La isla a la que proh¨ªben crecer
Los tribunales dejan sin suelo urbanizable A Illa de Arousa
Carlos Iglesias es el segundo alcalde socialista de la historia de A Illa de Arousa, el ¨²nico Ayuntamiento insular de Galicia y el ¨²ltimo que proclam¨® su independencia cuando se desconect¨® de Vilanova de Arousa, el pueblo natal de Valle Incl¨¢n, hace ahora 30 a?os. El regidor todav¨ªa no da cr¨¦dito a los ¨²ltimos dict¨¢menes de los tribunales que han dejado a este archipi¨¦lago de 5.000 habitantes, y con una densidad demogr¨¢fica de las m¨¢s elevadas, sin suelo urbanizable para poder crecer.
El plan urban¨ªstico municipal aprobado en 2002, extremadamente guardi¨¢n en t¨¦rminos medioambientales, contempl¨®, para este territorio de siete kil¨®metros cuadrados, unas previsiones de crecimiento con las que apenas iba a superar los 15.000 vecinos. Con la posterior aprobaci¨®n de la Xunta de Galicia del Plan del Litoral (POL), el archipi¨¦lago pas¨® de tener 102 hect¨¢reas de futuro suelo urbano consolidado a perder de golpe 32 de ellas, y dejando al Ayuntamiento sin competencias en urbanismo.
¡°La presi¨®n demogr¨¢fica ya es insoportable porque toda la poblaci¨®n se concentra en medio kil¨®metro cuadrado y la mayor¨ªa del terreno ya est¨¢ construido¡±, sostiene Iglesias. ¡°Nos han dejado sin expectativas urban¨ªsticas y sin poder cumplir las cortas previsiones que ten¨ªamos, precisamente para protegernos de la especulaci¨®n del ladrillo, y ahora, nos imponen otras normas a¨²n m¨¢s restrictivas que no tienen ni pies ni cabeza¡±, apostilla el alcalde.
La pelea por recuperar la p¨¦rdida del suelo edificable se debati¨® sin ¨¦xito por la v¨ªa del contencioso administrativo y el Ayuntamiento acab¨® recurriendo al Tribunal Supremo que desestim¨® sus argumentos contra las sentencias favorables a Costas del Estado y la Xunta. A Illa se ha quedado sin armamento jur¨ªdico, y los propietarios de los terrenos de los seis n¨²cleos de poblaci¨®n en litigio, en tierra prohibida.
El regidor despliega sobre su mesa mapas y documentos fotogr¨¢ficos, parte de la artiller¨ªa que han empleado para que estos vecinos puedan construir sus casas, parcelas peque?as y heredadas de sus antepasados que en su mayor¨ªa est¨¢n cerca de otros n¨²cleos con servicios de agua, luz, saneamiento y acceso rodado. ¡°Tutelar un territorio que nunca vieron delante es algo inadmisible¡±, proclama Iglesias. Para ¨¦l esta situaci¨®n tiene un componente pol¨ªtico y cree que la ¨²nica baza que les queda es invitar a responsables de Costas que legislan desde Madrid a que comprueben que la petici¨®n de los vecinos no es en absoluto descabellada.
¡°Los invitamos a que vengan aqu¨ª, que comprueben sobre el terreno lo que hemos reclamado en los tribunales, porque no pueden meter a esta isla en el mismo saco que al resto, por eso llevamos tantos a?os pidiendo la declaraci¨®n de singularidad del territorio, pero no hay forma. Estamos rodeados de agua por todas partes y ahogados por las leyes¡±, explica el alcalde.
¡°No sirve para nada lo que se dise?¨® con los gobiernos de Aznar a partir del 1996 y nosotros nos amparamos en aquellos par¨¢metros, pero de golpe y porrazo nos cambian el plan general de hace 15 a?os y prohibirnos que tengamos pisos y no casas donde poder guardar los aperos de trabajo...¡±, incide Iglesias.
A Illa es uno de los pocos ayuntamientos costeros que ha eliminado los vertidos al mar y la calidad del agua de sus playas es excelente. ¡°Nos sentimos completamente agraviados respecto a la Empuriabrava (Girona) donde su l¨ªnea de costas est¨¢ en la l¨¢mina de agua para que los grandes multimillonarios rusos pueden entrar en sus mansiones con su lancha y aqu¨ª coartan nuestro crecimiento¡±, lamenta el alcalde.
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