Los tres yihadistas que se trag¨® la tierra
Said, Parlin y Mustaf¨¢, terroristas formados en Espa?a llevan m¨¢s de diez a?os desaparecidos
Tres terroristas formados en Espa?a en los a?os ochenta y noventa, cuando la ra¨ªces de la yihad florec¨ªan t¨ªmidamente en peque?as mezquitas, locutorios y carnicer¨ªas sin que casi nadie se diera cuenta de lo que iba a pasar. En la ¨¦poca en la que a los salafistas no se les deten¨ªa, solo se les observaba. Cuando los pocos agentes que segu¨ªan su rastro solo o¨ªan al durmiente y escuchaban su respiraci¨®n. El primero es un indonesio que invent¨® la bomba volante, un artilugio mortal; el segundo, marroqu¨ª, es el ¨²nico autor material de la matanza del 11-M en Madrid que todav¨ªa sigue hu¨ªdo; el ¨²ltimo, un sirio nacionalizado espa?ol, cre¨® la figura del lobo solitario y dise?¨® la nueva yihad, la guerra qu¨ªmica y bacteriol¨®gica. Los tres son cabos sueltos de un peligroso engranaje, tres misterios sin resolver porque han desaparecido sin dejar rastro. Nadie puede asegurar a ciencia cierta donde se encuentran.
Parlindungan Siregar, alias Parlin o El Chino, de 59 a?os, se march¨® en silencio de Espa?a y su pista se perdi¨® en 2001 en Poso, en la isla indonesia de Sulawesi, una de las 17.000 del archipi¨¦lago donde entonces dirig¨ªa un campo de entrenamiento terrorista con la ayuda de sus ¡°hermanos¡± espa?oles a los que recib¨ªa all¨ª como invitados. Quince a?os despu¨¦s Siregar es un objetivo preferente de todas las polic¨ªas del mundo y figura en las principales listas de terroristas. En la de la Polic¨ªa de la Rep¨²blica de Indonesia, fechada en marzo de 2016, ocupa el n¨²mero tres en un interminable listado de 380 personas, en su mayor¨ªa yihadistas.
Este indonesio, de estatura media, barbilampi?o y pelo negro azabache vivi¨® durante una d¨¦cada en Espa?a donde estudi¨® ingenier¨ªa aeron¨¢utica en la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid gracias a una beca de Construcciones Aeron¨¢uticas (CASA). Recib¨ªa 600 euros al mes y un seguro m¨¦dico gracias a las ayudas del Gobierno y de la Agencia Espa?ola de Cooperaci¨®n (AECI). La misma que bec¨® a Serhane Abdelmajid, El Tunecino, uno de los cerebros y suicidas del 11-M.
Parlin, el ingeniero aeron¨¢utico, invent¨® una bomba volante que todav¨ªa no se ha usado
La principal aportaci¨®n de Parlin a la yihad es el dise?o de un dirigible cargado de explosivos y accionado durante la noche por control remoto. Un arma letal que puede alcanzar cualquier objetivo. Un artilugio que figura en los manuales de casi todos los servicios de inteligencia del planeta y cuyos planos fueron descubiertos por la Polic¨ªa espa?ola al desmantelar la c¨¦lula de Imad Eddin Barakat, Abu Dahdah, a la que pertenec¨ªa el indonesio, cintur¨®n negro del k¨¢rate y Kung-fu, deportes que practicaba en gimnasios de Madrid.
Desde el 11-S en 2001 la seguridad a¨¦rea es una de las prioridades de los servicios de inteligencia que sospechan que Parlin ha seguido trabajando en su proyecto. Las pocas im¨¢genes de este yihadista ligado a Jemaah Islamiyah, entonces un poderoso aliado de Al Qaeda en Indonesia, las obtuvieron los agentes de la Unidad Central de Informaci¨®n Exterior de la Polic¨ªa (UCIE) cuando el estudiante de ingenier¨ªa aeron¨¢utica acud¨ªa calzado en sus sandalias de misionero a las manifestaciones de la ¨¦poca frente a las embajadas de Rusia, EE UU e Israel. ¡°Es uno de los terroristas m¨¢s buscado del pa¨ªs¡±, afirm¨® un jefe policial en Yakarta al Miguel Valverde, ex responsable de la Comisar¨ªa General de la Polic¨ªa. Los servicios de inteligencia de EE UU vinculan a un atentado en Bali.
La pista perdida del 11-M
Said Berraj podr¨ªa explicar las lagunas sin resolver del 11-M
Said Berraj, alias Said el Mensajero, de 44 a?os, es la pista p¨¦rdida y m¨¢s codiciada de los atentados del 11-M en 2004 en Madrid en los que murieron 192 personas en las explosiones de los cuatro trenes de Atocha. Las investigaciones policiales y judiciales coinciden en que fue uno de los autores materiales del atentado y su importancia radica en que es el ¨²nico testigo del n¨²cleo duro de la c¨¦lula que sigue con vida. Seis de los yihadistas que perpetraron la matanza se suicidaron en Legan¨¦s y de los que huyeron, salvo en el caso de Said Berraj, hay constancia de que murieron perpetrando acciones suicidas en Irak. ¡°Es un personaje de una importancia vital para esclarecer algunas lagunas del atentado que siguen sin resolver porque todos los terroristas de este atentado han muerto¡±, afirma un responsable policial que reconoce no tener pistas s¨®lidas sobre su paradero. ?D¨®nde est¨¢ Said Berraj? ¡°Nadie lo sabe. No hay casi huellas en su fuga. Pero seguiremos busc¨¢ndolo¡±, afirma.
El Mensajero era un tipo conocido en el mezquita de Abu Baker, pr¨®xima a la madrile?a calle de Bravo Murillo, y estaba siendo vigilado por la Polic¨ªa meses antes del atentado. Su tel¨¦fono hab¨ªa sido intervenido, pero los agentes no lograron identificarlo hasta el 9 de marzo, dos d¨ªas antes del ataque a los trenes, fecha en la que Interpol envi¨® desde Turqu¨ªa su fotograf¨ªa y sus huellas dactilares. Ese mismo d¨ªa ya hab¨ªa desaparecido de su casa en Madrid, al igual que hicieron otros autores materiales del atentado. Berraj, miembro de la c¨¦lula de Abu Dahdah, hab¨ªa sido detenido en Estambul cuatro a?os antes en compa?¨ªa de otros destacados cuatro yihadistas que viv¨ªan en Madrid. Hoy, todos menos ¨¦l est¨¢n muertos o en prisi¨®n.
En 2003 las c¨¢maras de la embajada de Estados Unidos en la calle Serrano de Madrid captaron la imagen de un tipo peque?o y enjuto. Era Said Berraj vigilando el edificio al que tuvo en su cabeza como un posible objetivo.La temible Direcci¨®n de Vigilancia del Territorio (DST) vigila desde hace a?os a la familia de este yihadista desaparecido, pero sin resultados.
Setmarian cre¨® la figura del terrorista solitario que ha aparecido en Europa
El beso de Bin Laden
Mustaf¨¢ Setmarian, alias Abu Musab al Asuri, fundador de Al Qaeda en Espa?a, es el que m¨¢s alto ha llegado de los tres. En 2001 Osama Bin Laden despu¨¦s de darle un beso en la mejilla le encarg¨® que dise?ara la nueva yihad: la bomba sucia, la guerra qu¨ªmica y bacteriol¨®gica. El creador de la figura del lobo solitario, emulado ahora por yihadistas en distinto pa¨ªses de Europa, lleva desaparecido 11 a?os. El paradero del hombre que en los a?os ochenta sembr¨® la semilla de la yihad en Espa?a es un misterio para todos los servicios de inteligencia.
Nadie se atreve a afirmar con rotundidad donde est¨¢. Ni los norteamericanos que ofrecieron 5 millones de d¨®lares por su cabeza y que lo tuvieron en su poder en c¨¢rceles secretas durante a?os despu¨¦s de ser detenido en Pakist¨¢n en 2005. Desde entonces se lo trag¨® la tierra. ¡°Ignoro donde est¨¢¡±, ha afirmado una y otra vez por tel¨¦fono este peri¨®dico, su mujer espa?ola desde el pa¨ªs ¨¢rabe en el que reside junto a sus cinco hijos.
La ¨²nica evidencia documentada del paradero de este hombre pelirrojo y de ojos verdes la revel¨® EL PA?S en 2011 al publicar documentos secretos del Ministerio de Defensa de EE UU, fechados en 2008 y redactados por militares en la c¨¢rcel de Guant¨¢namo (Cuba), donde se afirma que Abu Musab al Suri fue entregado a Siria.
"Preguntamos a los sirios y no nos responden¡±, afirma un responsable de los servicios de inteligencia espa?oles. Un testigo protegido asegura que Mustaf¨¢ es la persona que coloc¨® la bomba que caus¨® 18 muertos en 1985 en el restaurante el Descanso en Madrid. ¡°Nos encantar¨ªa cazarlo, pero le confieso que este hombre, un icono del yihadismo, ser¨ªa un peligro a?adido si estuviera preso en una c¨¢rcel espa?ola¡±, reconoce un responsable de la lucha antiterrorista.
investigacion@elpais.es
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