El ¡®violador de Pir¨¢mides¡¯ pide perd¨®n a sus v¨ªctimas y pide una segunda oportunidad

Arlindo Luis Carbalho, conocido como el violador de Pir¨¢mides, ha pedido perd¨®n a sus v¨ªctimas despu¨¦s de salir de la c¨¢rcel en la que ha cumplido 20 a?os de condena y ha reclamado a los vecinos de su pueblo natal, Valencia de Alc¨¢ntara (C¨¢ceres), donde vivir¨¢ con su madre, que le den una segunda oportunidad para poder reinsertarse en la sociedad, puesto que se considera rehabilitado.

En una entrevista concedida a Canal Extremadura Televisi¨®n, Carbalho, de 51 a?os, ha asegurado que "casi la mitad" de su condena en prisi¨®n ha estado "trabajando con psic¨®logos", motivo por el cual ha querido trasladar a los vecinos que "no tienen que temer de nada".

Asimismo, es consciente de que decir esto de palabra "es muy f¨¢cil", pero que lo va a demostrar con hechos "d¨ªa a d¨ªa", tras reconocer que "se tiene que armar revuelo" entre los vecinos con su llegada, pues considera que "forma parte de la vida social" en este municipio con una poblaci¨®n que ronda los 6.000 habitantes muy cercana a la frontera con Portugal.

M¨¢s informaci¨®n

La castraci¨®n qu¨ªmica contra la violaci¨®n

El pederasta espa?ol m¨¢s buscado de Europa

La fiscal¨ªa pide prisi¨®n permanente revisable por una violaci¨®n mortal

Violaciones en grupo, la barbarie sexual de Brasil

En sus declaraciones ante la cadena auton¨®mica extreme?a, subraya que hasta ahora nunca hab¨ªa tenido la oportunidad de decirle a sus v¨ªctimas que lo siente "de verdad". "Lamento mucho lo que hice. Ojal¨¢ no hubiera pasado nunca, pero pas¨®, y lo siento como la persona que m¨¢s".

"He asumido mi responsabilidad. Soy consciente de lo que he hecho, me arrepiento", ha dicho, al tiempo que ha a?adido que cree que merece tener una segunda oportunidad, porque considera que tiene "actitud y capacidad para ello".

Por ello, ha pedido a los vecinos que no piensen que cualquier d¨ªa se le van "a cruzar los cables", porque para ello cuenta con "apoyo y ayuda", si bien ha se?alado que no va a "bajar la guardia". "Si algo he aprendido en las terapias es que hay que estar ah¨ª en todo momento".

Sobre su futuro, espera poder establecerse en esta peque?a localidad, donde tiene su primer contacto con la sociedad tras dos d¨¦cadas en prisi¨®n en las que no ha disfrutado de ning¨²n permiso penitenciario, aunque reconoce que encontrar un trabajo ser¨¢ complicado.

Carbalho ha recalado en esta localidad extreme?a despu¨¦s de abandonar el pasado s¨¢bado la prisi¨®n tras cumplir 20 a?os de c¨¢rcel por 35 violaciones cometidas entre 1988 y 1996 en el barrio madrile?o de Pir¨¢mides.

En mayo de 2006, el Tribunal Supremo confirm¨® la condena de 514 a?os de prisi¨®n impuesta a Carbalho, ahora con 51 a?os, por la Audiencia Provincial de Madrid por 28 delitos de agresi¨®n sexual con detenci¨®n ilegal y robo con intimidaci¨®n. En 1996 fue detenido y encarcelado tras confesar que hab¨ªa violado a m¨¢s de un centenar de mujeres en la capital.

Pese a ello, solo ha cumplido veinte a?os de internamiento, dado que era el l¨ªmite de cumplimiento efectivo del C¨®digo Penal de 1995. En su sentencia, el Alto Tribunal rechaz¨® la petici¨®n de su defensa de que se le aplicara una atenuante por trastorno mental.

Los magistrados se?alaron que sus v¨ªctimas eran "mujeres, siempre diferentes, a las que segu¨ªa el acusado tras haber terminado su jornada laboral, en unos hechos que se desarrollan en un largo periodo de tiempo: ocho a?os, desde 1988 cuando el acusado ten¨ªa 23 a?os, hasta 1996".

En el juicio, las v¨ªctimas relataron que su agresor las abordaba en una estaci¨®n de Metro, en su mayor¨ªa en la de M¨¦ndez ?lvaro. Tras ello, las llevaba a un parque cercano al paseo de las Acacias.