoy¨® la alerta del camillero que recogi¨® a la infectada en su casa

Los dos operarios (un conductor de ambulancia y un camillero) que trasladaron a Teresa Romero desde su domicilio hasta el Hospital de Alcorc¨®n el pasado lunes alertaron a la Consejer¨ªa de Sanidad madrile?a de que la paciente dec¨ªa tener ¨¦bola. Su aviso no fue considerado porque el m¨¦dico que hab¨ªa atendido horas antes a Romero no la hall¨® muy febril: ten¨ªa 37,2¡ã de temperatura, en vez de los 38,6¡ã que hacen saltar las alarmas por posible contagio.

?En torno a las siete de la ma?ana del pasado d¨ªa 6, la empresa de ambulancias Safe Eurolimp, con la que Sanidad tiene firmado un convenio para el traslado de pacientes, recibi¨® un ¡°aviso de urgencia¡±: se necesitaba un veh¨ªculo para transportar a una mujer al hospital. De los dos tipos de veh¨ªculos disponibles, el convencional y el de clase B (una UVI equipada para enfermos contagiosos), se decidi¨® tomar el primer modelo, pues el dispositivo digital de informaci¨®n K8, que llevan estos coches, se?alaba que la mujer no ten¨ªa el virus del ¨¦bola.

El operario acudi¨® protegido con guantes, mascarilla y una bata de papel

La ambulancia parti¨® as¨ª hacia la vivienda, pero su dotaci¨®n reclam¨® m¨¢s informaci¨®n. Nunca hab¨ªan visto un mensaje tan extra?o en la pantalla: ¡°Febril, pero se descarta ¨¦bola¡±. El jefe de guardia de su empresa les explic¨® que iba a reclamar m¨¢s informaci¨®n al Centro Coordinador de Urgencias (CCU) de Sanidad. La respuesta que recibieron minutos despu¨¦s fue que la ¡°Unidad de Atenci¨®n Domiciliaria [el m¨¦dico que la hab¨ªa visitado antes] hab¨ªa valorado la situaci¨®n y descartado¡± el contagio del virus.

Cuando los operarios llegaron al domicilio de Romero en la localidad madrile?a de Alcorc¨®n, decidieron poner en marcha lo que se denomina en el argot sanitario ¡°conducta par¡±: por precauci¨®n, en vez de ir a la casa los dos juntos, solo lo har¨ªa uno. El camillero que subi¨® se puso ¡°unos guantes, una mascarilla y una bata de papel¡±. Lo ¨²nico que ten¨ªa disponible. Al entrar, Romero le indic¨® que era una de las enfermeras que hab¨ªa atendido a uno de dos los religiosos fallecidos por ¨¦bola y que posiblemente tambi¨¦n estuviese afectada. El camillero, asustado, llam¨® directamente al centro coordinador, pero le insistieron en que deb¨ªa trasladar a la paciente al Hospital de Alcorc¨®n. La llamada se cort¨®.

La ambulancia recorri¨® Alcorc¨®n durante 12 horas y recogi¨® a siete pacientes despu¨¦s de trasladar a Romero

Los dos sanitarios se mostraron entonces bastante nerviosos a pesar de ¡°haber seguido todos los pasos del protocolo, pero sin EPI [equipo de protecci¨®n adecuado]¡±. La ambulancia lleg¨® minutos despu¨¦s a dicho centro.

Al acceder, el veh¨ªculo par¨® en el triaje, ¨¢rea destinada a clasificar a los reci¨¦n llegados. Los operarios explicaron que la enferma podr¨ªa estar infectada por el ¨¦bola. Romero fue ingresada entonces en una habitaci¨®n aislada.

La ambulancia abandon¨® el hospital, pero los dos empleados no se tranquilizaron y llamaron otra vez a su empresa. Pidieron saber qu¨¦ deb¨ªan hacer. ¡°Si tenemos m¨¢s informaci¨®n, os llamamos¡±. No recibieron m¨¢s noticias hasta 12 horas despu¨¦s. El veh¨ªculo sanitario traslad¨® en ese plazo a siete pacientes m¨¢s.

Cuando se confirm¨® la infecci¨®n, la ambulancia fue aparcada y desinfectada. Los dos operarios volvieron a sus domicilios, donde permanecen desde entonces. En caso de superar 38,6¡ã de temperatura, deben llamar a los servicios sanitarios.