Arrepentidos y desencantados
En esta ocasi¨®n, de cara a las elecciones del pr¨®ximo 26-J, la situaci¨®n es novedosa con respecto a los electores
Es un hecho habitual que tras la celebraci¨®n de unas elecciones generales haya un porcentaje de ciudadanos que afirma que, de haber sabido cu¨¢l iba a ser el resultado final de los comicios, se hubiera comportado electoralmente de manera distinta de como lo hizo. Por ejemplo, despu¨¦s de las elecciones del pasado 20 de diciembre, a esta pregunta planteada por Metroscopia menos de un mes despu¨¦s de los comicios de 2015 la abrumadora mayor¨ªa (86%) contest¨® afirmativamente. Un 11%, por el contrario, hubiera cambiado su comportamiento electoral. Estos ¨²ltimos son los que podr¨ªamos denominar arrepentidos electorales.
El breve tiempo transcurrido entre el d¨ªa electoral y el d¨ªa en el que manifiestan su arrepentimiento en los sondeos indica que este no tiene que ver con la gesti¨®n pol¨ªtica desarrollada por los diferentes partidos. No ha habido tiempo para eso. Parece m¨¢s bien que se trata de personas que en las elecciones optan por votar estrat¨¦gicamente: en lugar de apoyar a su primera opci¨®n pol¨ªtica ¡ªaquella con la que ideol¨®gicamente m¨¢s se identifican¡ª lo hacen por otra a la que consideran mejor situada para conseguir su objetivo. Por ejemplo, para que no gane un partido, votan al que piensan que tiene m¨¢s opciones de arrebatarle el triunfo aunque no sea con el que m¨¢s simpatizan.
Habr¨ªa as¨ª que diferenciar entre estos votantes arrepentidos y los que podr¨ªan denominarse votantes decepcionados: aquellos que modifican su comportamiento electoral de una elecci¨®n a otra, esta vez s¨ª, porque se sienten desilusionados o desencantados con la gesti¨®n pol¨ªtica desarrollada por los partidos a lo largo de la legislatura. En esta ocasi¨®n, de cara a las elecciones del pr¨®ximo 26-J, la situaci¨®n es novedosa. La XI legislatura apenas ha durado 111 d¨ªas en los que no ha sido posible formar un Gobierno. ?Votar¨¢ usted lo mismo que vot¨® el pasado 20 de diciembre?, se les volvi¨® a preguntar a los espa?oles el pasado mes de mayo, cuando se supo que habr¨ªa que repetir las elecciones. El porcentaje que contest¨® afirmativamente se redujo 10 puntos (hasta un 76%) con respecto a cuatro meses antes y se duplic¨® (hasta un 22%) el de quienes manifestaron su intenci¨®n de cambiar su comportamiento electoral. El oscilante comportamiento electoral de los arrepentidos y desencantados de hoy parece tener, esta vez, un mismo motivo: no haber logrado el resultado que ellos deseaban. Tal vez ahora voten pensando en que finalmente este se produzca.
Jos¨¦ Pablo Ferr¨¢ndiz es soci¨®logo e investigador principal de Metroscopia.
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