Una Justicia de todos contra todos
Los nombramientos en la fiscal¨ªa y los ataques pol¨ªticos enrarecen el ambiente en el poder judicial
La Justicia espa?ola atraviesa estos d¨ªas fuertes turbulencias institucionales, con sacudidas que afectan a todos los estamentos. Los nombramientos en la c¨²pula de la Fiscal¨ªa -en especial las jefaturas de Anticorrupci¨®n, de la Audiencia Nacional y de la Regi¨®n de Murcia- han sido tachados de ¡°pol¨ªticos e ideol¨®gicos¡± por los fiscales progresistas y por los partidos de la oposici¨®n, que ven detr¨¢s de ellos la mano directa del ministro de Justicia, Rafael Catal¨¢. Al mismo tiempo, las discrepancias de los fiscales encargados de algunas de las causas m¨¢s sensibles, como el caso N¨®os o la Operaci¨®n P¨²nica, con sus superiores jer¨¢rquicos han salido a la luz. La reacci¨®n del PP y del Gobierno en estos casos ha acabado por poner en entredicho la independencia del ministerio p¨²blico.
Los jueces viven tambi¨¦n su particular bronca. La decisi¨®n del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) de abrir una investigaci¨®n al magistrado Manuel Ruiz de Lara por supuestamente no pedir la compatibilidad para organizar unos torneos de debate universitario y el hecho de que estas pesquisas, seg¨²n fuentes pr¨®ximas al magistrado, fueran secretas, han soliviantado durante unos d¨ªas a la carrera judicial.
Las principales asociaciones judiciales han pedido conjuntamente explicaciones sobre las circunstancias de esta investigaci¨®n a Carlos Lesmes, presidente del Consejo del Poder Judicial. Los jueces decanos de toda Espa?a se han adherido, en un comunicado, a esta petici¨®n ante el temor de que existan ¡°otros expedientes tramitados en similares condiciones¡±. Las explicaciones p¨²blicas dadas por el Consejo, que ha negado que en ning¨²n momento haya emprendido unas diligencias secretas sobre ning¨²n magistrado, atenuaron notablemente este malestar.
Crispaci¨®n digital dentro de los juzgados
A los ataques a la independencia de jueces y fiscales, se suma un factor interno de crispaci¨®n profesional. ¡°La reforma del art¨ªculo 324 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal [que limita a seis meses el plazo de investigaci¨®n de causas no complejas] y las comunicaciones telem¨¢ticas [el sistema Lexnet, muy criticado por sus fallos] han enrarecido mucho el ambiente en los juzgados y est¨¢ produciendo confrontaci¨®n entre los colectivos jur¨ªdicos¡±, afirma ?lvaro Garc¨ªa, de la Uni¨®n Progresista de Fiscales (UPF.) ¡°La reforma legal no ha da?ado a la fiscal¨ªa como instituci¨®n, pero s¨ª que nos ha hecho muy dif¨ªcil el trabajo¡±, se queja.
El ambiente entre jueces y fiscales, sobre todo entre las bases y las c¨²pulas de ambas carreras -y entre estos cuerpos y el poder pol¨ªtico- no estaba tan enrarecido desde el 23 de febrero de 2009, cuando el ministro socialista Mariano Fern¨¢ndez Bermejo dimiti¨® tras conocerse que coincidi¨® en una cacer¨ªa con el juez Baltasar Garz¨®n en los primeros d¨ªas de la Operaci¨®n G¨¹rtel. Cinco d¨ªas antes, los magistrados de toda Espa?a hab¨ªan realizado la primera huelga de su historia en protesta por la falta de medios.
Precisamente, las malas condiciones de trabajo en algunos juzgados han vuelto a unir a los magistrados. Las asociaciones de jueces y a los decanos de los partidos judiciales de la Comunidad de Madrid han exigido al Gobierno de Cristina Cifuentes que ponga en marcha el plan de choque de mejora de las sedes judiciales que anunci¨® el pasado enero tras el incendio en los juzgados de Violencia contra la Mujer de Torrej¨®n de Ardoz. La pr¨®xima semana el colectivo judicial madrile?o anunciar¨¢ movilizaciones.
El panorama de una justicia en la que todos est¨¢n enfrentados con todos se completa con el frente pol¨ªtico. En las ¨²ltimas semanas, los partidos, especialmente aquellos que se han visto envueltos en casos de corrupci¨®n, como el PP o la antigua Converg¨¨ncia, han redoblado sus ataques a la independencia judicial y fiscal. El caso m¨¢s sonado lo protagoniz¨® el propio ministro de Justicia, que critic¨® la decisi¨®n de las fiscales del caso P¨²nica de no firmar, como era su derecho, el informe contrario a enviar al Tribunal Superior de Justicia de Murcia la causa contra el presidente de la Regi¨®n, Pedro Antonio S¨¢nchez. Sus palabras fueron amplificadas por el portavoz parlamentario del PP, Rafael Hernando, que directamente acus¨® a algunos fiscales de ¡°inventarse delitos¡±. El criterio fue impuesto por el fiscal general del Estado, Jos¨¦ Manuel Maza tras consultar a los fiscales de sala de la secretar¨ªa t¨¦cnica ¨Cel Estado Mayor del ministerio p¨²blico, en palabras del propio Maza- y a los fiscales del Tribunal Supremo.
La fiscal¨ªa tambi¨¦n ha recibido ataques en las ¨²ltimas semanas del soberanismo catal¨¢n. Los insultos sufridos por la fiscal jefe de Barcelona, Ana Magaldi, por parte de un grupo de independentistas radicales que acudieron a apoyar al expresidente de la Generalitat, Artur Mas, fueron despachados por Neus Munt¨¦, portavoz de la Generalitat con la siguiente frase: ¡°En todo sueldo ha de entrar la aceptaci¨®n de la cr¨ªtica por las maneras de hacer¡±.
La semana pasada el fiscal general Maza compareci¨® en el Congreso para dar explicaciones sobre el caso del presidente de Murcia y sobre los nombramientos en la c¨²pula del ministerio p¨²blico, que los partidos de la izquierda tacharon de ¡°purga¡±. Maza defendi¨® la independencia de la fiscal¨ªa y afirm¨® que esta investiga ¡°sin atender a la condici¨®n o ideolog¨ªa de la persona acusada¡±. Los argumentos de Maza no satisficieron a los grupos de la oposici¨®n.
La Asociaci¨®n de Fiscales, mayoritaria en la carrera, y de corte conservador, afirm¨®, en una nota de prensa, tras la pol¨¦mica sobre los cambios en las jefaturas que ¡°trasladar una pretendida sumisi¨®n al poder Ejecutivo resulta falaz y ocasiona a la Carrera fiscal un da?o dif¨ªcilmente reparable¡±.
?lvaro Garc¨ªa, portavoz de la Uni¨®n Progresista de Fiscales (UPF), afirma que ¡°es dif¨ªcil encontrar en pa¨ªses de nuestro entorno a un ministro de Justicia que comente si un juez lo hace bien o mal, que explique lo que hace la Fiscal¨ªa o que opine si una persona est¨¢ bien o mal imputada¡±. No obstante, Garc¨ªa, cuya asociaci¨®n ha pedido la dimisi¨®n de Catal¨¢, prefiere ver el vaso medio lleno. ¡°Es bueno que se cuestione nuestra independencia. Los ciudadanos no van a dejar que nos den la instrucci¨®n [de las causas penales] si dentro de la instituci¨®n no tenemos instrumentos y mecanismos de control cre¨ªbles y ahora la sociedad no se los cree¡±.
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