El pleno del Congreso reprobar¨¢ por primera vez a un ministro y a la c¨²pula fiscal
El PP afronta en solitario el rechazo del Congreso a Catal¨¢, Maza y Moix
El Pleno del Congreso aprobar¨¢ este martes la ins¨®lita reprobaci¨®n de un ministro, de un fiscal general del Estado y del fiscal jefe anticorrupci¨®n. Salvo sorpresas, el Pleno aprobar¨¢ la moci¨®n del PSOE solo con los votos en contra del PP.
La inmensa mayor¨ªa de la C¨¢mara reprobar¨¢ a Rafael Catal¨¢, Jos¨¦ Manuel Maza y Manuel Moix por entorpecer la investigaci¨®n de destacados casos de corrupci¨®n, especialmente el llamado caso Lezo. Todos los grupos parlamentarios, salvo el del Gobierno, que est¨¢ en minor¨ªa en la C¨¢mara, acusar¨¢n a los tres de proteger a presuntos corruptos encarcelados.
¡°Es una medida simb¨®lica y sin ning¨²n efecto, por eso siempre defendimos que hab¨ªa que ir m¨¢s all¨¢, pidiendo la dimisi¨®n, la comparecencia en pleno del presidente y la moci¨®n de censura, pero la apoyaremos¡±, asegur¨® a este peri¨®dico Irene Montero, portavoz de Podemos. ¡°Si el Gobierno no cesa en estos d¨ªas a Moix y no hace nada, no nos queda m¨¢s remedio que apoyar la reprobaci¨®n¡±, afirm¨® Miguel Guti¨¦rrez, secretario general del grupo de Ciudadanos.
Esta situaci¨®n ins¨®lita se producir¨¢ en medio de una ofensiva sobre la corrupci¨®n contra el Gobierno que se inici¨® la pasada semana, que seguir¨¢ el mi¨¦rcoles con preguntas del PSOE al Ejecutivo, incluido Mariano Rajoy, y ante la inminencia de la presentaci¨®n de una moci¨®n de censura de Podemos -posiblemente este mismo martes- con el detonante, precisamente, de los esc¨¢ndalos.
La moci¨®n del PSOE tiene un valor simb¨®lico y pol¨ªtico, aunque no ejecutivo. Nada obliga al presidente del Gobierno a cumplirlo, pero lastra pol¨ªticamente al Ejecutivo por ser un hecho ins¨®lito, por la mayor¨ªa parlamentaria que reunir¨¢ y por las sombras de sospechas que caer¨¢n ante cada actuaci¨®n de Catal¨¢, Maza y, sobre todo, Moix.
El origen est¨¢ en el inter¨¦s del Gobierno por remover la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n, provocando la salida de la anterior fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal, por negarse a los nombramientos; la designaci¨®n de Moix pese a que Maza fue advertido de que los investigados del caso Lezo le quer¨ªan para el cargo y algunas actuaciones como el intento por parar diligencias o apartar a fiscales del caso. Tambi¨¦n mensajes del ministro de Justicia al expresidente de la Comunidad de Madrid Ignacio Gonz¨¢lez hoy encarcelado.
El ministro solo puede abandonar el cargo por dimisi¨®n o por destituci¨®n por parte de Rajoy. Catal¨¢ dej¨® claro la pasada semana en la Comisi¨®n de Justicia que no renunciar¨¢ porque no considera que haya hecho nada reprobable y el presidente del Gobierno le ha mostrado su respaldo expreso.
Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz fue reprobado como ministro del Interior en Comisi¨®n y cuando el Gobierno estaba en funciones. Y antes Magdalena ?lvarez fue reprobada como ministra socialista de Fomento en el Senado. Es decir, nunca se ha reprobado as¨ª a un ministro.
Ni se ha hecho con el fiscal general del Estado. Seg¨²n el Estatuto Fiscal, el fiscal general puede cesar por ¡°incumplimiento grave o reiterado de sus funciones¡±, lo que puede ser apreciado por el Consejo de Ministros. Es decir, que o dimite o es destituido por el Gobierno.
En el caso de Moix, esa misma norma se?ala que ¡°podr¨¢n ser removidos por el Gobierno a propuesta del Fiscal General del Estado, que deber¨¢ o¨ªr previamente al Consejo Fiscal y al interesado¡±.
La moci¨®n del PSOE alude a ¡°reiteradas injerencias del ministro de Justicia para obstaculizar la acci¨®n de la Justicia en las causas judiciales por delitos relacionados con la corrupci¨®n en las que resultan investigados cargos p¨²blicos y otros miembros del PP, los nombramientos promovidos por el ministerio fiscal para favorecer los intereses de los investigados en estas causas, las maniobras que se han acreditado en el seno del Ministerio P¨²blico dirigidas a obstaculizar la actuaci¨®n de los propios fiscales encargados de las mismas y las graves consecuencias que estas inaceptables actuaciones suponen para el funcionamiento de la Justicia y el Estado de derecho¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.