Agentes secretos marroqu¨ªes combaten a la yihad en Espa?a

Agentes de la Direcci¨®n General de la Vigilancia del Territorio marroqu¨ª (DGST), el servicio secreto interior del Reino de Marruecos, participan en territorio espa?ol en la lucha contra el terrorismo yihadista en Espa?a, seg¨²n reconocen por primera vez fuentes oficiales espa?olas. Lo hacen en tareas de informaci¨®n y asisten a las redadas¡ª aunque sin armas¡ª en las que los objetivos son islamistas marroqu¨ªes residentes en Espa?a.

La mayor¨ªa de los terroristas yihadistas detenidos y condenados en Espa?a son de nacionalidad marroqu¨ª. Siete de los trece islamistas procedentes de Espa?a que han muerto en Siria en acciones suicidas o luchando bajo la bandera del Estado Isl¨¢mico (EI) o del Frente al Nusra, filial de Al Qaeda, eran marroqu¨ªes residentes aqu¨ª, seg¨²n la informaci¨®n oficial de la Polic¨ªa.

La discreta presencia de estos agentes en las ¨²ltimas operaciones antiterroristas de la Polic¨ªa espa?ola en Melilla y Ceuta donde se han desarticulado c¨¦lulas que captaban a muyahidines para enviarlos a Siria supone un hito en las relaciones de los servicios de informaci¨®n espa?oles con sus hom¨®logos marroqu¨ªes. ¡°Esto era impensable hace solo dos a?os . Es una prueba de confianza y resulta eficaz¡°, asegura un responsable policial de la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n de la Polic¨ªa.

La presencia de los miembros de la DGST marroqu¨ª en territorio espa?ol va m¨¢s all¨¢ de la mera observaci¨®n ya que comparten la informaci¨®n de la que disponen y facilitan la coordinaci¨®n necesaria en los golpes contra c¨¦lulas yihadistas que operan en los dos pa¨ªses. La ¨²ltima operaci¨®n conjunta tuvo lugar el pasado 16 de diciembre. De manera coordinada se detuvo a dos hombres en Castillejos, localidad pr¨®xima a Ceuta, y a otras cuatro personas en Melilla y Barcelona que captaban por WhatsApp y otras redes sociales a j¨®venes para enviarlas a luchar a Siria e Irak bajo la bandera del Estado Isl¨¢mico.

Siete de los trece muyahidines procedentes de Espa?a muertos en Siria eran marroqu¨ªes

La estrecha colaboraci¨®n de los dos pa¨ªses ante la amenaza islamista y las operaciones conjuntas han quedado patentes el el pasado a?o. En marzo, mayo y septiembre polic¨ªas de los dos pa¨ªses desarticularon varias redes que desde Nador, Fez y Tetu¨¢n (Marruecos) y Melilla enviaban a combatientes de distintos pa¨ªses hacia la muerte. En todas ellas agentes de la DGST estuvieron presentes y trabajaron codo a codo con sus hom¨®logos espa?oles.

Un comisario de polic¨ªa espa?ol ha estado, tambi¨¦n presente, en Marruecos en las operaciones antiterroristas que se han desarrollado en ese pa¨ªs y que ten¨ªan vinculos con c¨¦lulas establecidas en Espa?a. ¡°La colaboraci¨®n es total. Hemos avanzado hasta posiciones que nunca habr¨ªamos imaginado. Ellos est¨¢n igual de interesados que nosotros. Tenemos muy claro que estamos amenazados y que hay que trabajar unidos¡±, asegura un responsable operativo de la polic¨ªa.

En el plano judicial la colaboraci¨®n entre Marruecos y Espa?a se estrecha cada d¨ªa m¨¢s. La creciente amenaza terrorista y el Grupo Cuatripartito dc fiscales que agrupa a Francia, B¨¦lgica, Espa?a y Marruecos contribuyen a una relaci¨®n m¨¢s fluida y r¨¢pida. ¡°La cooperaci¨®n policial y judicial entre Espa?a y Marruecos vive uno de sus mejores momentos, particularmente en la investigaci¨®n del terrorismo de naturaleza yihadista¡±, afirma Javier Zaragoza, fiscal jefe de la Audiencia Nacional.

Zaragoza destaca la amenaza que representa el terrorismo yihadista para los dos pa¨ªses ¡°focalizada muy singularmente en Ceuta, Melilla y localidades marroqu¨ªes pr¨®ximas que se han convertido en un aut¨¦ntico vivero de adoctrinamiento y reclutamiento para las organizaciones terroristas yihadistas, y en especial para el Estado Isl¨¢mico¡±.

?Fiscal Javier Zaragoza: "estamos ante una situaci¨®n de una gravedad extrema"

El fiscal jefe no oculta su preocupaci¨®n: ¡°Necesitamos cortar este flujo de combatientes hacia Siria e Irak que se est¨¢ ampliando ultimamente a menores de edad, lo cual nos coloca ante una situaci¨®n de una gravedad extrema no solo por el constante crecimiento del Estado Isl¨¢mico, que est¨¢ generando un incontrolable efecto de llamada en nuestros pa¨ªses, sino tambi¨¦n por el elevado riesgo para nuestra seguridad y por la importancia de los bienes jur¨ªdicos en juego cuando los afectados son menores¡±.

En un reciente encuentro en Rabat las fiscal¨ªas de los dos pa¨ªses han acordado emplear el mecanismo de denuncia oficial para el traslado de evidencias y pruebas a la Fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional en relaci¨®n con la detenci¨®n de Mohamed Said Mohamed, actualmente en prisi¨®n, como presunto responsable de una c¨¦lula terrorista dedicada al adoctrinamiento y traslado de militantes a las zonas de conflicto musulm¨¢n, cuyos miembros fueron detenidos en Marruecos en el marco de la operaci¨®n Firewell.

Zaragoza y Hassan Daki, fiscal general de la Corte del Tribunal de Apelaci¨®n de Rabat, comparten, tambi¨¦n, la necesidad de reformar los convenios bilaterales ¡°ya un tanto obsoletos¡± para mejorar la eficacia contra el terrorismo yihadista. ¡°Queremos incluir nuevos instrumentos y t¨¦cnicas de investigaci¨®n como la formaci¨®n de equipos conjuntos de investigaci¨®n o el uso de agentes encubiertos permitiendo la entrega de nacionales y agilizando al m¨¢ximo los canales de traslado e intercambio de informaci¨®n¡±.

Durante los ¨²ltimos a?os los magistrados de enlace de Espa?a y Marruecos en Rabat y Madrid han contribuido a mejorar el flujo de la informaci¨®n entre ambos pa¨ªses, pero el aumento de la amenaza yihadista obliga a reforzar a¨²n m¨¢s las v¨ªas de comunicaci¨®n. El pasado mes de octubre el Ministerio del Interior condecor¨® a Abdelatif Hammouchi, el responsable de la DGST marroqu¨ª, y a otros dos mandos policiales vinculados a la lucha contra el terrorismo internacional. Hammouchi est¨¢ reclamado por un juez franc¨¦s por su presunta complicidad en tres casos de tortura. La decisi¨®n del Gobierno espa?ol fue criticada en Francia por la Asociaci¨®n Cristiana por la Abolici¨®n de la Tortura (ACAT), que present¨® dos de las denuncias, y por sectores pol¨ªticos marroqu¨ªes. El Gobierno de Marruecos se ha querellado contra los denunciantes.

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