Andaluc¨ªa se moviliza para mantener intacto el legado de la ¡®Duquesa Roja¡¯
La demanda de herencia de los hijos la noble alerta a colectivos y administraciones
Sanl¨²car de Barrameda (67.385 habitantes, C¨¢diz) ser¨¢ escenario en unos d¨ªas del ¨²ltimo cap¨ªtulo de las dif¨ªciles relaciones entre la fallecida Luisa Isabel ?lvarez de Toledo, 21? Duquesa de Medina Sidonia, m¨¢s conocida como la Duquesa Roja, y sus hijos. El 30 de septiembre arranca el juicio por la demanda presentada por los tres descendientes para que los bienes integrados en la fundaci¨®n que preserva y difunde este patrimonio, presidida por la viuda de la arist¨®crata y gestora de uno de los archivos hist¨®ricos privados m¨¢s importantes de Europa, pase a formar parte de su herencia.
La inminente batalla judicial planteada por Leoncio Gonz¨¢lez de Gregorio ?lvarez de Toledo (primog¨¦nito y 22? Duque de Medina Sidonia) y sus hermanos Pilar y Gabriel contra la Fundaci¨®n Casa Medina Sidonia, Liliana Dahlmann (la viuda) y el Ayuntamiento de Sanl¨²car ha puesto en alerta a colectivos culturales y sociales de este municipio por el incierto futuro del que es posiblemente su bien m¨¢s preciado. Unas 40 asociaciones integran una plataforma ciudadana que defiende la unidad de este legado, para que no se fragmente ni pueda disgregarse. La Junta de Andaluc¨ªa est¨¢ personada en el proceso ¡°en defensa del inter¨¦s p¨²blico¡±.
El Archivo General de la Fundaci¨®n Casa Medina Sidonia se extiende por 700 metros de estanter¨ªas en la tercera planta del Palacio de los Guzmanes. Supera los seis millones de documentos (el m¨¢s antiguo es del siglo XII), reunidos en 6.317 legajos, e instruye sobre siglos de historia de las casas se?oriales vinculadas a este linaje aristocr¨¢tico, el m¨¢s antiguo de Espa?a. La Duquesa Roja, fallecida en marzo de 2008 tras una vida intensa en la que plant¨® cara a las convenciones sociales y al franquismo, traslad¨® el archivo en 1962 desde un guardamuebles de Madrid a Sanl¨²car y catalog¨® papel a papel.
Este centro de investigaci¨®n y estudio es la joya de la fundaci¨®n, creada por ?lvarez de Toledo en 1990 y propietaria tambi¨¦n del noble edificio (es monumento hist¨®rico-art¨ªstico desde 1978) y del mobiliario, las obras de arte y los libros que contiene. El valor de todo es ¡°incalculable¡±, seg¨²n fuentes de este organismo.
Liliana Dahlmann, viuda de la Duquesa Roja tras haber sido su secretaria, es la presidenta vitalicia de la fundaci¨®n desde la muerte de la arist¨®crata. La pareja se cas¨® un d¨ªa antes del fallecimiento de la noble, una boda in articulo mortis que asegur¨® la posici¨®n de Dahlmann. Las dos pusieron en marcha el mecanismo que creyeron m¨¢s adecuado para preservar y difundir los tesoros documentales de la instituci¨®n ducal, pero tambi¨¦n provocaron una disputa legal con los hijos de la noble que ahora llena de ¡°incertidumbre¡± a la sociedad sanluque?a.
Los tres hermanos reclaman que se declare ¡°la inoficiosidad¡± de la fundaci¨®n y que puedan ser herederos de la parte leg¨ªtima que les corresponde de esos bienes. El primog¨¦nito, adem¨¢s, si viera atendidas sus peticiones, ser¨ªa beneficiado con el tercio de mejora. Fuentes del proceso explican que los demandantes, que iniciaron el pleito por separado, aunque el mismo d¨ªa de marzo de 2012, han tasado los bienes en unos 60 millones de euros.
¡°Nos preocupa que haya una sentencia que divida el patrimonio en trozos (¡) Hay que preservarlo. Primero, porque as¨ª lo quer¨ªa la duquesa, y segundo, porque ser¨ªa una p¨¦rdida irreparable para Sanl¨²car y Andaluc¨ªa¡±, argumenta Antonio Reyes, uno de los portavoces de la plataforma ciudadana. Huye de posibles rencillas familiares: ¡°No se trata de una iniciativa que vaya contra nadie, sino que surge para preservar los bienes. Nos da igual qui¨¦nes sean los due?os¡±. El objetivo es que estos permanezcan unidos y en Sanl¨²car.
Leoncio Gonz¨¢lez de Gregorio ?lvarez de Toledo defend¨ªa, en una carta publicada por EL PA?S en mayo de 2010, la reclamaci¨®n que materializ¨® casi dos a?os despu¨¦s en los tribunales y tachaba de ¡°error¡± confundir las medidas de protecci¨®n que afectan a la herencia Medina Sidonia con el r¨¦gimen de propiedad de la misma. ¡°Evidentemente, mi inter¨¦s como titular del ducado de Medina Sidonia, y profesional de la Historia, es el mantenimiento y difusi¨®n del patrimonio Medina Sidonia, as¨ª como la digna vinculaci¨®n de los titulares de la casa con la que es su natural memoria material y documental¡±, afirmaba el duque.
El movimiento ciudadano pone el acento en que la fundaci¨®n ¡°est¨¢ tutelada por las administraciones p¨²blicas¡± porque en su patronato est¨¢n representados el Ayuntamiento, la Diputaci¨®n de C¨¢diz, la Junta de Andaluc¨ªa y el Ministerio de Cultura. Las administraciones de la provincia ya han expresado su apoyo a este colectivo, igual que el Ejecutivo regional. Los pr¨®ximos contactos ser¨¢n con el Gobierno central y los presidentes de las Cortes.
La Junta recuerda que todo el legado de Medina Sidonia es un Bien de Inter¨¦s Cultural, inscrito en el Cat¨¢logo General de Patrimonio Hist¨®rico de Andaluc¨ªa, y que por tanto es ¡°irrenunciable¡±. Seg¨²n la ley, estos bienes son ¡°insegregables e indeslocalizables¡±, explican fuentes de la Consejer¨ªa de Cultura.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucci¨®n 1 de Sanl¨²car ha fijado tres semanas de sesiones para dirimir un asunto que re¨²ne a ocho partes, alineadas en dos bandos. Los que quieren que todo siga igual y los que pretenden una parte de los bienes. Seg¨²n los estatutos de la fundaci¨®n, en caso de que esta quedara extinguida, sus bienes ser¨ªan entregados al ¨¢rea de Cultura del Ayuntamiento de Sanl¨²car. Y esto ¡°por expreso deseo¡± de su fundadora, la Duquesa Roja.
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