Europa investiga el caso de los beb¨¦s robados en Espa?a
Un grupo de eurodiputados se re¨²ne con el Fiscal General, las v¨ªctimas y la Iglesia
100.000 euros para una plataforma digital que investigue perfiles gen¨¦ticos relacionados con el caso de los beb¨¦s robados en Espa?a entre los a?os 40 y 90 del siglo XX. Esa simb¨®lica partida de los Presupuestos de 2017, fruto del primer acuerdo concreto entre el PP y Podemos, abre un nuevo cap¨ªtulo en el intento de desentra?ar una trama que ya est¨¢ bajo la lupa de Europa. A finales de mayo, un grupo de eurodiputados viaj¨® a Madrid para reunirse con Jos¨¦ Manuel Maza, el fiscal general, representantes del Ministerio de Justicia, de la Comisi¨®n correspondiente en el Congreso y de la Conferencia Episcopal. ?Su meta? Elaborar un informe que reactive la investigaci¨®n de un caso que acumula miles de denuncias contra una trama que presuntamente habr¨ªa vendido beb¨¦s por toda Espa?a tras asegurar a las madres que hab¨ªan muerto en el parto.
¡°Mi opini¨®n personal es que nos enfrentamos a pruebas muchas veces contradictorias, incluso sobre la escala del esc¨¢ndalo y sobre si fueron casos aislados o redes organizadas de tr¨¢fico de beb¨¦s¡±, resume Jude Kirton-Darling, eurodiputada brit¨¢nica y jefa de la misi¨®n europea, formada a ra¨ªz de las denuncias recibidas en la Comisi¨®n de peticiones del Parlamento Europeo por parte de distintos afectados. ¡°Las v¨ªctimas desconf¨ªan totalmente de las autoridades pol¨ªticas y religiosas¡±, explica en un correo electr¨®nico. ¡°Tienen que superar un list¨®n bastante exigente para ser consideradas como tales, lo que significa que tienen la carga de la prueba y que frecuentemente se han visto forzadas a investigar sus propios casos con poco o ning¨²n apoyo legal y psicol¨®gico¡±, a?ade. ¡°Se han dado algunos pasos desde que el esc¨¢ndalo estall¨® en 2009-2010, pero se podr¨ªa hacer mucho para mejorar el apoyo a las v¨ªctimas¡±, sigue. Y subraya: ¡°Ha quedado claro que este esc¨¢ndalo es la parte m¨¢s cruda de las heridas hist¨®ricas abiertas de la Guerra Civil espa?ola y la dictadura de Franco¡±.
¡°Nos apuntamos a todo lo que ayude a conocer la verdad y a nada que sea usar esto pol¨ªticamente o de forma partidista. Ser¨ªa poco serio¡±, difiere Rosa Estar¨¢s, eurodiputada del PP, que recuerda que la opini¨®n oficial de la misi¨®n se conocer¨¢ a trav¨¦s de un informe que se publicar¨¢ entre julio y septiembre. ¡°El fiscal general y la fiscal especializada en el caso nos explicaron que esto no era una red organizada¡±, a?ade en conversaci¨®n con este diario. ¡°Es verdad que las v¨ªctimas no lo creen as¨ª y es cierto que hay puntos de vista distintos¡±, concede tras visitar Madrid con la misi¨®n europea. ¡°Ahora, la valoraci¨®n de que esto es una consecuencia de la Guerra Civil no est¨¢ contrastada. Y el informe no tiene que tener opiniones personales¡±.
En 2011, 261 personas suscribieron a trav¨¦s de la Asociaci¨®n Nacional de Afectados por Adopciones Irregulares la denuncia que puso el foco sobre la trama. Desde entonces, las distintas fiscal¨ªas provinciales han recibido un total de 2.095 denuncias. De ellas, un total de 522 han sido remitidas ante los correspondientes ¨®rganos judiciales. Sin embargo, el paso del tiempo act¨²a en contra de los afectados. En 2013, por ejemplo, muri¨® Sor Mar¨ªa, la monja imputada en el caso por presuntamente orquestar la red. Y mientras tanto, uno de los m¨¦dicos supuestamente implicados, imputado desde 2016, est¨¢ a la espera de juicio.
¡°Ya no nos creemos nada¡±, explica una portavoz de la asociaci¨®n SOS Beb¨¦s Robados, que agrupa a 400 familias afectadas. ¡°Llega un momento en el que no queremos palabras, queremos hechos¡±, reclama a los pol¨ªticos.
¡°Hay desmoralizaci¨®n", asegura Enrique Vila, abogado de una de las asociaciones, que se reuni¨® con la misi¨®n de eurodiputados a su paso por Madrid. "Hubo un arranque muy fuerte [en la presentaci¨®n de denuncias], pero luego hubo un par¨®n importante porque la fiscal¨ªa ha archivado, no ha judicializado y tener un abogado cuesta dinero¡±, a?ade. "Deber¨ªa ser el Estado quien facilitara las denuncias y pusiera abogados de oficio, como a las v¨ªctimas de violencia de g¨¦nero. Se deja todo en manos de las capacidad econ¨®mica de los particulares y no puede ser¡±.
La Fiscal¨ªa, por su parte, subray¨® ante los enviados del Europarlamento que no cejar¨¢ en su empe?o de esclarecer el caso y que ya ha buscado v¨ªas para que los hechos denunciados no prescriban. Los representantes europeos har¨¢n recomendaciones para facilitar la resoluci¨®n del caso y la atenci¨®n a las v¨ªctimas cuando presenten su informe. Se interesar¨¢n, por ejemplo, por la posibilidad de que el Congreso forme una comisi¨®n de investigaci¨®n, expresada por distintos diputados. Y tambi¨¦n se cerciorar¨¢n de que las promesas recibidas a su paso por Espa?a se conviertan en realidad.
¡°La Iglesia cat¨®lica ha aceptado abrir sus archivos bajo ciertas condiciones relacionadas con la protecci¨®n de datos¡±, asegura Kirton-Darling sobre sus gestiones en Madrid, donde se reuni¨®, entre otros, con?Jose Maria Gil Tamayo, Secretario General de la Conferencia Episcopal Espa?ola. Este diario se puso en contacto con la Conferencia Episcopal, que declin¨® hacer comentarios sobre qu¨¦ colaboraci¨®n prestar¨¢ para conectar sus bases de datos con las p¨²blicas para que as¨ª se puedan cruzar expedientes (con fechas de nacimiento, por ejemplo), facilitando el reencuentro entre padres biol¨®gicos, hijos o hermanos. Mientras tanto, Europa investiga.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.