S¨¢nchez busca que Podemos al menos garantice su abstenci¨®n

Pedro S¨¢nchez comenz¨® a negociar su proyecto ¡°reformista y progresista¡± con otras fuerzas pol¨ªticas bajo el mantra ¡°primero el para qu¨¦ y luego el qui¨¦n¡±. Despu¨¦s de que Ciudadanos y Podemos le hayan repetido hasta la saciedad que un acuerdo a tres bandas es impensable, la pregunta m¨¢s urgente a medida que corre el plazo para cerrar alg¨²n pacto es ¡°?Qui¨¦n se echa a un lado?¡±

?PSOE y Ciudadanos, pero especialmente el primero porque es el que debe amarrar la investidura de su candidato, comparten la misma estrategia: elaborar un acuerdo lo suficientemente atractivo como para que resulte poco justificable rechazarlo. La formaci¨®n de Rivera, si logra llevar el agua de la negociaci¨®n a su molino, a¨²n conf¨ªa en que el PP se planteara su abstenci¨®n.

S¨¢nchez, satisfecho ya de que su equipo negociador est¨¦ trabajando simult¨¢neamente con un abanico ideol¨®gico tan amplio como Ciudadanos, Unidad Popular (IU), Comprom¨ªs y el PNV, acepta encantado que Podemos se decida a entrar finalmente en la ronda la pr¨®xima semana, y apuesta por que, en ¨²ltimo t¨¦rmino, al partido de Iglesias le tiemble el pulso y facilite al menos con su abstenci¨®n un Gobierno socialista antes que votar en contra junto al PP.

De momento, esta estrategia radial permite que las l¨ªneas avancen, pero el problema est¨¢ en que, a la vez que lo hacen, se alejan m¨¢s entre s¨ª y la posibilidad de cruzarse desaparece.

El equipo negociador de Ciudadanos admite que en la primera semana se han acercado posiciones en algunos puntos, los menos conflictivos, pero tambi¨¦n advierte de que si por fin Podemos se aviene a empezar a hablar con el PSOE, se complicar¨¢ mucho la posibilidad de culminar con un proyecto com¨²n, porque el sentido y contenido de ambas negociaciones ser¨¢ muy contradictorio.

Del mismo modo, algunos socialistas sospechan que la anunciada contraoferta de Podemos, que esperan conocer ma?ana, contribuir¨¢ a tensar la situaci¨®n entre la izquierda, con planteamientos m¨¢s atrevidos que puedan incomodar a IU y a Comprom¨ªs.

Comienza de este modo la segunda semana de negociaci¨®n con tres certezas, de momento, para S¨¢nchez: el PP no se abstendr¨¢, Ciudadanos no se abstendr¨¢ y Podemos no se abstendr¨¢.

Con el rechazo de los populares ya cuenta. Con el partido de Rivera conf¨ªa en llegar a algo. De Iglesias espera que la fuerza de los hechos le obligue a ver finalmente algo que, en el entorno de S¨¢nchez, creen que cada vez es m¨¢s evidente: la ciudadan¨ªa desea que haya Gobierno, dicen, y el PSOE ha demostrado que quiere arreglar las cosas.