Ocho de cada diez ni?os pobres ser¨¢n adultos pobres
El ¨²ltimo informe de una fundaci¨®n para C¨¢ritas denuncia la transmisi¨®n intergeneracional de la exclusi¨®n social
Se dec¨ªa anta?o que los hijos ven¨ªan con un pan bajo del brazo. Ahora son un factor de riesgo de exclusi¨®n y de pobreza, seg¨²n el ¨²ltimo informe de la Fundaci¨®n de Estudios Sociales y de Sociolog¨ªa Aplicada (FOESSA), vinculada a C¨¢ritas. Se titula La transmisi¨®n intergeneracional de la pobreza: factores, procesos y propuestas para la intervenci¨®n y fue presentado este jueves por el secretario general de C¨¢ritas Espa?ola, Sebasti¨¢n Mora, arropado por uno de sus autores, el soci¨®logo Ra¨²l Flores Martos. Con datos demoledores, Mora intent¨®, sin embargo, elaborar un mensaje de optimismo siempre que se aborden otro tipo de pol¨ªticas sociales y para la familia. "Me dec¨ªa un joven comentando su penosa situaci¨®n: 'Cuando usted ten¨ªa mi edad, el futuro era una promesa; para nosotros, el futuro es una amenaza".
La pobreza presente genera pobreza futura, sentencia el informe de FOESSA. "Ocho de cada 10 personas que vivieron graves dificultades econ¨®micas en su infancia y adolescencia las est¨¢n reviviendo como adultos", expone el estudio. Concretamente, el 81% de las personas que tuvieron dificultades las volv¨ªan a tener en ese momento, frente al 45% que no las tuvieron. Existe una fuerte asociaci¨®n entre las condiciones de vida de padres e hijos. En los centros de servicios sociales se est¨¢n atendiendo a los nietos de aquellos que acompa?aron hace 30 a?os.
Aunque se puede considerar como un axioma de nuestro modelo social el concepto de la igualdad de oportunidades para todos, los estudios analizados indican una fuerte asociaci¨®n entre las condiciones de vida de padres e hijos. "La igualdad de oportunidades es m¨¢s una aspiraci¨®n que una realidad", sostiene Flores Martos, que ha coordinado esta investigaci¨®n, en la que tambi¨¦n han trabajado M¨®nica G¨®mez Mor¨¢n y V¨ªctor Renes Ayala.
La fundaci¨®n identifica varios factores estructurales que producen la "transmisi¨®n de la pobreza". Son fundamentalmente el nivel de estudios, la situaci¨®n laboral y la renta. "A pesar de que en Espa?a se ha producido una movilidad educativa ascendente generalizada como fruto de la universalizaci¨®n de la educaci¨®n, ocho de cada 10 personas cuyos padres no alcanzaron la educaci¨®n primaria o no han conseguido completar los estudios secundarios", indican los autores.
Respecto al mercado laboral, la ocupaci¨®n, o no, de los progenitores "es un factor que, adem¨¢s de estar relacionado con el nivel educativo que permita desempe?ar unas u otras tareas, condiciona la existencia o no de una fuente de ingresos y la cuant¨ªa de la misma", se?ala el informe.
Pobreza infantil
La investigaci¨®n presta especial atenci¨®n a la transmisi¨®n de la pobreza en el n¨²cleo familiar. "Cuando hablamos de pobreza infantil, nos referimos a la pobreza de las familias con hijos. El mayor riesgo de pobreza y de exclusi¨®n social se da entre las familias con hijos a cargo. El riesgo de las familias con menores es notablemente mayor. La tasa de pobreza en los hogares sin menores es del 16%, mientras que asciende al 28% en los hogares en los que hay menores; al 42% en el caso de familias monoparentales con hijos; y al 44% cuando las familias tienen tres o m¨¢s menores", indica.
Este fen¨®meno social es hoy una de las cosas que m¨¢s distingue la realidad social espa?ola respecto al resto de los pa¨ªses europeos desarrollados. "La brecha en la tasa de pobreza entre los hogares sin menores y con menores es en Espa?a tres veces superior a la de la Uni¨®n Europea. Aunque la pobreza y la exclusi¨®n de las familias con menores son previas a la crisis econ¨®mica, estas se han hecho m¨¢s extensas y m¨¢s intensas en los ¨²ltimos a?os", asegura Flores.
El ¨²ltimo informe de la fundaci¨®n de C¨¢ritas analiza el modelo de protecci¨®n social para encontrar las causas de la persistencia de esta transmisi¨®n intergeneracional de la pobreza. Una de ellas obedece a que el modelo espa?ol est¨¢ centrado en el amparo del sector productivo de la poblaci¨®n a trav¨¦s de la protecci¨®n del desempleo y de las pensiones de jubilaci¨®n. "Antes, los grupos con mayor riesgo de pobreza eran los mayores; ahora lo son las familias con menores. Ello responde al hecho de que la inversi¨®n en tercera edad no est¨¢ cuestionada mientras que la inversi¨®n en infancia se observa como una responsabilidad de los progenitores", afirma Flores Martos.
Inversi¨®n escasa
Comparado con la media de la Uni¨®n Europea, Espa?a invierte muy poco en familia e infancia. "La parte del PIB que se destina a la infancia y la familia en Espa?a es el 1,3%, frente al 2,2% de media de la UE-27. El gasto en infancia y familia representa el 5,3% del total de gasto en protecci¨®n social, mientras que en la UE el gasto en infancia y familia supone el 7,5%", sostiene la fundaci¨®n. El informe constata tambi¨¦n c¨®mo el sistema espa?ol de impuestos y prestaciones ha sido y es uno de los menos efectivos en la redistribuci¨®n de las rentas familiares de toda la UE; entre otros motivos, por la pr¨¢ctica inexistencia de prestaciones de car¨¢cter familiar.
Citando una met¨¢fora del fil¨®sofo y soci¨®logo polaco Zygmunt Bauman ?¡ªla capacidad de un puente para soportar el peso se mide por la fuerza de su pilar m¨¢s d¨¦bil¡ª, Ra¨²l Flores proclam¨® que la bondad y la misericordia de una sociedad deber¨ªan medirse por la calidad de vida de sus miembros m¨¢s d¨¦biles. "Si utilizamos este criterio, podemos concluir que la calidad humana de nuestra sociedad es claramente deficitaria. Espa?a no est¨¢ garantizando una vida digna a algunos de sus miembros m¨¢s d¨¦biles".
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