El Gobierno navarro planea abrir sus centros p¨²blicos al aborto
En la Comunidad Foral no se interrumpe el embarazo en la red p¨²blica y las afectadas tienen que desplazarse a otras regiones o a centros privados
El Gobierno navarro quiere que las mujeres puedan abortar en centros p¨²blicos, como permite la ley y ocurre en el resto de comunidades. Navarra es la ¨²nica en la que no se interrumpe el embarazo en la red p¨²blica y las afectadas tienen que desplazarse a otras regiones o centro privados. ¡°Es una cuesti¨®n de voluntad pol¨ªtica, que el anterior Gobierno no ten¨ªa. Hemos hablado con los ginec¨®logos y creemos que esto se normalizar¨¢ poco a poco¡±, afirm¨® el jueves el consejero de Salud, Fernando Dom¨ªnguez. Adem¨¢s, se dar¨¢ atenci¨®n reproductiva a mujeres solas o en parejas de mismo sexo y apoyo m¨¦dico a transexuales.
La comunidad navarra llevaba 24 a?os sin practicar abortos hasta que en 2011 una cl¨ªnica privada abri¨® en Anso¨¢in, un municipio cercano a Pamplona donde el Gobierno foral comenz¨® a derivar algunos casos. Pero la sanidad p¨²blica sigue sin estrenarse, debido, dicen, a la objeci¨®n de conciencia de los facultativos. Tampoco es com¨²n en otras regiones, donde el grueso de los abortos que se pagan con dinero p¨²blico se hacen en cl¨ªnicas privadas.
El Gobierno foral presidido por Uxue Barkos (Nafarroa Bai) ultima ahora un decreto de atenci¨®n sexual y reproductiva que incluye la pr¨¢ctica de abortos farmacol¨®gicos y quir¨²rgicos en las cl¨ªnicas p¨²blicas. Pero eso ya lo permite la ley. Lo que quiere el Gobierno navarro ahora es cambiar la voluntad e ir normalizando estas intervenciones en la red p¨²blica. ¡°Hemos hablado con ginec¨®logos y anestesistas y nuestra percepci¨®n es que esto est¨¢ cambiando, que la objeci¨®n va a ir remitiendo¡±, explic¨® el jueves a EL PA?S el consejero. Fernando Dom¨ªnguez calcula que las resistencias ser¨¢n m¨¢s fuertes cuando se trate de embarazos decididos por la mujer antes de la semana 14, como permite la ley. Sin embargo, cree que aquellos que haya que interrumpir por problemas m¨¦dicos asociados no encontrar¨¢n problemas entre los profesionales de la sanidad p¨²blica.
¡°Si en alg¨²n centro no hay nadie que quiera practicar abortos podremos impulsar algunos ajustes de personal desde otros sitios donde s¨ª haya m¨¢s de un ginec¨®logo que no se oponga¡±, dijo Dom¨ªnguez. ¡°Ser¨¢ el jefe de ginecolog¨ªa del hospital el que decidir¨¢ estos cambios y el que conocer¨¢ con confidencialidad qui¨¦nes est¨¢n dispuestos a practicar esta intervenci¨®n y qui¨¦nes no¡±. ¡°Garantizamos la confidencialidad del m¨¦dico y de la mujer¡±, a?adi¨® el consejero. El futuro decreto foral, sometido ahora a exposici¨®n p¨²blica y participaci¨®n para recibir sugerencias, plantea ¡°una nueva pol¨ªtica de salud sexual y reproductiva para atender una nueva realidad social¡±, se?al¨® el consejero. Y defendi¨® la ¡°dignidad¡± y el ¡°desarrollo de la persona¡± superando los ¡°tab¨²es¡± que han supuesto una ¡°restricci¨®n¡± en las prestaciones sanitarias.
Objetores de conciencia
Por ello, el decreto establece una atenci¨®n ¡°integral y multidisciplinar¡± para hombres y mujeres, y prev¨¦ que con su entrada en vigor sean dos centros de atenci¨®n a la mujer de Pamplona los que inicialmente atiendan las interrupciones farmacol¨®gicas de embarazo para extenderlas en un a?o a toda la red navarra. Dom¨ªnguez record¨® que sigue abierto el registro de objetores de conciencia, donde de momento solo figuran tres personas apuntadas, aunque este derecho, avis¨® el responsable de Salud, ¡°no puede limitar el de las mujeres¡± a interrumpir su embarazo en la red p¨²blica.
Adem¨¢s del aborto, Dom¨ªnguez destac¨® ayer que el nuevo modelo garantiza tratamientos de reproducci¨®n asistida a parejas de mujeres homosexuales y t¨¦cnicas de inseminaci¨®n artificial a mujeres sin pareja. Ofrece igualmente una atenci¨®n integral a la transexualidad, incluidas terapias hormonales, cirug¨ªas pl¨¢sticas o de reasignaci¨®n sexual.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.