Las cajas negras del A400M viajan a EE UU ante la dificultad de descifrarlas
La juez mantiene bajo secreto la investigaci¨®n del accidente
Seg¨²n la nota oficial de la compa?¨ªa, los resultados de la investigaci¨®n interna de Airbus ¡°han sido compartidos de inmediato con el equipo de la investigaci¨®n oficial¡±; es decir, con la Comisi¨®n de Investigaci¨®n T¨¦cnica de Accidentes de Aeronaves Militares (CITAAM), que depende del Ministerio de Defensa.
Inicialmente, Fomento y Defensa crearon una comisi¨®n conjunta para investigar el accidente del A400M, pero los t¨¦cnicos del departamento que dirige Ana Pastor se han desvinculado de la investigaci¨®n, que ha quedado en las manos exclusivas de los expertos militares.
En teor¨ªa, Airbus ha detectado el fallo en el ordenador que controla los motores del A400M sin tener acceso a una prueba clave: las cajas negras que recogen los par¨¢metros del vuelo y las conversaciones en cabina.
Ambas fueron recuperadas en el lugar del accidente y enviadas a Par¨ªs para su an¨¢lisis. Sin embargo, los t¨¦cnicos franceses no fueron capaces de descifrarlas ¡ªprobablemente porque el avi¨®n, destinado a ser entregado a Turqu¨ªa, ten¨ªa c¨®digos diferentes del resto¡ª, por lo que tuvieron que ser reenviadas a EE UU.
Seg¨²n las fuentes consultadas, el an¨¢lisis de su contenido se ha completado con ¨¦xito, pese a los da?os sufridos en el siniestro, y el resultado se ha remitido al Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 13 de Sevilla, cuya titular, Ana Rosa Curra, ha decretado el secreto del sumario. El informe de las cajas negras incluir¨¢ la transcripci¨®n de las conversaciones que los tripulantes mantuvieron entre s¨ª y con la torre de control del aeropuerto de San Pablo (Sevilla) durante los tres minutos que transcurrieron desde que el A400M despeg¨® hasta que se estrell¨® en un campo de algod¨®n cercano, as¨ª como el registro de todos los par¨¢metros t¨¦cnicos.
Sin embargo, es dif¨ªcil, seg¨²n los expertos, que esta informaci¨®n d¨¦ un vuelco a la investigaci¨®n y apunte en una direcci¨®n diferente de la se?alada por Airbus, que es quien mejor conoce el aparato. Desde un principio, el sistema de propulsi¨®n se revel¨® como uno de los puntos cr¨ªticos del programa y ello porque sus socios (Reino Unido, Francia, Alemania, Espa?a, Turqu¨ªa, B¨¦lgica y Luxemburgo) optaron por dise?ar un motor totalmente nuevo en vez de adquirir uno ya existente en el mercado. El desarrollo del turbopropulsor TP400 ¡ªfabricado por un consorcio que integran la alemana MTU, la francesa Snecma, la brit¨¢nica Rolls Royce y la espa?ola ITP¡ª est¨¢ detr¨¢s del retraso de m¨¢s de tres a?os que acumula el programa. El coste del A400M se ha disparado desde los 20.000 millones de euros iniciales a casi 30.000. Para que sea rentable deber¨¢ engordar su carta de pedidos, que ahora suma 174 aparatos. Y ello requiere despejar cualquier duda sobre su seguridad.
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