Una nueva estrategia para Am¨¦rica Latina

La anterior legislatura ha dejado una Espa?a ensimismada y con menos peso en las relaciones con Am¨¦rica Latina. Ese retroceso exige un examen cr¨ªtico as¨ª como un ejercicio de redefinici¨®n y reequilibrio para la que ahora se inicia, asumiendo de una vez por todas su car¨¢cter de pol¨ªtica de Estado.

En conjunto ha sido una pol¨ªtica d¨¦bil, reactiva y muy ideologizada a partir de la narrativa de ¡°las dos Am¨¦ricas Latinas¡± ¡ªla ¡°liberal¡± de la Alianza del Pac¨ªfico y la ¡°populista¡± del resto¡ª, pese a ser un relato simplista. Adem¨¢s, el Gobierno ha estado muy condicionado por el miedo a las cr¨ªticas provenientes de su derecha. El miedo a los paralelismos con ETA ha llevado al Gobierno a tener un bajo perfil en el proceso de paz en Colombia. Mientras, en relaci¨®n a Cuba, el caso Carromero y el deseo de no desmarcarse de la l¨ªnea dura practicada por Aznar ha debilitado a la diplomacia espa?ola en un momento clave de apertura de oportunidades econ¨®micas en la isla. Y por otro lado, el electoralismo con el que se ha abordado la crisis de Venezuela tambi¨¦n ha minado la credibilidad de Espa?a como posible intermediario entre Gobierno y oposici¨®n.

La subordinaci¨®n de la pol¨ªtica exterior a la estrategia de Marca Espa?a y a la acci¨®n de las empresas ha revelado una visi¨®n reduccionista y mercantilista de la pol¨ªtica latinoamericana. Pero ha sido en los recortes de la ayuda al desarrollo donde m¨¢s claramente se ha expresado el repliegue de la pol¨ªtica exterior espa?ola. Desde 2012 se ha llevado a cabo un brutal desmantelamiento de la pol¨ªtica de cooperaci¨®n, alegando imperativos de ajuste, pero que tambi¨¦n muestra que el Gobierno, por razones ideol¨®gicas, no ha asumido su car¨¢cter de pol¨ªtica p¨²blica y de compromiso internacional, adem¨¢s de privarse de un medio eficaz para la acci¨®n exterior y con el que respaldar la credibilidad internacional de Espa?a, en particular en Latinoam¨¦rica.

Ante una nueva legislatura, debiera asumirse que las relaciones de Espa?a con Am¨¦rica Latina son multidimensionales, recuperando la cooperaci¨®n sociocultural, educativa y cient¨ªficot¨¦cnica, o la agenda global de desarrollo. Ese reequilibrio tambi¨¦n ha de darse en el plano bilateral, el iberoamericano y el eurolatinoamericano. Am¨¦rica Latina es la ¨²nica regi¨®n en la pol¨ªtica exterior espa?ola con esas tres dimensiones presentes, lo que exige planificar la pol¨ªtica exterior desde una perspectiva de pol¨ªtica de Estado. Frente al bilateralismo actual, es necesaria una actuaci¨®n m¨¢s estrat¨¦gica e integrada en el ¨¢mbito iberoamericano, superando el retraimiento observado en las Cumbres iberoamericanas y ¡°reeuropeizar¡± esta relaci¨®n con una actuaci¨®n m¨¢s proactiva en Bruselas, m¨¢s necesaria a¨²n por estar la UE inmersa en una amplia redefinici¨®n de su acci¨®n exterior a la que Am¨¦rica Latina no es ajena.

Jos¨¦ Antonio Sanahuja es profesor en la Universidad Complutense de Madrid.