Una radio para dar voz al barrio

Sentadas alrededor de una peque?a mesa blanca hablan de sus preocupaciones. De las suyas y de las de sus vecinos. Conversan sobre el desempleo, la pobreza, la falta de seguridad, la libertad de las mujeres... No se re¨²nen en el sal¨®n de casa, ni en una cafeter¨ªa, lo hacen frente a los micr¨®fonos de una radio comunitaria. Cuatro amas de casa del barrio sevillano de Pol¨ªgono Sur, marcado hist¨®ricamente por la exclusi¨®n social y el narcotr¨¢fico, conducen desde hace cinco a?os un programa radiof¨®nico (Mujeres por el barrio) que no solo pretende mostrar la realidad y los problemas de esta deprimida zona sino tambi¨¦n para dar voz y poder a la mujer. ¡°Ya es hora de que todas nos enteremos de que valemos para mucho m¨¢s¡±, afirma rotunda Carmen Lorence.

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Sin necesidad de guion y con grandes ganas de hacerse escuchar, estas mujeres afrontaron ¡°con muchos nervios¡± el reto de abrir cada martes una ventana hacia el barrio en Radio Abierta. ¡°Todas nos hemos criado aqu¨ª, qui¨¦nes mejor para contar lo que pasa todos los d¨ªas¡±, expone Lorence. ¡°Tenemos las mismas preocupaciones que nuestros vecinos: el paro, el c¨®mo llegar a fin de mes, el vandalismo...¡±, a?ade Francisca Mellado antes de explicar su situaci¨®n: ¡°Recibo una paga de viudedad de 480 euros y tengo que ayudar a mi hija y a sus dos ni?os¡±.

Marcado por un alto ¨ªndice de pobreza y analfabetismo, Pol¨ªgono Sur registra una tasa de absentismo escolar que ha pasado en los ¨²ltimos a?os del 50% al 12% y una de desempleo que duplica la media andaluza (que ronda el 28%). ¡°C¨®mo no vamos a hablar del drama del paro, si lo sufrimos en nuestra propia casa. Mi hijo est¨¢ cansado de echar curr¨ªculums, tiene 23 a?os y es electricista. Dice que si no encuentra trabajo tendr¨¢ que emigrar¡±, lamenta Lorence, quien destaca la necesidad de acabar con la estigmaci¨®n de los vecinos. ¡°Si dices que vives en Pol¨ªgono Sur, nadie te contrata¡±, a?ade la mujer antes de criticar el abandono del barrio por parte de las Administraciones. ¡°Pero aqu¨ª estamos nosotras, para hacernos escuchar¡±, le replica su compa?era Mar¨ªa Luisa Caballero, quien exige la construcci¨®n de una comisar¨ªa. ¡°Llevamos 30 a?os esperando¡±, recuerda.

Con este esp¨ªritu reivindicativo, el programa ha sido recientemente premiado por la Junta de Andaluc¨ªa, entre otras razones, por ¡°la funci¨®n de inclusi¨®n que cumple y su labor en favor de la igualdad de g¨¦nero¡±. ¡°Para m¨ª el programa lo es todo, me ha dado alas, libertad, confianza en m¨ª misma, antes no sal¨ªa de casa y ahora no paro¡±, asegura emocionada Conchi L¨®pez. ¡°Cuando me propusieron hacerlo pens¨¦ que estaban locos, les dije que si no sab¨ªa ni hablar c¨®mo me iba a poner delante de un micr¨®fono¡±, asegura L¨®pez, quien acude a la escuela de adultos para mejorar su lectura y ortograf¨ªa. ¡°La evoluci¨®n personal de estas mujeres ha sido brutal. Y no solo eso, se han convertido en referente de sus vecinas. Les est¨¢n demostrando cada d¨ªa que las mujeres pueden hacer muchas cosas m¨¢s¡±, explica la responsable del comisionado creado para la normalizaci¨®n de la zona, Mar¨ªa del Mar Gonz¨¢lez, quien resalta que el programa sirve para acercar la barriada a la ciudad.

Mujeres por el barrio forma parte de un taller de radio que la asociaci¨®n Entre Amigos, en colaboraci¨®n con voluntarios de la residencia universitaria Flora Trist¨¢n, realiza dentro de los programas de apoyo y de inclusi¨®n con familias de la barriada en el colegio p¨²blico Andaluc¨ªa. ¡°Con actividades como esta las mujeres ganan en autoestima. Y cada d¨ªa les damos m¨¢s libertad para que elaboren el programa, busquen a los entrevistados...¡±, se?ala la voluntaria Claudia Bonilla.

Y como asegura Lorence, tanto el programa como el barrio son mucho m¨¢s. ¡°Tambi¨¦n hablamos de sexualidad, damos consejos a las mujeres, del drama de los refugiados... siempre sin olvidar el barrio¡±, asegura la mujer, quien defiende que ¡°Pol¨ªgono Sur no es todo delincuencia y prejuicio, tambi¨¦n son asociaciones, eventos, familias y un barrio lleno de vida¡±.