Rajoy solo quiere debatir con Pedro S¨¢nchez para obviar a Rivera
El candidato del PP esgrime que el duelo presidencial entre los l¨ªderes de los dos grandes partidos "es lo que se ha hecho siempre"
El PP ha construido todo un discurso para justificar la ausencia de Mariano Rajoy de todos los debates que no sean el cara a cara del 14 de diciembre con Pedro S¨¢nchez, del que presume haber auspiciado su rol de l¨ªder de la oposici¨®n. Su comit¨¦ de campa?a sostiene que Rajoy es el ¨²nico que gestiona su doble condici¨®n y agenda de candidato y presidente y que debe medirse solo con el principal aspirante a relevarle. El PP aprovecha as¨ª para obviar el auge de Ciudadanos.
En el PP ya no citan nunca a Podemos ni a su l¨ªder, Pablo Iglesias, ni el peligro de los pactos del PSOE con los ¡°radicales, extremistas y antisistema¡±, que fue uno de sus guiones preferidos de las campa?as municipales y auton¨®micas de mayo y la catalana de septiembre. Los dirigentes populares y su candidato se ci?en ahora, sobre todo, en alertar contra el riesgo de ¡°dar marcha atr¨¢s hacia las recetas fracasadas del PSOE en el pasado¡± y en evitar los ¡°experimentos de plat¨®¡± que identifican, sin citarle, con Albert Rivera, el l¨ªder de Ciudadanos.
En el dise?o de la campa?a del PP, de su programa, de las provincias por las que debe pasar su caravana, de sus mensajes a recalcar y de las participaciones de Rajoy en todo tipo de formatos televisivos se tiene en mente todo el rato a S¨¢nchez como el gran adversario presidencial a batir y luego el pujante perfil de un pol¨ªtico joven, de 36 a?os, que ha trastocado todas sus previsiones y planes.
El jefe de campa?a del PP, Jorge Moragas, dedic¨® este lunes casi dos horas a detallar sus estrategias, los mensajes audiovisuales y esl¨®ganes encaminados a las nuevas redes sociales que el partido ha preparado para su l¨ªder. El plan corresponde a tres conceptos de agencia de publicidad: ¡°Empat¨ªa, proximidad y conexi¨®n¡±. Moragas sostiene que todo se debe a que el PP y Rajoy quieren ¡°explicarse, escuchar y dialogar¡±. Otra cosa es debatir, en cualquier formato, en todos los medios informativos y con cualquiera.
Rajoy solo quiere debatir con S¨¢nchez. ¡°Es el debate que siempre se ha hecho con el l¨ªder de la oposici¨®n¡±, razon¨® Moragas e insisti¨® en esa idea el propio Rajoy en su entrevista con Pedro Piqueras a la misma hora en Tele 5. Debates presidenciales ha habido cinco desde que se estrenaron en 1993. No le sorprendi¨® al jefe de campa?a del PP que las preguntas girasen, sobre todo, sobre la silla vac¨ªa dejada por Rajoy en varios foros. El PP sab¨ªa lo que se jugaba y a lo que se expon¨ªa cuando decidi¨® que solo se enfrentar¨ªa al l¨ªder del principal partido de la oposici¨®n, que es el debate que se considera ¡°fundamental como alternativa real de Gobierno y no con otras fuerzas a¨²n extraparlamentarias¡±.
El chicle ilimitado
Fue Moragas el que utiliz¨® este lunes la expresi¨®n de que ¡°el tiempo del presidente no es chicle ilimitado¡±. Rajoy remach¨®: "Yo llego donde llego, soy presidente y no estoy solo haciendo campa?a pero comprendo que otras personas (en alusi¨®n a los dem¨¢s candidatos) tengan todo el tiempo para debates".
El l¨ªder popular sostiene cuando le preguntan que le encanta debatir y que le gustar¨ªa poder explicarle lo que ha hecho estos cuatro a?os en La Moncloa en persona a cada uno de los 46 millones de espa?oles. Pero Moragas defiende que ¡°f¨ªsica y metaf¨ªsicamente es imposible¡± porque Rajoy cuenta con la doble condici¨®n de ser candidato y presidente, algo que ejercer¨¢ hasta el final de la campa?a, que coincide con una cumbre en Bruselas.
Los responsables de la campa?a de Rajoy improvisaron este lunes nuevos argumentos para intentar explicar la raz¨®n por qu¨¦ su cabeza de cartel hab¨ªa eludido estar en el primer debate digital organizado por EL PA?S anoche y hab¨ªa optado por ser entrevistado a la misma hora en Telecinco por Pedro Piqueras. Moragas neg¨® que hubiese detr¨¢s de esa decisi¨®n un deseo de contraprogramar a ning¨²n medio informativo. El jefe de campa?a del PP afirm¨® que la oferta para la entrevista a Telecinco lleg¨® marcada para ese d¨ªa antes que la de EL PA?S y que no le parec¨ªa apropiado cancelarla. Luego a?adi¨® que un presidente solo debe debatir en las democracias asentadas con el l¨ªder de la oposici¨®n, como si existiese esa regla.
Los populares son plenamente conscientes de que estas elecciones del 20-D son especiales, porque existen de entrada cuatro partidos con opciones de ganar, porque ser¨¢n m¨¢s medi¨¢ticas e interactivas que nunca, con muchos canales enfocados hacia la informaci¨®n pol¨ªtica, y l¨ªderes m¨¢s televisivos y el apogeo de las redes sociales. Rajoy ah¨ª tiene m¨¢s carencias que sus rivales. El aspirante del PP cuenta para empezar con 60 a?os, frente a los 36 de Rivera, los 37 de Iglesias y los 43 de S¨¢nchez. Rajoy ha mantenido ya debates cara a cara y presidenciales contra los socialistas Alfredo P¨¦rez Rubalcaba y Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y muchos en el Parlamento, todos con las reglas muy marcadas y con l¨ªmites. Pero no est¨¢ acostumbrado ni le gustan los duelos m¨¢s libres.
El PP ha previsto que Rajoy vaya a todas las televisiones y est¨¦ en todos los medios informativos, pero en programas y entrevistas donde se sienta m¨¢s c¨®modo, aunque el s¨¢bado pr¨®ximo se estrenar¨¢ en La Sexta Noche en un encuentro directo con ciudadanos.
Miedo a Soraya
Mariano Rajoy solo har¨¢ un cara a cara con ¡°el adversario de referencia¡±, que ser¨¢ el l¨ªder del PSOE, el 14 de diciembre, en la Academia de Televisi¨®n. Pero habr¨¢ m¨¢s y el PP estar¨¢ representado porque presume de equipo. En ese reparto destaca la vicepresidenta Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, en la que se ha delegado el debate a cuatro en Antena 3 y que fue la dirigente que el PP ofreci¨® para sustituirle en EL PA?S, que no acept¨®. Jorge Moragas dio alas a las especulaciones al subrayar que esa cita ser¨¢ de ¡°gran inter¨¦s para saber qui¨¦n es el nuevo l¨ªder de la oposici¨®n¡± y al intuir que sus adversarios le tienen ¡°temor e inquietud¡± no sabe si ¡°porque es mujer, preparada y joven¡±.
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