El ¡®nuevo socialismo¡¯

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Los seguidores de S¨¢nchez se vuelcan en las aportaciones a su campa?a

Elorza dice que los seguidores de S¨¢nchez desean que D¨ªaz ¡°salte ya a la arena¡±

Ante la proximidad de las primarias que en el PSOE han de decidir su liderazgo, el equipo de asesores de Pedro S¨¢nchez ha elaborado un extenso documento, cuyo alcance desborda ampliamente el marco de la circunstancia que lo hizo nacer. De entrada se nos dice que ¡°este documento plantea la estrategia del socialismo democr¨¢tico espa?ol para los pr¨®ximos lustros¡±. Se trata de un brindis al sol, ya que existe el riesgo de que a medio plazo no exista socialdemocracia como fuerza pol¨ªtica relevante ni en Europa ni en Espa?a. Ello no impide que el presente llamamiento a los socialistas ofrezca en gran medida un conjunto de propuestas bien articuladas, que puede servir de soporte ideol¨®gico a una previsible victoria de S¨¢nchez en las primarias. Sobre todo ante las limitaciones de la oferta de sus previsibles contrincantes.

El proyecto se encuentra en las ant¨ªpodas del acuerdo firmado tras el 20-D con Ciudadanos. La aspiraci¨®n de ganar con aliados de distinto signo lleva a este salto hacia orillas radicales, muchas veces en la cercan¨ªa e incluso en la confluencia con Podemos. Caso de la renta universal. El planteamiento arranca de una simplificaci¨®n fundamental: la socialdemocracia tiene por enemigo al neoliberalismo en econom¨ªa y al PP en lo pol¨ªtico. No existen t¨¦rminos medios y ello facilita las cosas de cara a la propaganda, pero no para la comprensi¨®n de los procesos. Es v¨¢lido el diagn¨®stico de que frente a las posibilidades de la revoluci¨®n tecnol¨®gica, avanza la desigualdad. Pero esta deriva perversa no es solo el producto de que hayan imperado los planteamientos de Reagan y Thatcher, sino de que todo ello tiene lugar en un marco econ¨®mico, la globalizaci¨®n, donde l¨®gicamente existen dificultades europeas para competir con las potencias emergentes, China en primer t¨¦rmino, que cuestionan la supervivencia de esa Europa balneario de que hablaba Javier Pradera. Y, obviamente, la inercia socialista no lleva a salida alguna, pero ¡°el proyecto propio alternativo¡±, sin tener en cuenta que nada contracorriente, tampoco.

El riesgo es tener m¨¢s Podemos y menos PSOE

La afirmaci¨®n rigurosa de los valores del socialismo y de las exigencias estrat¨¦gicas coexiste as¨ª con callejones sin salida, como las referencias al terrorismo yihadista o a la reforma constitucional, que empa?an el rigor de la amplia relaci¨®n de cambios precisos y mecanismos de regulaci¨®n a introducir en nuestra econom¨ªa. El problema del populismo izquierdista no existe; a pesar de lo visto, su concurso es requerido, sin pensar en el precio pagado por su estrategia antiPSOE de 2016. Al rechazar ¡°un PSOE desnaturalizado, pragm¨¢tico y solo moderadamente reformista¡± ¡ªdebe ser el de la condenada Gestora¡ª surge la idea de la orientaci¨®n hacia los movimientos sociales bajo ¡°un liderazgo integrador¡±. El riesgo es tener m¨¢s Podemos y menos PSOE.