Nazanin Armanian: ¡°Los refugiados vemos a personas que nos reciben bien y a otras que sienten miedo¡±

"Los refugiados vemos a personas que nos reciben bien y a otras que sienten miedo. No lo entendemos". La escritora y exiliada iran¨ª Nazanin Armanian ha resumido as¨ª la situaci¨®n de este colectivo en Espa?a, donde empez¨® a trabajar como mantera y hoy es profesora universitaria. En total, desde noviembre de 2015 han llegado 470, seg¨²n el Ministerio del Interior, que hab¨ªa asegurado que se alcanzar¨ªan los 586 a finales de junio, procedentes de campos de Italia, Grecia, Turqu¨ªa y L¨ªbano.?

M¨¢s informaci¨®n

Llega a Espa?a el primer grupo de 20 refugiados reubicados desde Grecia

M¨¢s de diez mil sirios han entrado a Espa?a por Melilla

La escritora tuvo que abandonar Ir¨¢n a los 23 a?os. Su delito: defender la igualdad de las mujeres y el derecho de los trabajadores. Es activista desde los 16, por lo que estuvo encarcelada en su pa¨ªs. "En uno de los permisos que ten¨ªa para salir de la prisi¨®n, decid¨ª escaparme y huir de Ir¨¢n". De all¨ª fue a Pakist¨¢n, desde donde consigui¨® volar a Madrid. A su llegada, en 1983, el Gobierno espa?ol le dio asilo pol¨ªtico, pero no un permiso de trabajo. Por ello, mientras estudiaba, trabaj¨® de forma irregular como mantera, vendiendo artesan¨ªa en la calle o dando clases de idioma. Finalmente, en 1999 consigui¨® cumplir uno de sus sue?os: dar clases de Ciencias Pol¨ªticas en la UNED.

La escritora, que este martes ha participado en los cursos de verano de la Universidad Men¨¦ndez Pelayo de Santander, percibe que los reci¨¦n llegados a Espa?a se sienten perdidos y sin pasado: "Los refugiados saben que aqu¨ª no van a tener el futuro que pensaban y su proyecto de vida se destruye". Esto provoca, seg¨²n Armanian, una incertidumbre de no saber qu¨¦ les deparar¨¢ el futuro. Adem¨¢s, en la mayor¨ªa de ocasiones, es el azar lo que les lleva a Espa?a, donde ven limitados sus recursos y ayudas en comparaci¨®n con pa¨ªses como Suecia, Holanda o Alemania.

Al llegar, el clima les resulta agradable y son optimistas. Aunque, seg¨²n le han confesado, esta sensaci¨®n les dura muy poco: "Llevan cinco a?os huyendo de un campo de refugiados a otro. A veces ya solo buscan un sitio d¨®nde morir". Una situaci¨®n de destierro obligado que no se produce por una dictadura: "?Son las guerras las que fabrican millones de desplazados!".

Armanian, hoy profesora de Relaciones Internacionales en la misma universidad, ha conocido la guerra y la vida de los refugiados; por eso, ahora los ayuda como traductora. "Espa?a es un pueblo muy solidario. El problema es que al refugiado se le identifica con delincuente, islamista o terrorista", ha explicado. La escritora destaca que ahora es mucho m¨¢s complicado llegar a Europa que en los ochenta, cuando ella lo hizo. Esto se debe a los conflictos en Oriente Medio y la dificultad de conseguir un visado. "Incluso, muchos pa¨ªses de la regi¨®n no dejan entrar a la gente que huye de la guerra. Est¨¢n desbordados".

Duelo migratorio

De entre los problemas a los que se enfrentan los refugiados destaca una crisis importante de identidad. No se toma la cultura del pueblo que acoge a los desplazados y, a veces, se pierde incluso la propia por el desarraigo y todo lo vivido. A esto se le conoce como duelo migratorio, que engloba las sensaciones y crisis psicol¨®gicas de vivir con una incertidumbre permanente. "Suele estar provocado por no saber si vas a tener trabajo o qu¨¦ ha pasado con la gente que has dejado atr¨¢s, adem¨¢s del desgarro por todo lo que han visto y saber que nunca podr¨¢n volver", ha explicado Armanian.