300.000 dependientes moderados se incorporan desde hoy al sistema

Con tres a?os de retraso sobre lo previsto, unos 310.000 dependientes moderados deber¨ªan empezar este mes a recibir la prestaci¨®n a la que tienen derecho en virtud de la Ley de Dependencia de 2007. El Ejecutivo decidi¨® retrasar la inclusi¨®n de este colectivo al llegar al Gobierno en 2011. Actualmente hay 745.159 personas recibiendo una prestaci¨®n (plaza de residencia, ayuda a domicilio, teleasistencia...). Las nuevas incorporaciones supondr¨¢n un 40% m¨¢s. Los colectivos afectados dudan que las comunidades puedan hacer frente al gasto.?

Los recortes que impuso el Gobierno en el segundo Consejo de Ministros tras las elecciones de 2011 ¡ªque incluyeron una subida de impuestos y un tajo de 8.900 millones de euros al gasto p¨²blico¡ª tambi¨¦n alcanzaron a la Ley de Dependencia. El Ejecutivo declar¨® una moratoria de un a?o para la entrada en el sistema de los dependientes moderados (grado 1). Afect¨® a las personas con un grado m¨¢s leve de dependencia (ancianos con movilidad reducida, enfermos de alzh¨¦imer en los primeros estadios de la enfermedad, entre otros), que para entonces ya hab¨ªan sido examinadas y ten¨ªan derecho a ser asistidas con dinero p¨²blico.

En julio de 2012, el Gobierno anunci¨® un nuevo par¨®n, que ha acabado convirtiendo un a?o de espera para recibir las ayudas en tres. Con datos a 31 de mayo, el n¨²mero de dependientes que esperan recibir una prestaci¨®n son 132.191. Sumados a los 745.159 que ya la reciben, y a los aproximadamente 310.000 que ahora se incorporan, son unos 1,2 millones. El Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad no tiene datos sobre cu¨¢ntos dependientes han fallecido mientras estaban en lista de espera. Un informe reciente de la Asociaci¨®n de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales calcul¨® que m¨¢s de 100.000 personas han muerto desde 2012 sin recibir la prestaci¨®n.

La mujer de I. C., de 42 a?os, tiene reconocido el grado 1 de dependencia desde noviembre de 2011. ?l dej¨® de trabajar como aut¨®nomo para atenderla ¡°las 24 horas del d¨ªa¡±. Solicit¨® una prestaci¨®n como cuidador no profesional. Relata que llevan ¡°a?os de mucho sufrimiento, ingresos en el hospital, operaciones...¡±. Han sido desahuciados y recurren a C¨¢ritas y a vecinos de su pueblo, Escalona (Toledo), para comer. El ¨²nico ingreso que tienen es una pensi¨®n de discapacidad de unos 300 euros. Durante estos a?os, ella ha empeorado, pero el sistema no tiene constancia de ello, denuncia I. C., que lamenta la falta de informaci¨®n. Reconoce que no sabe c¨®mo pedir la prestaci¨®n a la que supuestamente tienen derecho desde este mi¨¦rcoles.

La incorporaci¨®n de este colectivo no cuenta con una partida espec¨ªfica en los Presupuestos Generales del Estado para 2015, lo que ha despertado suspicacias entre los profesionales del sector. Un portavoz del ministerio asegura que el dinero necesario se dotar¨¢ mediante una ampliaci¨®n de cr¨¦dito cuando se sepa exactamente cu¨¢ntas personas ser¨¢n atendidas. ¡°La mayor parte de los nuevos beneficiarios ya est¨¢n valorados¡±, a?ade, lo que deber¨ªa ahorrar tiempo en los tr¨¢mites. Las comunidades aut¨®nomas tienen seis meses para enviar la lista de los nuevos dependientes al Imserso, el organismo que gestiona el sistema de ayudas. Cuando se conozca el n¨²mero definitivo, Sanidad pedir¨¢ la ampliaci¨®n de cr¨¦dito al Ministerio de Hacienda, explica esta fuente.

Jos¨¦ Luis G¨®mez-Oca?a, coordinador nacional de las plataformas en Defensa de la Ley de Dependencia, cree que ¡°dif¨ªcilmente se va a introducir a este colectivo con el mismo presupuesto¡±. Duda que las previsiones se vayan a cumplir. ¡°No nos fiamos del Gobierno¡±, asegura. Tambi¨¦n predice ¡°mucha burocracia¡± y que ¡°las peticiones de los afectados se van a ir demorando en el tiempo¡±.

G¨®mez-Oca?a recuerda que la financiaci¨®n de la dependencia se reparte entre el Gobierno central, las comunidades aut¨®nomas y el copago de quienes reciben el servicio. ¡°El dependiente cada vez pone m¨¢s dinero¡±, se?ala, y recuerda que el Gobierno solo est¨¢ aportando el 17% del coste total, ¡°cuando le corresponder¨ªa entre el 45 y el 50%¡±. De ah¨ª que crea que la incorporaci¨®n de los dependientes moderados ¡°va a asfixiar a las comunidades, que van a dejar de atender o soportar a pulm¨®n con sus propios recursos¡±. ¡°Nos hubiera gustado que la partida de ampliaci¨®n de cr¨¦dito hubiera estado reflejada en los presupuestos generales. El Gobierno tendr¨ªa que haberlo previsto¡±, concluye.