El PP conf¨ªa en que Uni¨® frene el ascenso de Ciudadanos en Catalu?a
Los populares atacan al partido de Albert Rivera porque genera incertidumbre pero le lanzan otra oferta de alianza poselectoral tras el 27-S
El PP se enfrenta el 27-S en Catalu?a con el reto de contrarrestar la lista unitaria independentista y frenar el auge de Ciudadanos, como seria advertencia del acceso de otra formaci¨®n de centroderecha al Congreso en las pr¨®ximas generales. Para esa disputa del voto centrado y moderado, los populares conf¨ªan en la irrupci¨®n de Uni¨®, escindido de CiU. El PP ataca a Ciudadanos argumentando que genera incertidumbre y que ha abandonado la primera l¨ªnea de la disputa al soberanismo; sin embargo, afirma que quiere pactar con ese partido tras los comicios.
La elecci¨®n in extremis de Xavier Garc¨ªa Albiol como candidato del PP a las elecciones auton¨®micas previstas para el 27 de septiembre tiene una finalidad clara. El exalcalde de Badalona, que aument¨® en 4.000 los votos en las ¨²ltimas elecciones locales pero perdi¨® el Gobierno municipal por una alianza de izquierdas, representa, en un momento de gran confusi¨®n, la apelaci¨®n a la esencia del PP como ¡°el ¨²nico partido que defiende clara e inequ¨ªvocamente la unidad de Espa?a en todo el territorio, en Barcelona, Andaluc¨ªa y en Extremadura¡±, seg¨²n concluye uno de los tres dirigentes que han estado en el secreto de la marcha pactada hace dos meses de Alicia S¨¢nchez-Camacho de su cargo.
Los populares quieren as¨ª movilizar al m¨¢ximo posible al votante cl¨¢sico del PP en Catalu?a. Y ¡°en ese electorado Xavier Garc¨ªa Albiol s¨ª tiene mucho predicamento¡±, apuntan fuentes del partido. Los populares no discuten demasiado si el exalcalde de Badalona supone para el resto de Espa?a un giro o retorno a la l¨ªnea dura o m¨¢s de derechas. Valoran que puede ¡°fidelizar¡± mucho a sus bases. La direcci¨®n del PP catal¨¢n nunca ha estado, adem¨¢s, entre las m¨¢s progresistas del partido, aunque esa tendencia se intent¨® truncar con el perfil de S¨¢nchez-Camacho, a quien ahora se tratar¨¢ de aprovechar en otros cometidos estatales.
Las encuestas internas encargadas en las ¨²ltimas semanas por el PP catal¨¢n han refrendado, por un lado, que la mayor¨ªa de los votantes en Catalu?a se siguen decantando por opciones de centroizquierda; y, por otra parte, que Ciudadanos empieza a representar a los electores de centroderecha. El sondeo que convenci¨® finalmente a S¨¢nchez-Camacho de que hab¨ªa acabado su etapa al frente de los populares catalanes conced¨ªa el 27-S a Ciudadanos entre 16 y 18 esca?os, y al PP entre 10 y 12. Camacho logr¨® en 2010 la cota de 18 actas, y 19 en 2012, el r¨¦cord hist¨®rico del partido. Bajar ahora a 12 diputados ser¨ªa volver a la ¨¦poca de Josep Piqu¨¦ al mando del PP.
El ascenso y sorpasso de Ciudadanos en Catalu?a no solo preocupa al PP catal¨¢n, que podr¨ªa quedar reducido a una de las ¨²ltimas fuerzas con representaci¨®n en el nuevo Parlamento. Ser¨ªa una se?al tambi¨¦n muy inquietante para el propio Mariano Rajoy, de cara a las elecciones generales.
Los populares, por tanto, se debaten entre el inter¨¦s de que todas las fuerzas pol¨ªticas no independentistas que se presenten el 27-S tengan la mayor representatividad posible y la disputa particular que sostienen con el partido de Albert Rivera para evitar que este les arrebate el liderazgo del centroderecha o de las formaciones constitucionalistas. El PP conf¨ªa en que Uni¨® le haga ese trabajo y rebaje algo las expectativas de Ciudadanos, captando parte de sus votos.
Encuestas y esca?os
¡°Uni¨®, seg¨²n nuestras encuestas, podr¨ªa tener entre seis y siete esca?os, que lograr¨ªa de disputar el voto de castigo a los partidos nacionales que ahora capitalizaba solo Ciudadanos¡±, dicen en la direcci¨®n del PP catal¨¢n. ¡°Con la llegada al mapa electoral de Uni¨®, Ciudadanos ya no se llevar¨¢ todo el voto de castigo de los que no son independentistas¡±, concluyen esas fuentes.
El PP catal¨¢n, en este escenario, es consciente de que le toca jugar el papel de partido a castigar, sobre todo por la labor desarrollada estos a?os por el Gobierno central de Mariano Rajoy. El reto es lograr un resultado digno, presentable, no humillante con respecto a Ciudadanos. Para poder establecer adem¨¢s, en el futuro, una relaci¨®n de intereses mutuos con ese partido.
Los dirigentes del PP se reparten as¨ª los papeles. El portavoz oficial de la direcci¨®n nacional, Pablo Casado, renunci¨® ayer a atacar a la formaci¨®n que dirige Albert Rivera, y le ofreci¨® una ¡°alianza¡± o pacto poselectoral con los dem¨¢s partidos constitucionalistas, entre los que incluy¨® al PSC y a Uni¨®: ¡°Nos une con Ciudadanos que sabemos que queremos un pa¨ªs unido y en el marco de la Constituci¨®n¡±, dijo. Mientras, Garc¨ªa Albiol, que ayer se prodig¨® por diversas radios y televisiones, resumi¨® as¨ª su mensaje: cree haber demostrado en Badalona que es el ¨²nico capaz de ganar a los independentistas y lamenta que Albert Rivera haya desertado de esa lucha en Catalu?a para competir con Rajoy en toda Espa?a.?
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