El principal error
El error de S¨¢nchez es creer que un Gobierno con Podemos es una alternativa de izquierdas
Como es notorio, Pedro S¨¢nchez ha cometido recientemente varios errores. El primero, quiz¨¢s, fue no haber sabido interpretar el resultado electoral: 90 esca?os es el peor resultado del PSOE en democracia.
No lo acuso de ser el culpable, pero su reacci¨®n hubiera debido ser m¨¢s humilde. Por el contrario, al a?adir a sus esca?os los de Podemos e IU, m¨¢s Ciudadanos y otros varios, quiso dar la impresi¨®n de que hab¨ªa ganado la izquierda, los progresistas encabezados por el PSOE, ya que la suma resultante era superior a los votos del PP. En lugar de a la pol¨ªtica, se dedic¨® a la aritm¨¦tica, pero con sumandos incoherentes entre s¨ª, quiz¨¢s una forma de disimular la derrota.
El ¨²ltimo error fue no reaccionar a tiempo ante el desplante de Pablo Iglesias el viernes pasado, cuando ¨¦ste se autonombr¨® vicepresidente, design¨® a varios ministros y sostuvo que gracias a su generosidad la fortuna sonre¨ªa al futuro presidente S¨¢nchez. Tuvo que salir Rubalcaba, un veterano que sabe de pol¨ªtica, a decir que las declaraciones de Iglesias eran un insulto grave al PSOE.
Pero estos son errores de imagen, en cierta manera coyunturales. El principal error de S¨¢nchez tras las elecciones es m¨¢s de fondo en algo que es fundamental: creer que un acuerdo de Gobierno con Podemos es una alternativa de izquierdas, avalando as¨ª la extendida idea de que Iglesias lidera un partido progresista, en lugar de argumentar dial¨¦cticamente que se trata de un partido populista y que el populismo, y m¨¢s a¨²n en la Europa de hoy, nunca ha sido una ideolog¨ªa ni progresista ni de izquierdas sino pura demagogia, sin ninguna base te¨®rica consistente, conducente a desastres pol¨ªticos y econ¨®micos y que siempre ha perjudicado sobre todo, a los m¨¢s d¨¦biles.
Pensar que el PSOE puede entenderse con Podemos es una falsa ilusi¨®n. Podemos es t¨®xico para el PSOE, lo destrozar¨¢ si gobiernan juntos porque es el perfecto socio desleal.
El problema es que muchos electores lo perciben como la ¡°verdadera izquierda¡±. A debelar esa falacia deber¨ªa dedicarse Pedro S¨¢nchez en lugar de querer buscar su complicidad para librarse de la acusaci¨®n de no ser suficientemente de izquierdas. Hasta que no supere este complejo, el PSOE tendr¨¢ en S¨¢nchez quiz¨¢s un candidato, pero no un l¨ªder.
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